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»» Catolicismo Romano
Traducido por Donald Dolmus
En Defensa de la Fe (endefensadelafe.org)
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En Defensa de la Fe (endefensadelafe.org)
"Si alguien dijera que el sacrificio de la misa... donde la víctima da su vida y por el cual nosotros somos reconciliados con el Padre y es diariamente inmolado en el altar por los sacerdotes... es solamente una conmemoración del sacrificio consumado en la cruz pero no es propiciatorio... ofrecido por los vivos y los muertos, por los pecados, castigos, satisfacciones y otras necesidades, que esa persona sea anatema."
No puede haber un rechazo más claro de la Biblia y del evangelio de Jesucristo. Estos breves ejemplos representan la enseñanza actual del Catolicismo Romano tal cual es enseñado y practicado por cientos de millones de católicos de hoy en día. No puede haber duda alguna que esto es un evangelio falso que, tristemente, mantiene a los católicos romanos en esclavitud y también los está llevando a las llamas, no de un "purgatorio" inventado por los papas, sino al eterno Lago de Fuego. ¿Cómo es posible que aquellos que profesan admirar a Lutero y a la Reforma se atrevan a defender el Catolicismo?
Dándose estas realidades indiscutibles, ningún evangélico podría llamar a los católicos romanos "cristianos que han nacido de nuevo". ¡La ironía más vergonzosa es que muchos líderes evangélicos y sus seguidores, mientras que por una parte dicen honrar la Reforma y su evangelio de salvación por fe sola en Jesucristo, por otra parte cierran los ojos a la verdad y actúan como si la Reforma nunca hubiera ocurrido y como si los católicos creyeran en el evangelio bíblico! ¿Hemos acaso olvidado que aquellos que no creen el evangelio bíblico están perdidos eternamente? ¿Seremos nosotros culpables de alguna manera de su eterna perdición?
Las ironías vergonzosas abundan. Aunque la Iglesia Católica Romana ya no condena a sus oponentes a la hoguera como lo hacía antes (una práctica tan repugnante aun en el mundo secular), todavía mantiene cada enseñanza y cada doctrina falsa que fue opuesta por Lutero y sus compañeros reformadores, y de esta manera continúa engañando a millones de personas. Todavía enseña la salvación por medio del bautismo, las buenas obras y el cumplimiento de los sacramentos con María como la intercesora, como la "puerta hacia Cristo"; y también continúa ofreciendo indulgencias por un precio determinado para salir del purgatorio y poder entrar al cielo; ¡y continúa rechazando la autoridad final de las Sagradas Escrituras! Todas las anatemas declaradas en el Concilio de Trento en contra de las creencias de los protestantes se mantienen en completo vigor y obligación en la doctrina católica. ¡Y aún muchos de los seguidores de Lutero hoy en día aceptan el catolicismo romano como el verdadero evangelio!
Rick Warren con Barack Obama
El Ecumenismo es una de las manifestaciones de la apostasía de los días postreros de la Iglesia.
Hasta el Islam es defendido como un "fe válida" y con la cual Rick Warren coopera a través de su plan mundial al cual él llama "La Nueva Reforma". En sus declaraciones Warren dice que él "confiaría en cualquier líder musulmán o sacerdote católico o rabino judío..." ¿Es que acaso ya no creemos en el evangelio y acaso tampoco creemos que aquéllos que lo rechazan están perdidos eternamente?
Juan Pablo II denunció todo lo que la Reforma había logrado e irónicamente él también es honrado y alabado por aquellos que dicen seguir el camino de Lutero. ¿Cómo podemos honrar dos creencias que están diametralmente opuestas? ¿Es que se han vuelto locos los ‘cristianos'? Palabras han cambiado sus definiciones, convicciones contradictorias son profesadas simultáneamente y la verdad es definida para acomodar cualquier punto de vista de la persona. Estamos navegando en un océano de ideas que no tienen ningún sentido, sin timón ni compás y aún así todo el mundo celebra el "progreso" que se está haciendo. Al igual que el mundo que parece decir "soy rico y me he enriquecido" (Apocalipsis 3:17), la iglesia voluntariamente borra las esenciales diferencias que existen entre la Verdad de Dios y las mentiras de Satanás. Aunque los evangélicos todavía afirman seguir la Palabra de Dios, nadie confronta las falsas doctrinas popularizadas por la actual radio y televisión "cristianas" y tampoco nadie confronta a "La Madre de las Rameras" como lo hizo Lutero.
La Biblia no ha cambiado. Dios no ha cambiado. ¿Ha cambiado acaso nuestra esperanza? En vez de estar "aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo" (Tito 2:13), ¿estaremos esperanzados en los "políticos cristianos" para nuestra salvación? La iglesia evangélica de hoy en día está cegada y tiene esta obsesión, esta tendencia, este afán de acomodarse, de comprometerse, de unirse. ¿Serán éstos los "tiempos peligrosos" (2 Timoteo 3:1) que de una manera amenazadora se profetizan en las Sagradas Escrituras?
Nota del editor: Este artículo fue publicado en febrero del año 2006.