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miércoles, 18 de agosto de 2021

Presciencia y Predestinación/Elección – Parte 1

Capítulo 17 del libro: "¿Qué Amor es Éste?"

Por Dave Hunt 

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En las Escrituras, el significado básico de los términos predestinación y elección es el mismo: marcar de antemano para un propósito especial o bendición. ¿En base a qué? La única razón que siempre se da siempre es la presciencia. Así lo declaran tanto Pedro como Pablo: “Porque a los que antes conoció [griego: proginosko], también los predestinó [proorizo] para que fuesen hechos conforme a la imagen de su Hijo..." (Romanos 8:29); "Elegidos según [kata] la presciencia [prognosis] de Dios Padre en santificación del Espíritu, para obedecer..." (1 Pedro 1:2).

Parece que Dios predestinó ciertas bendiciones para aquellos a quienes de antemano conoció que creerían en el Evangelio y serian salvos. El Padre Celestial planeó desde la eternidad pasada una herencia para aquellos que llegarían a ser sus hijos por medio de la fe en Cristo Jesús: "Para mostrar en los siglos venideros las abundantes riquezas de su gracia en su bondad para con nosotros en Cristo Jesús" (Efesios 2:7).

La elección o la predestinación nunca se refieren a la salvación, sino siempre y solamente a beneficios particulares. "Lo que debe tenerse en cuenta es el hecho que la predestinación no es Dios predeterminando en épocas pasadas quién debería ser salvo y quién no.  Las Escrituras no enseñan este punto de vista". [1]  Ironside declara: "... No hay ninguna referencia en estos cuatro versículos [los únicos cuatro que se refieren a la predestinación] al cielo o el infierno, sino a la semejanza a Cristo eventualmente. En ninguna parte de las Escrituras se nos dice que Dios predestinó a unos hombres para ser salvos y otros a ser condenados".[2]

Pervirtiendo la Predestinación

Edward Hulme dice de Calvino, “la predestinación era su dogma fundamental... 'Todo', dice Calvino, ' depende de la mera voluntad de Dios; Si algunos son condenados y otros se salvan es porque Dios ha creado a algunos para la muerte y a otros para la vida’”.[3]  Calvino declara: "Digo con Agustín, que el Señor ha creado a aquellos que, ciertamente ya sabía de antemano, iban a ir a la destrucción, y lo hizo porque así lo deseaba. Por qué quiso, no nos corresponde a nosotros preguntar…"[4]  

Otra vez, Palmer nos informa, “la primera palabra que el calvinismo sugiere a la mayoría de la gente es la predestinación; y... los otros cuatro puntos del [del TULIP] la siguen."[5]

John H. Leith escribe: "La predestinación puede tomarse como una marca especial de la teología reformada".[6]  Pink agrega, "Dios no sólo tiene el derecho de hacer lo que quiera con las criaturas que creó con sus propias manos, sino que este derecho, y en ninguna parte se ve eso con mayor claridad en su gracia predestinadora".[7]  ¿La gracia predestina a multitudes a la perdición eterna?

La predestinación (según el calvinismo) es el "decreto eterno de Dios, por el cual... algunos están predestinados a la vida eterna, y otros a la condenación eterna...".[8] Calvino reitera: "Aquellos, por tanto, a quienes Dios deja de lado, son reprobados, y esto por ninguna otra causa, sino porque se complace en excluirlos de la herencia que predestina para sus hijos...".[9]  ¡Es una difamación del carácter de Dios decir que a Él le agrada condenar a miles de millones! Sin embargo, esta desagradable doctrina  es el resultado inevitable de la visión extrema del calvinismo acerca de la soberanía.

El calvinista “enfatiza sus doctrinas de elección y predestinación en todos los textos bíblicos concebibles”.[10]  Vance continúa diciendo:

Clark afirma que "Isaías tiene unas dos docenas de versículos que se relacionan de manera bastante directa con la doctrina de la predestinación". 11 [Sin embargo] la palabra no aparece en Isaías ni en ningún otro lugar del Antiguo Testamento. Custance es aún más audaz: "Volviendo más específicamente al asunto de la Elección para la salvación, considere lo siguiente". 12 Luego sigue una lista de doce pasajes del Antiguo Testamento en los que no se menciona la elección y la salvación ni siquiera está a la vista.13 Volviendo ahora al Nuevo Testamento, encontramos lo mismo. Boettner declara audazmente: “Difícilmente hay un capítulo en el Evangelio de Juan que no mencione ni implique elección o reprobación.14 Pero, incluso después de una declaración como ésa, no dio ningún versículo. Al responder la pregunta, "Me gustaría que enumerara las Escrituras que enseñan que Dios eligió a las personas para la salvación antes de que comenzara el mundo", un bautista de la Gracia Soberana enumera seis escrituras donde la elección ni siquiera se menciona.15

El Papel de la Predestinación en el Calvinismo

Calvino siempre limita la misericordia y el amor de Dios a los elegidos. Como dice un experto islámico de ese sistema religioso: "La voluntad divina es irresistible y ha decretado en cada detalle el curso completo del universo que Él gobierna, y el destino en cada momento de cada criatura... Su dogma de la predestinación y del destino... no deja lugar para el  libre albedrío humano... "[16] Así ocurre con el calvinismo.

Horsch comenta, "Según la enseñanza de Agustín, la historia de la humanidad sería, desde un punto de vista religioso y espiritual, poco más que un espectáculo de marionetas...".[17] R. C. Sproul escribe: "Dios decreta todo lo que sucede... Dios deseaba que el hombre cayera en pecado...Dios creó el pecado".[18] Sheldon  está de acuerdo: "El esquema agustiniano... lo representa a Él[Dios] como quien preordenó que la caída debería implicar, más allá de toda posibilidad de rescate, la ruina eterna y la condenación de la mayor parte de la raza...".[19]  Sin ninguna vergüenza ni remordimiento aparentes, Palmer explica que, por la enseñanza sobre la predestinación en los Institutos de Calvino, y repetida por la mayoría de calvinistas hasta el día de hoy, Dios es el autor de todo y, por lo tanto, incluso de todo pecado:

Pre-ordenación significa el plan soberano de Dios, mediante el cual decide todo lo que sucederá en todo el universo. Nada en este mundo sucede por casualidad. Dios está detrás de todo. Él decide y hace que sucedan todas las cosas que suceden... Él ha preordenado todo "según el designio de su voluntad" (Efesios 1:11): el movimiento de un dedo, el latido de un corazón, la risa de una niña, el error de un mecanógrafo — incluso el pecado.[20]

No es de extrañar que Susana Wesley le escribiera a su hijo Juan: "la doctrina de la predestinación, sostenida por los rígidos calvinistas, es muy chocante y debería ser absolutamente aborrecida, porque acusa al Dios Santísimo de ser el autor del pecado".[21]  Esta abominable doctrina no es bíblica, sino que es una invención humana. Los cinco puntos del calvinismo requieren una soberanía que no permite al hombre el libre albedrío, por lo que necesita que Dios sea el predestinador y la causa efectiva de todo.

