miércoles, 9 de marzo de 2016

Revista Llamada de Medianoche - Marzo 2016

¿Estamos Ya en el Milenio?


Temas incluidos en esta edición:

»» ¿Es el Milenio un evento futuro?
»» La vaca roja y el Tercer Templo
»» Ehud Barak: Israel 3 veces se encontró ante un ataque de Irán
»» ¿Qué es lo extraordinario de la Resurrección?
»» ¿Tenía Jesús sangre divina?

Entre otros.

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Lamplighter Magazine (March-April 2016)

The Centrality of the Resurrection


Topics included in this issue:

»» From Communism to Christianity
»» Top Bible Prophecy Stories of 2015
»» Pre-Trib in my Inbox
»» Bible Prophecy Nuts
»» Will Wheaton College Stand Firm

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martes, 8 de marzo de 2016

Estudio Bíblico Mesiánico: Los Tres Milagros Mesiánicos




Tabla de Contenido

I. El Primer Milagro Mesiánico: La Sanidad de un Leproso
  A. Introducción
  B. La Sanidad del Leproso
  C. La Respuesta Judía

II. El Segundo Milagro Mesiánico: Echando Fuera a un Demonio Mudo
  A. Introducción
  B. Echando fuera a un Demonio Mudo
  C. La Respuesta Judía
  D. El Juicio
  E. El Cambio en el Ministerio Del Mesías
    1. Concerniente al Propósito de Sus Milagros
    2. Concerniente a la Base de Sus Milagros
    3. Concerniente al Mensaje de que Él era el Mesías
    4. Concerniente al Método de Sus Enseñanzas
  F. Otro Demonio Mudo

III. El Tercer Milagro Mesiánico: La Sanidad de un Hombre que Nació Ciego
  A. Introducción
  B. La sanidad Física de un Hombre que Nació Ciego
  C. El Primer Interrogatorio del Hombre
  D. El Interrogatorio de sus Padres
  E. El Segundo Interrogatorio del Hombre
  F. La Sanidad Espiritual

IV. El Último Testigo Mesiánico

¿Qué es más fácil, decir al paralítico: Tus pecados te son perdonados, o decirle: Levántate, toma tu lecho y anda? - Marcos 2:9

En el tiempo previo a la venida de Yeshúa (Jesús), los rabinos de entonces separaban los milagros en dos categorías. Primero eran los milagros que cualquier persona podía hacer, si era investido del poder de Dios. La segunda categoría era llamada “Los Milagros Mesiánicos”, que eran los milagros que sólo el Mesías podría hacer. Yeshúa hizo milagros en ambas categorías: Milagros generales y también mesiánicos. Según las enseñanzas de los rabinos, ciertos milagros estaban reservados sólo para el Mesías, y cada vez que Él hacía un milagro mesiánico causaba una reacción diferente a la que causaba cuando hacía otra clase de milagro. Éste es un estudio de tres Milagros Mesiánicos, las reacciones hacia ellos, y los resultados de los mismos.

I. El Primer Milagro Mesiánico: La Sanidad de un leproso

A. Introducción

El primer milagro mesiánico fue la sanidad de un leproso. Bajo la Ley Mosaica, la única manera en que una persona podía ser contaminada por un cuerpo humano vivo era si tocaba a un leproso. Normalmente, bajo la Ley Mosaica, la única manera que alguien llegaba a ser ceremonialmente inmundo o contaminado era por tocar un cuerpo humano muerto, o por tocar el cuerpo de un animal muerto, o por tocar el cuerpo de un animal inmundo vivo, tal como un puerco. La única manera que la contaminación llegaba a través de un cuerpo humano vivo, era por tener contacto con un leproso.

Desde el tiempo en que quedó concluida la Ley Mosaica, no existía registro de que algún judío hubiese sido sanado de lepra. Miriam fue limpiada de su lepra, pero eso sucedió antes que la ley quedara concluida. Naamán fue sanado de su lepra, pero él no era judío, era un gentil sirio. Desde el tiempo en que se concluyó la Ley Mosaica, no hubo un solo caso en el que algún judío hubiese sido sanado de lepra.

La lepra era una enfermedad que quedó fuera de las curas rabínicas; no había curación para la lepra. Sin embargo, en Levítico 13-14 se dan instrucciones detalladas al sacerdocio levítico de lo que habían de hacer en el caso de que un leproso fuera sanado. En el día que un leproso se acercaba al sacerdote y decía: “Yo estaba leproso pero he sido sanado” el sacerdote tenía que dar una ofrenda inicial de dos avecillas.

Por los siguientes siete días, ellos debían investigar intensamente la situación para determinar tres cosas. Primero, ¿en realidad la persona había sido leprosa? Segundo, si en realidad había sido leproso, ¿qué tan cierto era que había sido sanado de su lepra? Tercero, si en realidad había sido sanado de su lepra, ¿cuáles eran las circunstancias de su sanidad?

Si después de siete días de investigación ellos estaban firmemente convencidos de que el hombre había sanado de su lepra, y que el hecho era incuestionable, entonces en el octavo día se daba una larga serie de ofrendas. Había cuatro ofrendas diferentes. Primero, la ofrenda por la culpa; segundo, la ofrenda por el pecado; tercero, la ofrenda quemada; cuarto, la ofrenda de harina amasada. Luego se aplicaba la sangre de la ofrenda por la culpa, sobre el leproso sanado. La ceremonia concluía con el ungimiento del aceite sobre el leproso sanado.

Aunque el sacerdocio tenía todas las instrucciones detalladas acerca de qué hacer en caso de que un leproso fuera sanado, nunca tuvo la oportunidad de poner en práctica las instrucciones, porque desde que la Ley Mosaica fue dada, ningún judío había sido sanado de lepra. Debido a ello, los rabinos enseñaban que sólo el Mesías podría sanar a un judío leproso.

La sanidad de un leproso era clasificada como el primero de los tres Milagros Mesiánicos.

B. La Sanidad de un Leproso

Los pasajes de los tres Evangelios que nos hablan de la sanidad del leproso son: Mateo 8:2–4, Marcos 1:40–45 y Lucas 5:12–16. Mateo y Marcos sólo citan que el hombre era leproso, pero Lucas, que era médico de profesión, da más detalles.

De acuerdo a Lucas 5:12 el hombre estaba lleno de lepra. Eso quiere decir que la lepra estaba ya totalmente desarrollada, y que no pasaría mucho tiempo para que la lepra acabara con la vida de este hombre. Este hombre lleno de lepra “vino a Jesús y le rogó diciendo: Señor, si quieres, puedes limpiarme. El leproso claramente reconoció la autoridad de Jesús como el Mesías, y que tenía poder para sanar de la lepra. La única pregunta del leproso era si Él quería hacerlo. En ese momento leemos en el versículo 13 que Yeshúa tocó al leproso, “Y al instante la lepra se fue de él”.

Pero notemos con atención lo que le dijo al leproso que hiciera, según Lucas 5:14, “Y Él le mandó que no lo dijese a nadie; Pero ve, le dijo, muéstrate al sacerdote, y ofrece por tu limpieza, como mandó Moisés, para testimonio a ellos”.

La palabra “ellos” se refiere a los líderes de Israel. Jesús envió a este hombre directamente al sacerdocio que estaba en Jerusalén para forzarlos a seguir los mandatos de Moisés de Levítico 13–14. Este hombre fue delante del sacerdocio de Israel y se declaró limpio de la lepra; en ese día el sacerdote ofreció dos avecillas como sacrificio.

Por los siguientes siete días, ellos investigaron intensamente la situación y descubrieron tres cosas. Primero, descubrieron que este hombre en realidad había estado leproso. Segundo, descubrieron que el hombre había sido perfectamente sanado de su lepra. Tercero, descubrieron que Yeshúa de Nazaret fue quien había sanado a este hombre de su lepra.

Debido a que ellos enseñaban que la sanidad de un leproso era un milagro mesiánico,  quien sanara a un leproso, por el mismo acto, debía ser declarado como el Mesías. Jesús intencionalmente envió a este leproso sanado ante el sacerdocio para que los líderes comenzaran a investigar Sus afirmaciones  mesiánicas y que llegaran a una conclusión en cuanto a Sus afirmaciones de ser el Mesías. Él quiso forzar a los líderes judíos a tomar una decisión en cuanto a Su Persona, que Él era el Mesías; y su mensaje, que Él estaba ofreciendo a Israel el Reino predicho por los profetas judíos.

Habiendo enviado al leproso sanado ante los líderes de Israel, Yeshúa “…se apartaba al desierto, y oraba” (Lc. 5:16). Él se fue al desierto donde, en una ocasión, Él ayunó y fue tentado por Satanás. Esta vez Él fue al desierto con el propósito de orar. ¿Acerca de qué oraba? Él oraba por lo que pasaría enseguida y por la reacción que los líderes de Israel habían de tener ante este milagro mesiánico.

C. La Respuesta Judía

Lo que ocurrió enseguida lo encontramos en tres de los Evangelios: Mateo 9:1–8, Marcos 2:1–12 y Lucas 5:17–26. Marcos señala que este incidente sucedió en Capernaúm, en Galilea, a muchos kilómetros de Jerusalén.

Sin embargo, Lucas 5:17 dice: “Y aconteció un día, que Él estaba enseñando, y los fariseos y doctores de la ley estaban sentados; los cuales habían venido de todas las aldeas de Galilea, y de Judea y Jerusalén: Y el poder del Señor estaba allí para sanarlos”.