En consecuencia, la humanidad podría culpar a Dios por todo, y los calvinistas deberían reconocer ese hecho. En un artículo publicado en la revista Christianity Today como parte de la “serie ocasional sobre renovación doctrinal, patrocinada por una subvención del Lilly Endowment Inc.,”  dos estudiantes de Maestría en Divinidades del Seminario Teológico de Princeton, relataron la alegría de su conversión al calvinismo: "Culpar a Dios  por todo ha sido una alegría tal que decidimos que lo menos que podíamos hacer... es decirle al mundo cómo llegamos hasta aquí".[22]  

Una vez más, Calvino se ve cubierto por la larga sombra de Agustín. Paul K. Jewett llama a Agustín "el primer Predestinario original". [23] Sobre la doctrina central del calvinismo de la salvación por medio de la gracia Irresistible y la Elección Incondicional, Loraine Boettner declara: "Esta verdad cardinal del cristianismo fue vista claramente por primera vez por Agustín".[24]  De ese gran "santo" católico (otra falacia: porque en la Biblia, todos los creyentes son santos), John Horsch comentó:

Agustín... fue conducido, por especulación teológica, a la creencia en la predestinación [que] Dios, en su misericordia elige y predestina a algunos para vida eterna... Del resto de la humanidad... Dios retiene su gracia y los condena incluso si mueren en la infancia...[25]

Esta repugnante doctrina de castigar a los niños inocentes se burla de las palabras de Cristo, "Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis: porque de los tales es el Reino de Dios" (Marcos 10:14).


Traducido por Donald Dolmus
Ministerio En Defensa de la Fe

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miércoles, 11 de noviembre de 2020

Folleto: Aguardando el Reinado de Jesucristo – Parte 2 (1 de 2)

Cómo se Desarrollaron los Diferentes Puntos de Vista

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Se podría decir que la naturaleza del reinado del Mesías ha sido una fuente de confusión durante más de 2,000 años. Cuando estaba ministrando en la tierra, los propios discípulos de Jesús esperaban que introdujera el comienzo de Su reino en ese momento y lugar. Él comprendía sus expectativas.

Lucas registra que una de las parábolas que les contó a Sus discípulos al acercarse a Jerusalén, fue específicamente en respuesta su suposición de “que el reino se manifestaría inmediatamente” (Lucas 19:11). Jesús quería que Sus discípulos entendieran que estaría ausente “en un país lejano” por un tiempo. Dijo que se esperaba que los que le servían en la tierra se ocuparan de Sus negocios hasta que Él regresara (Lucas 19:12-26).

Después de la resurrección de Jesús, los discípulos que encontró en el camino a Emaús, confesaron: “Nosotros esperábamos que él [Jesús] era el que había de redimir a Israel” (Lucas 24:21). Esperaban un reino terrenal para el Mesías y una restauración de la primacía de Israel. Justo antes de Su ascensión, Sus apóstoles todavía seguían preguntando: “Señor, ¿restaurarás el reino a Israel en este tiempo?” (Hechos 1:6).

Las Aclaraciones de Jesús

Es importante reconocer que Jesús no les dijo a Sus discípulos que no habría un reino futuro en Israel. En cambio, les dijo: “No os toca a vosotros saber los tiempos o las sazones, que el Padre puso en su sola potestad” (Hechos 1:7).

El futuro reino físico de Jesús en la tierra no entra en conflicto con el reino espiritual actual. Se refirió a esto cuando le dijo a Pilato: “Mi reino no es de este mundo” (Juan 18:36). El reino de Jesús es una promesa profética de “ya, pero aún no”. Aunque ya tiene un reino celestial, Jesús aún no ha ejercido Su autoridad como Rey de reyes y Señor de señores en la tierra. Si lo hubiera hecho. Satanás no estaría engañando a naciones e individuos hoy. 

La Biblia dice que el Mesías cumplirá todas las promesas de la profecía (Lucas 24:44). Una de ellas es que se sentará en el trono de Su padre David en el Monte Sión, en Jerusalén (Lucas 1:32-33; Salmos 2:6) durante Su reinado, la tierra será restaurada a su perfección que existía antes de que ocurriera la Caída, en el Jardín del Edén (Romanos 8:19-22). Satanás estará verdaderamente atado (Apocalipsis 20:1-3). La esperanza de vida humana aumentará dramáticamente, e Israel se convertirá en la nación preeminente del mundo (Isaías 65:17-25; Miqueas 4:1-7). Incluso el famoso Mar Muerto estará lleno de vida (Ezequiel 47:1-10). Jesús claramente no cumplió ninguna de estas promesas específicas durante Su Primera Venida. 

Así pues, los discípulos no estaban equivocados en su expectativa de que el Mesías reinara sobre un reino terrenal. Simplemente entendieron mal el momento de su establecimiento. A medida que la Iglesia primitiva creció y se expandió, surgieron otros conceptos erróneos. 

Desviándose de la Escritura

Unos pocos cientos de años después de la muerte de Jesús, la Iglesia abandonó en gran medida la expectativa de un reinado literal de Jesús en la tierra. Y, sin tener en cuenta numerosas profecías bíblicas, negó cualquier papel futuro del pueblo judío en el plan de Dios para los tiempos del fin.

¿Por qué los primeros Padres de la Iglesia se desviaron del entendimiento del futuro reino de Jesús al que se referían los discípulos? Hay dos razones principales — el antisemitismo cristiano y el orgullo creciente. 

Antisemitismo Cristiano

La Iglesia Apostólica era Premilenial en su expectativa del regreso de Jesús. Inspirados por el Espíritu Santo, los escritores de la Escritura tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento, previeron el reinado justo del Mesías sobre toda la tierra. Pero, a partir del siglo III, el creciente antisemitismo condujo a los Padres de la Iglesia, como Orígenes, a espiritualizar el texto de la Escritura.

¿Por qué los primeros líderes cristianos espiritualizarían la Palabra profética de Dios? Principalmente, para apropiarse de las promesas hechas al pueblo judío, y reclamarlas para la Iglesia.

A medida que se agregaron más gentiles a la Iglesia, ésta se alejó de sus raíces judías. Menos judíos depositaban su fe en Jesús como el Mesías, porque los líderes judíos endurecieron su resistencia al movimiento cada vez más gentil que estaba despreciando al pueblo judío.

La resistencia de los judíos motivó a los líderes de la Iglesia gentil a intensificar sus ataques contra los judíos obstinados. Declararon que los judíos eran “asesinos de Cristo”, y comenzaron a perseguirlos sin misericordia. Con el tiempo, las fiestas cristianas se desvincularon de cualquier conexión con las fiestas judías. Finalmente, los líderes de la Iglesia descartaron cualquier papel futuro del pueblo judío. Argumentaron que Dios se había desentendido de ellos y que todas sus promesas habían sido transferidas a la Iglesia. 

Agustín, quien fue el más influyente de todos los Padres de la Iglesia, fue particularmente vehemente en su desdén por los judíos. Impulsado por el odio a todo lo judío, proclamó que todas las futuras promesas proféticas dadas a los judíos deberían entenderse como aplicables al “verdadero Israel” — a saber, la Iglesia. Agustín no podía aceptar la idea de que Dios todavía podría tener un plan y un propósito para el pueblo judío. Por lo tanto, rechazó la idea de un futuro en el que Israel sería la primera nación en el mundo, bajo el reinado de Jesucristo. 

Como lo habían hecho Orígenes y otros, Agustín espiritualizó las promesas aún por cumplir al pueblo judío, apropiándose de ellas para la Iglesia. Luego, espiritualizó la duración y la naturaleza del reinado de Jesús. 

Agustín es considerado el padre del Amilenialismo, porque sistematizó el concepto en sus escritos, allanando el camino para que se convirtiera en doctrina oficial de la iglesia. Haciéndose eco de los filósofos griegos, que consideraban maligno el mundo material, desestimó un reinado terrenal por ser atractivo a los deseos carnales. 

Su gran obra, La Ciudad de Dios (426 d.C.), consistentemente elevaba lo espiritual sobre lo material. Esto era en realidad otra manifestación de su antisemitismo, porque los textos del Antiguo Testamento judío registran claramente a Dios declarando Su creación “buena”, antes de la caída del hombre. Agustín no fue consistente en su enfoque de la interpretación bíblica. Aunque tendía a interpretar la mayor parte de la Biblia literalmente, espiritualizaba la profecía. 

Por lo tanto, en lugar de que Cristo reinara físicamente en la tierra, como predijeron los profetas del Antiguo Testamento, Agustín declaró que ese deber mundano sería llevado a cabo por la Iglesia — bajo los auspicios del reinado espiritual de Jesús desde el Cielo. Agustín también proclamó que Satanás fue atado en la cruz — una contradicción directa de 1 Juan 5:19. Su punto de vista elevó dramáticamente el papel mundano de la Iglesia como la autoridad gobernante en la tierra. Es por eso que fue rápidamente adoptado en la doctrina católica y ha seguido dominando en muchas denominaciones protestantes. 

Quizás sorprendentemente, Agustín negaría haber eliminado el Milenio. Simplemente argumentaría que el Milenio representa el reinado espiritual de Jesús sobre la Iglesia, que comenzó en la Cruz y continuará ininterrumpidamente hasta que Él regrese. Pero si Agustín tenía razón, entonces la duración de 1,000 años del reinado, que se cita en Apocalipsis 20, no tiene sentido. 

El antisemitismo cristiano de Agustín perdura hasta el día de hoy en la forma de la Teología del Reemplazo. Esa doctrina no bíblica afirma que la Iglesia ha reemplazado a Israel y que Dios se ha desentendido del pueblo judío. Esta enseñanza contradice la enseñanza de Pablo en Romanos 9-11, donde deja en claro que Dios todavía ama al pueblo judío, y tiene un propósito futuro para ellos. Es un cáncer doctrinal que infectó a Martín Lutero y continúa como una pandemia entre la mayoría de las iglesias de hoy. 

A pesar de estas actitudes equivocadas hacia el pueblo judío, Dios bendijo a la Iglesia. Llena como está de gente salva pero imperfecta, creció e impactó el mundo para bien — tal como Él prometió que lo haría. Ese crecimiento y esa bendición llevaron a muchos en la Iglesia a una comprensión distorsionada del reinado de Jesús en la tierra, por una razón completamente diferente. 


Lea la parte 2 aquí


Traducido por Donald Dolmus
Ministerio En Defensa de la Fe

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miércoles, 8 de agosto de 2018

Libro: ¿Qué Amor es Éste? – Capítulo 5 (parte 1)

"Cristianismo" Irresistiblemente Impuesto

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Una de las estrategias más ingeniosas y efectivas de Satanás fue la de engañar al emperador Constantino con una falsa conversión. La influencia que ese evento tuvo en la historia posterior, tanto religiosa como secular, es incalculable. Los relatos difieren, pero si esto ocurrió por medio de una visión o un sueño tal como fue relatado por Eusebio y Lactancio,1 Constantino vio una "cruz" en el cielo y escuchó una “voz” que proclamaba (según algunas versiones, las palabras estaban inscritas en la cruz), "Con esta señal vencerás".  El año anterior, el dios Apolo también le había prometido la victoria.

Los edictos de tolerancia de Constantino dieron a cada hombre "el derecho a elegir su religión según los dictados de su propia conciencia y su convicción sincera, sin compulsión o interferencia del gobierno".2  Schaff  considera que la conversión de Constantino fue un avance maravilloso para el cristianismo: "La iglesia asciende al trono de los Césares bajo la bandera de la cruz y da nuevo vigor y lustre al viejo imperio de Roma".3 De hecho, esa "conversión" aceleró la corrupción de la iglesia por medio de su matrimonio con el mundo.4

¿Cómo podría un verdadero seguidor de Cristo, cuyo reino no es de este mundo y cuyos siervos no hacen guerra, proceder a librar una guerra en Su nombre? ¿Cómo podría un verdadero seguidor de Cristo, bajo la insignia de Su Cruz, proceder a conquistar con la espada? Por supuesto, los Cruzados más tarde hicieron lo mismo,  masacrando a musulmanes y judíos para retomar la "tierra santa" bajo la promesa del Papa Urbano II (igualando las promesas de Mahoma y el Corán a los musulmanes) del completo perdón de los pecados para quienes murieron en esta guerra santa (los musulmanes la llaman yihad). Las Cruzadas, por supuesto, como todas las guerras de los papas, fueron muy agustinas. ¡La ciudad de Dios tenía que ser defendida!

De Constantino a Agustín

Como Durant y otros historiadores han señalado, Constantino nunca renunció a su lealtad a los dioses paganos. Él no abolió el Altar de la Victoria en el Senado, ni las vírgenes vestales que atendían el fuego sagrado de la diosa Vesta.  El dios Sol, no Cristo, continuó siendo homenajeado en las monedas imperiales. A pesar de la "cruz" (en realidad la cruz del dios Mitras) que figuraba en sus escudos y banderas militares, Constantino tenía un medallón creado para honrar al sol por la "liberación" de Roma; y cuando prescribió un día de descanso, fue otra vez en nombre del dios Sol ("el día celebrado para la veneración del Sol")5, y no el hijo de Dios.6  Durant nos recuerda que a lo largo de su vida "cristiana", Constantino usó ritos paganos como cristianos, y continúo dependiendo de "fórmulas mágicas paganas para proteger los cultivos y curar las enfermedades".7

Que Constantino asesinara a quienes podrían haber reclamado su trono, incluyendo a su hijo Crispo, a un sobrino y a un cuñado, es un indicio más de que su "conversión" fue, como muchos historiadores coinciden, una hábil maniobra política para unir el imperio. El historiador Philip Hughes, él mismo un sacerdote católico,  nos recuerda: "en sus modales [Constantino] permaneció, hasta el final, como el pagano de sus primeros años de vida. Su temperamento furioso, la crueldad que, una vez suscitada, no perdonaba ni las vidas de su esposa e hijo. Son…un testimonio desagradable de la imperfección de su conversión".8

No pasó mucho tiempo antes de la nueva tolerancia que Constantino se encontró enfrentado con un problema que nunca había anticipado: división dentro de la iglesia cristiana, a la cual le había dado libertad. Como mencionamos en el capítulo anterior, ésta llegó a un punto crítico en África del Norte con los donatistas, quienes, preocupados por la pureza de la fe, se separaron de las iglesias oficiales del Estado, rechazaron sus ordenanzas, e insistieron en rebautizar al clero que se había arrepentido, después de haber negado la fe durante las persecuciones que surgieron cuando el Emperador Diocleciano exigió ser adorado como un dios.9  Después de muchos años de esfuerzos inútiles para restablecer la unidad a través de discusiones, debates, concilios y decretos, Constantino finalmente recurrió a la fuerza. Frend explica:

En la primavera del año 317 [Constantino] continuó con su decisión publicando un edicto "más severo" contra los donatistas, confiscando sus propiedades y exiliando a sus líderes. En el curso de cuatro años, la libertad de conciencia universal proclamada en Milán había sido derogada, y el Estado se había convertido una vez más en un perseguidor, sólo que esta vez a favor de la ortodoxia cristiana... [Los donatistas] no entendieron ni se preocuparon por la conversión de Constantino. Para ellos era un caso en el que el diablo insistía que "Cristo era un amante de la unidad". En su opinión, la hostilidad fundamental del Estado hacia la iglesia [verdadera] no había sido alterada.10