Lo que aquí tenemos es un grupo de líderes judíos del pueblo de Capernaúm escuchando las enseñanzas de Yeshúa. El relato de Lucas claramente dice que estos eran líderes judíos que se habían reunido de todas las aldeas: Galilea, Judea y los alrededores de Jerusalén. ¿Por qué estos líderes judíos,  repentinamente, estaban teniendo una convención en Capernaúm? Ésta era en respuesta al primer milagro mesiánico. Ellos sabían que Jesús había sanado a un leproso. De acuerdo a sus propias enseñanzas, sólo el Mesías podría hacer tales milagros. Si Él había sanado a un leproso, bien podía significar que Él era el Mesías. Así que vinieron juntos para investigar a Jesús.

De acuerdo a la ley del Sanedrín, si había algún tipo de movimiento mesiánico, el Sanedrín debía investigar la situación en dos etapas. La primera era llamada “La etapa de observación”. Se formaba una delegación para investigar con sólo observar. Tenían que observar qué se decía, se hacía y se enseñaba, y no se les permitía hacer preguntas o presentar objeciones. Después de un período de observación, debían regresar a Jerusalén y reportarse ante el Sanedrín, y allí se daba un veredicto. El movimiento, ¿era relevante, o insignificante? Si declaraban que el movimiento era insignificante, se abandonaba el asunto. Pero si declaraban que el movimiento era relevante, entonces seguía una segunda etapa de investigación llamada “La etapa de interrogatorio”. En esta etapa se interrogaba al individuo o a los miembros del movimiento. Entonces hacían preguntas y presentaban objeciones para descubrir si los reclamos debían ser aceptados o rechazados. Este incidente en Lucas 5:17 registra la primera etapa, la de observación. Los líderes judíos estaban allí para observar lo que Jesús decía, hacía y enseñaba. Hasta este punto ellos no podían hacer preguntas o presentar objeciones. Pero debido a que un milagro mesiánico había sido hecho, todos los líderes de todas las aldeas, habían venido a Jerusalén para participar en la etapa de observación, para ver lo que Yeshúa decía, hacía y enseñaba.

Mientras Yeshúa (Jesús) estaba enseñando, cuatro amigos trajeron a un paralítico para que Él lo sanara. Pero no pudieron entrar porque los líderes judíos estaban bloqueando la puerta. Entonces subieron al techo y haciendo una abertura en él, bajaron al paralítico y lo pusieron a los pies de Jesús. En este momento Yeshúa se apartó de Su proceso normal y no hizo lo mismo que en otras ocasiones, simplemente procedió a sanar al enfermo que le había sido traído.
En Marcos 2:5 leemos: “Y al ver Jesús la fe de ellos, dijo al paralítico: Hijo, tus pecados te son perdonados”.

En vez de simplemente sanar al hombre, Jesús hizo una declaración extraordinaria: “Hijo, tus pecados te son perdonados”, sabiendo de antemano que al estar presentes los líderes judíos Sus palabras iban a provocar una respuesta negativa. Y en efecto así sucedió, pues en Marcos 2:6 leemos: “Y estaban sentados allí unos de los escribas, los cuales pensaban en sus corazones…”.

Esta era la etapa de observación. Ellos sólo podían observar; no tenían permiso de hacer preguntas o presentar objeciones.

De acuerdo a Marcos 2:7, ellos pensaban en sus corazones: ¿Por qué habla Éste así? Blasfemias dice. ¿Quién puede perdonar pecados, sino sólo Dios? La teología de ellos era totalmente correcta; nadie podía perdonar pecados, sino sólo Dios. Y ya que Yeshúa se había tomado la prerrogativa de perdonar pecados, esto podía significar una de dos cosas. La primera, que tal vez era un blasfemo. Pero la segunda posibilidad era que en verdad Él era quien decía ser, La Persona del Mesías. Fue en este momento que Yeshúa se dirigió a los líderes de Israel y les preguntó en Marcos 2:9: “¿Qué es más fácil, decir al paralítico: Tus pecados te son perdonados, o decirle: Levántate, toma tu lecho y anda?”.

La pregunta fue: “¿Qué es más fácil decir uno a otro: Tus pecados te son perdonados, o decir a un paralítico, voy a sanarte, así que levántate y anda?”. Lo más fácil es decir: “Tus pecados te son perdonados”. Pues esto no requería de algo externo y tangible, de una evidencia palpable. Pero decir a un paralítico que iba a ser sanado era más difícil porque eso requería de una evidencia externa y palpable.