En sus propios tiempo y forma, Agustín siguió la dirección de Constantino en su tratamiento de los donatistas, que seguían siendo una espina en el costado de la iglesia romana. "Mientras que Agustín y los católicos hacían hincapié en la unidad de la iglesia, los donatistas insistían en la pureza de la iglesia y rebautizaban a todos aquellos católicos que llegaban a ellos — ya que consideraban corruptos a los catolicos."11 Constantino había sido "implacable [como también lo serían Agustín y su discípulo Calvino] en su búsqueda de 'herejes' [prohibiendo] a todos aquellos fuera de la iglesia católica a congregarse...y confiscó sus bienes...Las mismas cosas que los cristianos habían soportado, ahora se practicaban en nombre del cristianismo."12

Como buen ciudadano disfrutando de la bendición del Emperador y creyendo en la iglesia estatal que Constantino había establecido, Agustín persiguió e incluso sancionó la matanza de los donatistas y otros cismáticos, como ya hemos visto. Gibbon nos dice que las medidas severas contra los donatistas "obtuvo la más cálida aprobación de Agustín [y por lo tanto] gran cantidad de donatistas se reconciliaron con (fueron forzados a volver a) la iglesia católica".13

De Agustín se ha dicho que "la grandes misma de su nombre ha sido el medio de perpetuar los más grandes errores que él mismo propagó. Más que cualquier otra persona, Agustín ha alentado la perniciosa doctrina de salvación por medio de los sacramentos de una iglesia terrenal organizada, que trajo consigo la superschería junto con toda la maldad y las miserias que ha ocasionado a lo largo de los siglos".14

De Agustín a Calvino

No hay duda de que Juan Calvino aún veía a la iglesia de Cristo con ojos de católico romano. Él vio a la iglesia (como Constantino la había moldeado y Agustín la había cimentado) como socia del estado,  con el estado imponiendo la ortodoxia (como la iglesia estatal la definiera) sobre todos sus ciudadanos. Calvino aplicó su formación jurídica y su celo al desarrollo de un sistema de cristianismo basado en una visión extrema de la soberanía de Dios que, por la fuerza de su lógica, obligaría a los reyes y a toda la humanidad a conformar todos los asuntos a la justicia.  En asociación con la iglesia, los reyes y otros gobernantes civiles harían cumplir el cristianismo calvinista.

De los que creían en un reino milenario de Cristo sobre la tierra, Calvino dijo que su "ficción es demasiado pueril como para necesitar o merecer refutación".15 Según Calvino, el reino de Cristo comenzó con Su venida a la tierra y había estado en proceso desde entonces. Rechazando el futuro reinado literal de Cristo sobre la tierra, a través de Su Segunda Venida, para establecer un reino terrenal sobre el trono de David en Jerusalén, Calvino aparentemente se sintió obligado a establecer el reino por su propio esfuerzo en ausencia de Cristo.

La Biblia deja en claro que uno debe "nacer de nuevo"  para "ver el reino de Dios" (Juan 3:3) y que la "carne y sangre no pueden heredar el reino de Dios" (1 Corintios 15:50). Ignorando esta verdad bíblica y siguiendo el error de Agustín, Calvino determinó (junto con Guillaume Farel) establecer el reino de Dios en la tierra en Ginebra, Suiza.

El 10 de noviembre de 1536, la Confesión de Fe, que toda la burguesía y los habitantes de Ginebra y los sujetos en sus territorios debían jurar cumplir, y que Farel había redactado en conjunto con Calvino, se presentó oficialmente a la ciudad. Era un documento extenso con reglas detalladas que abarcaban todo, desde la membresía de la iglesia, asistencia, predicación, obediencia del rebaño hasta la expulsión de los ofensores.  Las autoridades de Ginebra aprobaron el documento el 16 de enero de 1537. "En marzo fueron desterrados los anabaptistas. En abril, por instigación de Calvino [se inició una inspección casa por casa] para asegurar que los habitantes estuviesen suscritos a la Confesión de Fe...El 30 de octubre hubo un intento de extraer una profesión de fe de todos los que dudaban. Finalmente, el 12 de noviembre, se emitió un edicto que declaraba que todos los renuentes '[que] no desean jurar lealtad a la Reforma se les ordena abandonar la ciudad'...".16

¿"La Reforma"? Hubo muchas variaciones y diferencias entre las diversas facciones de la incipiente Reforma, desde Lutero a Zuinglio.  Pero en Ginebra, sólo el calvinismo iba a ser conocido como “La Reforma” y la “Teología Reformada”. Esa afirmación presuntuosa todavía es sostenida hoy por los calvinistas en todo el mundo.

El primer intento de Calvino fracasó.  Boettner reconoce: "Debido a un intento de Calvino y Farel de imponer un sistema de disciplina demasiado severo en Ginebra, se hizo necesario que abandonaran la ciudad temporalmente".17


Traducido por Donald Dolmus
En Defensa de la Fe (endefensadelafe.org)

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martes, 7 de noviembre de 2017

Un Fracaso de la Reforma – Parte 4

Interpretación Escritural

Por Dr. Andy Woods



La Literalidad Selectiva de los Reformadores

Aunque los reformadores fueron literales en su enfoque a la Protología (la doctrina de los Principios), la Cristología (la doctrina de Cristo), la Soteriología (la doctrina de la Salvación), y la Bibliología (la doctrina de la Escritura), otras doctrinas, como la Eclesiología (la doctrina de la Iglesia) y la Escatología (la doctrina del Fin), fueron tratadas de una forma completamente diferente. A pesar de su énfasis en la interpretación literal de algunos aspectos de la Escritura, Lutero y Calvino no llegaron lo suficientemente lejos al aplicar una interpretación literal a todas las áreas de la verdad divina. 

De hecho, Calvino parece haber ignorado gran parte de la Palabra profética de Dios. A pesar de haber escrito comentarios sobre casi todos los libros del Nuevo Testamento, Calvino no escribió un comentario sobre el Libro de Apocalipsis. Cuando Calvino prestó atención a los textos proféticos, pareció estar preocupado por emplear el método de interpretación alejandrino y agustiniano, y despreciaba a aquellos que rechazaban su enfoque alegórico. 

La retención de los reformadores del método de interpretación alegórico en el área de la Escatología bíblica también es evidente en la forma en que tomaron las profecías dirigidas a una futura Babilonia y al Anticristo, y las redirigieron para hacer parecer que estas profecías estaban hablando, en cambio, de la iglesia católica romana. Tal interpretación fue avanzada a expensas del sentido literal de estos pasajes.

Debido a que los reformadores espiritualizaron la profecía, rechazaron el Premilenialismo como “opiniones judías”. Mantuvieron el punto de vista Amilenial, que la iglesia católica romana había adoptado de Agustín.

Las Reformas Selectivas de los Reformadores

A pesar del progreso doctrinal de los Reformadores en áreas selectas, es simplemente una cuestión de ingenuidad histórica asumir que hicieron una ruptura clara con el catolicismo romano en el siglo XVI. Por el contrario, como católico romanos que habían intentado inicialmente permanecer dentro de la iglesia católica, arrastraron muchos vestigios del catolicismo romano con ellos hacia su recién nacida Teología Reformada.

Además de la retención del Amilenialismo agustiniano, también había otros vestigios católicos romanos. Uno era la práctica del bautismo de infantes. Lutero consideraba el bautismo de infantes un sacramento y, por lo tanto, un medio de gracia. También, otro vestigio estaba relacionado con la doctrina de la Consubstanciación, que parece ser sólo una ligera modificación de la doctrina de la Transubstanciación.

Aún otro remanente estaba relacionado con la idea de la iglesia católica romana de que ella era el único representante del reino de Dios sobre la tierra. Este fracaso romanista en distinguir entre la Iglesia y el programa del reino terrenal de Dios para Israel se trasladó a la Ginebra de Calvino. Ahí, Calvino intentó reconstruir una sociedad por medio de la imposición de Ley mosaica. Este experimento social dio lugar a funestas consecuencias sociales.

Lutero en el Castillo Wartburg, traduciendo la Biblia al alemán, por Paul Thumann (1834-1908)

Finalmente, debe señalarse que parte del antisemitismo vitriólico de la Edad Media también encontró su camino en el movimiento de la Reforma. Después de todo, fue el respetado y reverenciado reformador de la iglesia, Martín Lutero, quien, al final de su vida y frustrado por la falta de voluntad de los judíos en recibir a Cristo en base a la fe sola, escribió un tratado feroz contra el pueblo judío, titulado, Sobre los Judíos y sus Mentiras. Este tratado contiene numerosas diatribas antisemitas.

Aunque algunos afirman que el nivel de veneno antisemita de Lutero no se encuentra en la obra de Juan Calvino, tal afirmación carece de fundamento. Por ejemplo, observe cómo la corrección de Calvino del distinguido erudito judío, el rabino Barbinel, en el comentario de Calvino sobre Daniel 2:44, dejó al descubierto las verdaderas intenciones del corazón de los reformadores hacia el pueblo judío: “Pero aquí él [el rabino] no sólo traiciona a su ignorancia, sino a su estupidez absoluta, ya que Dios cegó a todo el pueblo que era como perros inquietos…Nunca he encontrado común en algún judío”.

En el quinto y último segmento de nuestra serie, veremos las razones de la inconsistencia de los reformadores, así como la restauración de importantes doctrinas que el literalismo produjo.


Lea también:

El Dr. Andy Woods es oriundo de California, donde asistió a la universidad y obtuvo una licenciatura en derecho. En 1998, cambió de rumbo y comenzó a hacer la transición del derecho a la teología, cuando decidió ingresar al seminario.

Finalmente obtuvo un doctorado en exposición bíblica del Seminario Teológico de Dallas. Actualmente se desempeña como pastor en la Iglesia Bíblica de Sugar Land, en el área de Houston, mientras se desempeña como Presidente del Seminario Teológico Chafer, en Albuquerque, Nuevo México. Es un escritor prolífico y un conferenciante muy solicitado.

Traducido por Donald Dolmus
En Defensa de la Fe (endefensadelafe.org)

Original article

viernes, 3 de noviembre de 2017

Un Fracaso de la Reforma – Parte 2

Interpretación Escritural

Por Dr. Andy Woods



El Triunfo de la Espiritualización

El predominio de la escuela de Antioquía pronto fue eclipsado por la influencia de una escuela competidora ubicada en África del Norte, en la ciudad de Alejandría, Egipto.

La escuela alejandrina introdujo la alegorización como un método para interpretar la Escritura, especialmente la Profecía Bíblica. La alegorización (o espiritualización) consiste en usar el significado literal del texto bíblico sólo como un vehículo para introducir un significado espiritual superior, que sólo es claro para el que está haciendo la alegorización.

Por ejemplo, Filón (25 a.C.–50 d.C.), un influyente alegorizador, quien vivió durante la época de Cristo, vio los cuatro ríos desccritos en Génesis 2:10-14 (Pisón, Gihón, Tigris, Eufrates) no tan sólo como cuatro ríos literales en el Jardín del Edén, ¡pero también representando cuatro partes del alma humana!

¿Qué causó que la Iglesia cristiana rechazara progresivamente el enfoque tradicional y literal propugnado por Antioquía y que, adoptara en su lugar, el método alegórico perfilado por Alejandría? A riesgo de una simplificación excesiva, es probable que hubiera una multiplicidad de factores.

En primer lugar, el enfoque alegórico suplió la necesidad de relevancia y aplicación inmediata en la predicación y enseñanza cristiana. Cuando el texto es alegorizado, puede usarse para satisfacer prácticamente cualquier necesidad emocional, espiritual o psicológica del oyente o lector. 

En segundo lugar, el método alegórico se hizo cada vez más sostenible a medida que los intérpretes se volvieron susceptibles a fusionar la filosofía humana con el proceso de interpretación bíblica.

En tercer lugar, una influencia relacionada fue que Alejandría, Egipto, era un semillero del dualismo gnóstico, que enseñaba que mientras el mundo espiritual era inherentemente bueno, el mundo físico era maligno. Y puesto que creían que el mundo físico era inherentemente malo, los filósofos gnósticos razonaban que las diversas profecías bíblicas relativas a un reino físico en la tierra obviamente no debían tomar literalmente y que, por lo tanto, debían ser espiritualizadas.

Un cuarto factor que llevó a la Iglesia a abrazar el método alegórico de interpretación fue el declive de los creyentes judíos dentro de las filas de la Iglesia. Para cuando Pablo escribió su epístola a los Romanos, los cristianos gentiles estaban en tal ascendencia numérica sobre sus homólogos judíos, que Pablo tuvo que instruir a estos creyentes judíos para que no fueran arrogantes a causa del aparente endurecimiento espiritual de Israel (Romanos 11:13, 17-21).

Dada la familiaridad judía no sólo con el contenido, sino también con una comprensión correcta de la Biblia hebrea, o el Antiguo Testamento, es dudoso que la Iglesia hubiera abrazado el método de interpretación propugnado por la escuela alejandrina, sino los judíos hubiesen conservado su condición de mayoría dentro de la Iglesia. Sin embargo, los cristianos gentiles, que provenían de orígenes paganos, no estaban educados de manera similar. Por lo tanto, eran vulnerables a la sugerencia de que el Antiguo Testamento podía ser espiritualizado, alegorizado y, consecuentemente, marginalizado.

En quinto lugar, el Edicto de Milán de Constantino (313 d.C.), que otorgaba tolerancia religiosa al cristianismo dentro del Imperio Romano, también jugó un papel significativo en el abrazo de la Iglesia al método de interpretación alegórico. Con el toque de una pluma, el cristianismo pasó de un estado perseguido dentro de Roma a uno protegido e incluso elevado.

Una transición tan abrupta de la persecución a la tolerancia, e incluso elevación, convenció a muchos dentro de la Iglesia que el reino de Dios había llegado. Esta nueva creencia les hizo alegorizar muchas de las promesas del reino terrestre relacionadas con el Israel nacional, en realidades actuales espirituales del reino.
Esta convergencia de factores condujo a la ascendencia del método alejandrino de interpretación dentro de la cristiandad.

Alegorizadores Prominentes

Varios intérpretes alegóricos surgieron de la escuela alejandrina. Uno de esos intérpretes fue Orígenes (185–254 d.C.). Pero el alegorizador más influyente fue Agustín (354–430 d.C.). Su libro, La Ciudad de Dios, fue la primera gran sistematización y exposición escrita del Amilenialismo en la historia de la iglesia, y es quizás también el libro más influyente en la historia de la iglesia. Esta obra, más que cualquier otra, lanzó un hechizo alegórico sobre la Iglesia que, como se explicará después, le tomó a la cristiandad más de un milenio para escurrirse de él. 

“Agustín de Hipona”, por Sandro Botticelli (1445-1510)

La Ciudad de Dios alegorizó salvajemente pasajes bíblicos relacionados con el futuro reinado terrenal de Cristo. Por ejemplo, la “primera resurrección” (Apocalipsis 20:4-6) fue reinterpretada para referirse a una regeneración espiritual en lugar de una resurrección futura, física y corporal. También enseñó que la atadura de Satanás simplemente “significa que es más incapaz de seducir a la Iglesia”.

Con respecto al futuro reinado de Cristo de mil años junto con Sus santos (Apocalipsis 20:4). Agustín afirmó que “la Iglesia, incluso ahora, es el reino de Cristo, y el reino de los cielos. En consecuencia, incluso ahora Sus santos reinan con Él”.

Hacia el año 450 d.C., el método de interpretación alejandrino se había arraigado tanto que la Iglesia comenzó a ver al quiliasmo temprano como el producto de los menos iluminados y los menos inteligentes. De hecho, el propio Quiliasmo comenzó a ser visto como una mera fábula, más que el producto de un estudio cuidadoso del texto bíblico.

En el tercer segmento de esta serie, veremos lo que ocurrió en la Edad Oscura y el regreso a la interpretación literal.

Lea también:
Un Fracaso de la Reforma – Parte 1

El Dr. Andy Woods es oriundo de California, donde asistió a la universidad y obtuvo una licenciatura en derecho. En 1998, cambió de rumbo y comenzó a hacer la transición del derecho a la teología, cuando decidió ingresar al seminario.

Finalmente obtuvo un doctorado en exposición bíblica del Seminario Teológico de Dallas. Actualmente se desempeña como pastor en la Iglesia Bíblica de Sugar Land, en el área de Houston, mientras se desempeña como Presidente del Seminario Teológico Chafer, en Albuquerque, Nuevo México. Es un escritor prolífico y un conferenciante muy solicitado.


Traducido por Donald Dolmus
En Defensa de la Fe (endefensadelafe.org)

Original article
A Failure of the Reformation

viernes, 7 de julio de 2017

Libro: ¿Qué Amor es Éste? — Capítulo 4 (Conclusión)

La Sorprendente Conexión del Calvinismo con el Catolicismo

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El Papel de la Vulgata Latina

Junto con los escritos de Agustín, la Vulgata Latina también había moldeado los pensamientos de Calvino expresados en sus Institutos de la Religión Cristiana. Siendo diestro en latín, Calvino había utilizado durante mucho tiempo esta corrupta traducción de la Biblia, la cual, desde su composición por Jerónimo al principio del quinto siglo, era la Biblia oficial de los católicos romanos. Y aun otra vez fue declarada la Biblia oficial por el Concilio de Trento en 1546, cuando Calvino tenía 37 años de edad.  Más que eso, ésta llegó a influenciar el movimiento protestante: "Por mil años la Vulgata era prácticamente la única Biblia conocida y leída en Europa occidental. Todos los comentarios se basaban en el texto de la Vulgata… los predicadores basaban sus sermones en ella".60

La Vulgata estaba impregnada con opiniones agustinas sobre la predestinación y el rechazo del libre albedrío. Según Philip Schaff, "La Vulgata, en efecto, puede ser acusada de tener innumerables errores, inexactitudes, incoherencias y en ocuparse arbitrariamente de los detalles".61 Otros han expresado la misma opinión. Samuel Fisk citando a Samuel Berger, en cuanto a la historia de Cambridge de la Biblia en inglés, Vol. 3 (S. L. Greenslade, ed., Cambridge, Inglaterra: University Press, 1963, 414), llamó a la Vulgata "el texto más vulgar y bastardo imaginable".62 Grady dice, "Dámaso le encargó a Jerónimo que reviviera la arcaica Antigua Biblia Latina en 382 EC...La monstruosidad completada llegó a ser conocida como la 'Vulgata Latina'... y fue usada por Satanás para marcar el inicio de la Edad Oscura".63 Fisk nos recuerda:

Ejemplos bien conocidos de los profundos errores incluyen todo el sistema católico de "penitencia", extraído de la Vulgata "haga penitencia"... cuando el idioma latín debió haber seguido el griego diciendo — “arrepiéntanse —”. Asimismo la palabra "sacramento" era una lectura errónea de la Vulgata de la palabra original para “misterio”. Aún más importante, tal vez, fue la traducción de la palabra presbítero (anciano) como "sacerdote".64

Agustín describió el problema que llevó a la producción de la Vulgata: "En los primeros días de la fe, cuando un manuscrito griego llegaba a las manos de alguno, y este pensaba que poseía un poco de conocimiento en ambos idiomas, se aventuraba a hacer una traducción [al latín]".65 Como consecuencia de tal esfuerzo individual, Bruce dice, "llegó el momento, sin embargo, cuando la multiplicidad de textos [latinos de la escritura llegaron a ser demasiado inconvenientes para ser tolerados,  y el Papa Dámaso... encargó a su secretario, Jerónimo, para que emprendiera el trabajo” de revisión para producir una versión autorizada en latín.

Bruce continúa: A él "[Jerónimo] se le indicó ser cauteloso respecto a los 'hermanos más débiles" a quienes no les gustaba ver sus textos favoritos ser manipulados, ni siquiera por el interés de obtener una mayor precisión. Aun así, é fue demasiado lejos para el gusto de muchos, mientras que él mismo sabía que no iba lo suficientemente lejos".66 El Diccionario Bíblico de Unger comenta:

Por muchos siglos [la Vulgata] era la única Biblia utilizada generalmente... En la época de la reforma la Vulgata [influenció] versiones populares. La de Lutero (N. T. en 1523) fue la más importante y en esto la Vulgata tuvo gran peso. De Lutero, la influencia del latín pasó a nuestra propia versión autorizada [la King James Version]...67

Las Biblias de Ginebra, la King James y los Credos Protestantes

No es de poca importancia para nuestro estudio el hecho de que esta traducción corrupta tuvo una influencia sobre las iglesias protestantes en Europa, Inglaterra y Estados Unidos. Esa influencia se extendió a la Biblia de Ginebra (que tiene aún más problemas; véase más abajo) así como en otras versiones tempranas de la Biblia en inglés y hasta en la Biblia King James de hoy. 

Tal como la Vulgata estaba llena de agustinianismos, la Biblia de Ginebra estaba llena de calvinismo, tanto en el texto, así como en sus voluminosas notas. H. S. Miller dice en su Introducción Bíblica General: "fue una revisión de Tyndale, con una introducción de Calvino... el trabajo de los reformadores ingleses, asistido por Beza, Calvino y posiblemente otros". J. R. Dore, en su libro Biblias Antiguas: Un recuento de las primeras versiones de la Biblia en inglés, 2da edición, agrega que "casi todos los capítulos de la Biblia de Ginebra tienen voluminosas notas llenas de doctrina calvinista". Andrew Edgar, en Las Biblias de Inglaterra, declara: "En el momento en que la Biblia de Ginebra fue publicada por primera vez, Calvino era el espíritu dominante en Ginebra. Por consiguiente, todas las características de su sistema teológico, eclesiástico, político y social están reflejadas en las anotaciones marginales... La doctrina de la predestinación es proclamada como la piedra angular del Evangelio".68

W. Hoare dice en La Evolución de la Biblia en Inglés, "Considerada como un todo literario [la Biblia de Ginebra] tiene todo el carácter de un manifiesto calvinista... un libro con un propósito especial". F.Bruce agrega:

"Las notas de la Biblia de Ginebra...son, de seguro, descaradamente de doctrina calvinista... La gente de Inglaterra y Escocia... aprendieron mucho de su exégesis bíblica de estas notas... La Biblia de Ginebra inmediatamente ganó y retuvo, una amplia popularidad.  Se convirtió en la Biblia de habla inglesa en los hogares protestantes... También se convirtió en la Biblia autorizada de Escocia y fue traída a los Estados Unidos de América donde tuvo una fuerte influencia".69

Butterworth señala: "En el linaje de la Biblia King James esta [Biblia de Ginebra] es por supuesto el volumen individual más importante...La Biblia de Ginebra…tuvo una gran influencia en la conformación de la Biblia King James".70 Robinson es aún más enfático:

Una gran parte de las innovaciones [de la Biblia de Ginebra] están incluidas en la versión autorizada [KJV]... A veces el texto de Ginebra y el margen de Ginebra se asumen intactos, el texto se convierte a veces en el margen y el margen en el texto. A veces el margen se convierte en el texto y no se ofrece ninguna alternativa. Muy a menudo el margen ginebrino se convierte en el texto de la versión autorizada con o sin cambio verbal".71

Podríamos presentar documentación adicional, pero esto debe ser suficiente para trazar brevemente la influencia de este máximo católico romano, Agustín, a través de la Vulgata Latina y sus escritos sobre Calvino — y a través de Calvino, en la Biblia de Ginebra y en la Biblia King James —. Y así en los púlpitos y las casas de los protestantes en toda Europa, Inglaterra y Estados Unidos. No es de extrañar que aquellos que, como Arminio,  se atrevieron a cuestionar el calvinismo fueran abrumados por la oposición. Por supuesto, diversos sínodos y asambleas se llevaron a cabo para formular credos aceptados para castigar a los disidentes, pero las condiciones estaban a favor del Calvinismo, y ninguna influencia para mitigar este error fue permitida. Esto será documentado en los capítulos 5 y 6.

La Nueva Biblia de Estudio de Ginebra y la Verdad de la Reforma

La Nueva Biblia de Estudio Ginebra de hoy (reimpresa recientemente como la Biblia de Estudio de la Reforma) está siendo distribuida ampliamente en un esfuerzo para adoctrinar a los lectores en el calvinismo. Su traducción de la Nueva Versión King James es atractiva. Sin embargo al igual que con la Biblia de Ginebra original, las notas son tratados calvinistas.  En su prólogo, R. C. Sproul escribe:

La Nueva Biblia de Estudio de Ginebra se llama así porque está fundamentado sobre la tradición de la Biblia de Ginebra original... La luz de la Reforma era la luz de la Biblia... La Biblia de Ginebra fue publicada en el año 1560…[y] dominaba el mundo de habla inglesa durante cien años... Los peregrinos y puritanos llevaron la Biblia de Ginebra a las costas del Nuevo Mundo. Los colonos norteamericanos fueron criados con la Biblia de Ginebra... La Nueva Biblia de Estudio de Ginebra contiene una actualización de la verdad reformada en sus comentarios y notas teológicas. Su propósito es presentar la luz de la Reforma de nuevo.

De hecho, su propósito es adoctrinar al lector en el calvinismo, que falsamente se comercializa como "la verdad de la Reforma" — como si el calvinismo y el protestantismo fuesen idénticos —. A pesar de las declaraciones de los calvinistas, la Reforma fue mucho más que solo el calvinismo.

La Necesidad de Aclarar la Confusión

El Calvinismo está experimentando un resurgimiento hoy. Sin embargo, hay un desconocimiento generalizado de lo que tanto Agustín como Calvino en realidad enseñaron y practicaron. ¿Se ha suprimido la verdad para promover una teología particular? Considere la declaración de Boettner de que "Calvino y Agustín fácilmente figuran como los dos expositores sistemáticos excepcionales del sistema cristiano desde san Pablo".72 Spurgeon, también declaró: "Agustín obtuvo su punto de vista, sin duda,  a través del Espíritu de Dios, del estudio diligente de las escrituras de Pablo, y Pablo lo recibió del Espíritu Santo, de Jesucristo".73  

Uno no puede ver estas declaraciones sin asombrarse. Es increíble que Loraine Boettner, uno de los apologistas que más se opone a la iglesia católica romana, elogió a Agustín, quien dio a la iglesia católica romana muchas de sus doctrinas básicas, y figura entre los "santos" más altamente honrados hasta el día de hoy.

En cuanto a Spurgeon, ¿habría él considerado que la enseñanza de Agustín en cuanto a la salvación por la iglesia católica romana, a través de sus sacramentos solamente, comenzando con la regeneración por el bautismo de los infantes; el uso de la fuerza incluso hasta la muerte contra los "herejes"; la aceptación de los libros apócrifos; la interpretación alegórica de la creación y las profecías sobre Israel; un rechazo del reino literal de Cristo en el trono de David; y tantas otras falsas doctrinas, también habían sido recibidas del Espíritu Santo? ¿Cómo pudo Agustín — y Calvino, quien aceptó y transmitió muchos de sus errores principales — estar tan equivocado en tantas cosas y, sin embargo, ser bíblicamente correcto en cuanto a la predestinación, elección, soberanía, etc.? ¿Acaso no hay causa suficiente para examinar detenidamente estas enseñanzas fundamentales del calvinismo? 

Sólo se puede responder afirmativamente. Por esa razón, las doctrinas claves calvinistas serán presentadas en las páginas siguientes, y serán comparadas cuidadosamente con la palabra de Dios.


Estimado lector: Si nuestros artículos están siendo de bendición para su vida, considere por favor aportar un granito de arena para que podamos seguir con la labor que nos ha sido encomendada. El Señor a su debido tiempo le recompensará. 

Si desea obtener más información acerca de este tema, visite nuestra sección:
»» Calvinismo

Traducido por Donald Dolmus
En Defensa de la Fe (endefensadelafe.org)


Notas:

60. David Schaff, Our Father’s Faith and Ours, 172; cited in Samuel Fisk, Calvinistic Paths Retraced (Raleigh, NC: Biblical Evangelism Press, 1985), 68.
61. Philip Schaff, History, II: 975–76. 
62. Samuel Fisk, Calvinistic Paths Retraced (Raleigh, NC: Biblical Evangelism Press, 1985),68.
63. Grady, Final Authority, 35.
64. Fisk, Calvinistic, 67.
65. F. F. Bruce, The Books and the Parchments (London: Pickering and Inglis, Ltd., 1950), 191.
66. Bruce, Books, 194–95.
67. Merrill F. Unger, Unger’s Bible Dictionary (Chicago, IL: Moody Press, 1969), 1151–54.
68. Fisk, Calvinistic, 70–75.
69. F.F. Bruce, The English Bible: A History of Translations (New York: Oxford University Press, 1961), 90-91.
70. Charles C. Butterworth, The Literary Lineage of the King James Bible (Philadelphia: University of Pennsylvania Press, 1941), 163.
71. H. Wheeler Robinson, The Bible In Its Ancient and English Versions (Oxford: Clarendon Press, 1940), 186, 206–207.
72. Loraine Boettner, The Reformed Doctrine of Predestination (Phillipsburg, NJ: Presbyterian and Reformed Publishing Co., 1932), 405.
73. Spurgeon, Exposition, 298; cited in Vance, Other Side, 38.

jueves, 15 de junio de 2017

Libro: ¿Qué Amor es Éste? — Endosos

Lo que líderes cristianos están diciendo acerca de este libro

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TIM LAHAYE
Autor de más de 50 libros, incluyendo coautor de la serie Dejados Atrás.

"El sugerir que el Dios misericordioso, paciente, de gracia y amoroso de la Biblia inventara una doctrina tan espantosa como el Calvinismo, a la que nos gustaría hacernos creer que es un acto de 'gracia' el seleccionar solamente a ciertas personas para ir al cielo y mediante la exclusión, escoger a otros para ir al infierno, se acerca peligrosamente a la blasfemia. Y es por eso que felicito a Dave Hunt por escribir esta excelente aclaración de la doctrina que tiene sus raíces en el humanismo griego, de donde se originó, y no de las escrituras.

Este libro bien podría ser el libro más importante escrito en el siglo XXI para que todos los cristianos evangélicos puedan leer. Le ayudará a conocer y amar el verdadero Dios de la Biblia que claramente dice de sí mismo, 'no es mi voluntad que ninguno perezca sino que todos vengan al arrepentimiento.' El Calvinismo está muy lejos del Dios de la Biblia que ama a la humanidad tanto que envió a su Hijo unigénito para salvar a todo aquel que pide de él misericordia en el nombre de su hijo resucitado, Jesucristo. Todo ministro evangélico debería leer este libro. Si lo hicieran, veríamos un avivamiento de la pasión para ganar almas que impactaría a este mundo y las multitudes podrían ver claramente al verdadero Dios de la Biblia, y no al falso dios del Agustinianismo y Calvinismo."

CHUCK SMITH
Pastor, Calvary Chapel Costa Mesa

“Dave Hunt lo ha hecho otra vez. Así como sus libros, La Seducción de la Cristiandad y Una Mujer Cabalga la Bestia han movido a la comunidad cristiana a fijarse seriamente en las enseñanzas aberrantes de algunos Pentecostales y la Iglesia Católica, ahora en su último libro sobre el Calvinismo, él trae a la luz las enseñanzas de Juan Calvino, que de seguro causarán impacto a través de toda la iglesia y enviará a muchos de vuelta a un estudio serio del TULIP a la luz de la palabra de Dios. Él ha investigado los orígenes de las enseñanzas del Calvinismo y documenta minuciosamente sus resultados. Es una lectura obligada para aquellos que son serios en su deseo de comprender la influencia que Calvino ha tenido y sigue teniendo en la Iglesia Evangélica”.

ELMER L. TOWNS
Decano, Escuela de Religión, Liberty University

"Dave Hunt ha dado detalles exactos para mostrar las fallas agonizantes de los abusos calvinistas que la mayoría de las personas no ha considerado. Me gustaría que todos mis estudiantes en Liberty University (Universidad Libertad)  lean este análisis a profundidad. Parece que cada año el Calvinismo, como el diente de león, brota en la primavera. Los estudiantes se ocupan en discutir las cuestiones del Calvinismo. Aquellos estudiantes que no les gusta ganar almas agresivamente utilizan su punto de vista del Calvinismo para defender su posición. Aquellos que son ganadores de almas agresivos atacan las debilidades del Calvinismo. Muy poco de sus discusiones se basan en la verdad de la palabra de Dios. En el análisis final, sus argumentos son como malas hierbas, es decir, dientes de león que no fructifica. Muchos leerán este libro 'para que ya no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del error,' sino que pueden basarse en la palabra de Dios".

WILLIAM MACDONALD
Autor de más de 80 libros en 100 idiomas incluyendo Comentario Bíblico del Creyente y El Verdadero Discipulado

"Este libro expone al Calvinismo tradicional por presentar a Dios de una manera totalmente anti-bíblica. Los calvinistas profesos tendrán que reconsiderar su posición cuando se den cuenta de las verdades bíblicas que están en juego. Este libro permanecerá como una obra definitiva sobre el tema".

DR. CHUCK MISSLER
Fundador, Koinonia House

 "El carácter de Dios ha sido totalmente tergiversado por nuestras tradiciones denominacionales comunes. Dave Hunt continúa su compromiso intrépido por revelar la verdad — a pesar de no ser considerado la norma actual o de ser políticamente incorrecto —. Ponga venda a sus prejuicios y esté listo para recibir una perspectiva impresionante y urgentemente necesaria en esta área muy controvertida. Éste es otro tema esencial para el estudiante serio de la palabra de Dios".

ARNO FROESE
Director Ejecutivo, Ministerio Llamada de Medianoche • Editor, Llamada de Medianoche

"Raramente alguien ha llevado a cabo la exhaustiva tarea de detallar y documentar la idea errónea de la gracia soberana de Dios como Dave Hunt. Al leerse esta obra, debe convencer incluso al más acérrimo calvinista a reconocer la errónea teología filosófica de preselección como un intento de eliminar la capacidad del hombre para ejercer su libre albedrío, que reduce el amor soberano de Dios a un acto de un mero dictador. Este libro debe ser leído por cada comunicador del Evangelio en defensa de los principios fundamentales de la gracia de Dios".

JOSEPH R. CHAMBERS, DD, DSL
Pastor, autor, y anfitrión de radio

"Este increíble libro de Dave Hunt es fundamental en la generación de 'guerra de clases'. Es difícil creer que el mundo cristiano tiene su propio sistema de 'segregación'. Eso es exactamente lo que representa el híper-Calvinismo, y este libro expone lo que es realmente el horror de la segregación espiritual por lo que realmente es. El Calvinismo convierte a nuestro Padre celestial en el peor déspota, y me uno a Dave en declararlo: ¡No Culpable! La revelación bíblica de la redención no deja a nadie sin invitación".

JIM CUSTER
Ministerio Right Start

"Estoy contento de ver a Dave abordar un tema duro, y suministrarnos de materiales de las que muchos de nosotros no hemos tenido acceso hasta ahora, y que desafían la base bíblica del TULIP".

BOB WILKIN, PH.D.
Fundador y Director Ejecutivo, Grace Evangelical Society

"Dave Hunt nos ha dado una fascinante exposición del Calvinismo moderno de cinco puntos que es altamente legible y práctico. Especialmente disfruté de la sección de perseverancia y seguridad de la salvación".

HARRY BOLLBACK
Co-fundador con Jack Wyrtzen de Word of Life Internacional

"Como un biblicista, este libro me parece una refrescante revisión bíblica de las cosas que durante muchos años han llevado a confusión a los creyentes. Hemos permitido que palabras e ideas de hombres determinen nuestra posición. Este libro nos recuerda de escuchar lo que la Palabra de Dios tiene que decir".

JOE JORDAN
Director Ejecutivo Word of Life Fellowship, Inc.

"La manera en que Dave Hunt trata esta antigua controversia sobre la elección y la predestinación en su libro, ¿Qué Amor es Este? La Tergiversación de Dios que hace el Calvinismo, no sólo nos hace reflexionar, sino que también lleva al lector a concentrarse en un punto de vista bíblico en esta cuestión teológica tan controvertido. Muchas veces la teología se aborda filosóficamente y no bíblicamente, y este enfoque traerá estragos a la iglesia. En el libro de Dave, somos desafiados a volver a las Escrituras a medida que evaluamos el trabajo de Dios sobre este tema tan importante de la salvación. Éste es definitivamente un libro que nos lleva a reflexionar sobre cómo formulamos nuestra doctrina".

Para mayor información, visite nuestra sección:
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Traducido por Donald Dolmus
En Defensa de la Fe (endefensadelafe.org)
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