Jesús procedió a probar que podía decir lo más fácil “Tus pecados te son perdonados” haciendo lo más difícil, sanar al paralítico. Él procedió a sanar al paralítico. Hubo una evidencia instantánea y palpable, porque el hombre pudo levantarse, caminar y aun llevar el lecho sobre sus hombros. Esto probó que Yeshúa podía decir lo más fácil, que también los pecados de este hombre eran perdonados. Si Jesús podía perdonar pecados, eso significaba que Él era quien decía ser, La Persona del Mesías. En respuesta al milagro mesiánico de sanar al leproso, se dio comienzo a una intensa investigación de Sus reclamos mesiánicos. Los líderes observaron que Jesús reclamó la autoridad de perdonar pecados. Por tanto, Él era un blasfemo, o la Persona del Mesías. Es evidente que los líderes de Israel regresarían a Jerusalén y declararían que el movimiento de Yeshúa era relevante. Después de este evento, Él comenzó a pasar por la segunda etapa de investigación de parte del Sanedrín, la etapa de interrogatorio. Entre su primer milagro mesiánico y el segundo milagro mesiánico, adonde quiera que Jesús fuera, los Fariseos se aseguraban de seguirlo. Para este tiempo, ellos ya no guardaban silencio. Adonde quiera que iba, un Fariseo estaba allí haciendo preguntas o levantando objeciones. Ellos estaban buscando una justificación para rechazar o aceptar sus reclamos mesiánicos. 

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Lea otros Estudios Bíblicos Mesiánicos:

jueves, 11 de febrero de 2016

Apocalipsis: El Anticristo

¿Será asesinado y luego resucitado de entre los muertos?



Los autores de la serie “Dejados Atrás” (Left Behind) afirman que el Anticristo será asesinado y que luego será resucitado de los muertos. Hay una base bíblica para esta suposición, pero no creo que sea válida. La suposición está basada en Ap. 13:1-3 donde Juan dice que vio “una bestia que salía del mar” (el Anticristo surgiendo de entre las naciones gentiles). Luego añade que la bestia tenía diez cuernos con coronas y siete cabezas y que una de sus cabezas “había sido herida” y “la herida fatal había sido sanada”.

Se trata, evidentemente, de imágenes simbólicas y creo que se refieren a reinos en lugar de a una persona. En Ap. 12:3, Satanás es descrito como un dragón con siete cabezas coronadas y diez cuernos. En Ap. 13:1, el Anticristo es descrito como una bestia con siete cabezas y diez cuernos coronados. Las cabezas de Satanás están coronadas porque representan los siete grandes imperios mundiales que ha controlado. Los diez cuernos del Anticristo están coronados porque representan los diez reinos que inicialmente controlará.

Una pista de la identidad de las siete cabezas se encuentra en Ap. 17:9-11donde la imagen de siete montañas es usada para referirse a los grandes reinos del mundo. Se nos dice que en la época que Juan estaba escribiendo (cerca del 95 EC), “cinco han caído, uno es, el otro aún no ha venido” (Ap. 17:10). Eso significaría que los reinos pasados, en orden, serían Egipto, Asiria, Babilonia, Medo-Persia y Grecia. El reino actual (“uno es”) era Roma. El que aún ha de venir es el reino del Anticristo, que estará basado inicialmente en el control de diez reinos, pero que se expandirá hacia un imperio mundial que será el octavo y último de los reinos mundiales gentiles (Ap. 17:11).

Por eso, creo que la “cabeza” mencionada en Ap. 13:3, la cual es herida y luego resucitada, es el Imperio Romano y no un individuo. Hoy estamos siendo testigos de esa resurrección en la aparición de la Comunidad Europea.

Traducido por Donald Dolmus
En Defensa de la Fe (endefensadelafe.org)

Original article:

miércoles, 10 de febrero de 2016

El Enigma del Calvinismo

"Leyendo a los escritores calvinistas, encontramos que la única cosa que es consistente es su inconsistencia".

Por T. A. McMahon 


El Calvinismo, desde mi primer contacto con sus enseñanzas y prácticas hasta el día de hoy, no ha dejado de ser un enigma para mí. De hecho, cuanto más he aprendido sobre el tema, resulta ser aún más desconcertante. Algunos defensores del Calvinismo me han dicho que mi mente es muy limitada para poder comprender sus enseñanzas. En lugar de estar ofendido por esa acusación, me parece una crítica que me pone en buena compañía. Dave Hunt, uno de los hombres más inteligentes que he conocido, fue acusado una vez por dos jóvenes pastores calvinistas de "no tener la capacidad de" entender el Calvinismo (es decir, ser demasiado estúpido), principalmente porque él no tenía conocimiento del idioma griego y hebreo. La respuesta que Dave dio a estos jóvenes fue apacible pero firme, diciéndoles que su propia educación era relativamente breve en los idiomas griego y hebreo si se compara al conocimiento que los cristianos del primer siglo tenían de tales idiomas. Sin embargo, el conocimiento de esos idiomas no parece haber dado a los primeros creyentes ninguna ventaja para dejar de lado las enseñanzas de las Escrituras, ya que la mayor parte del Nuevo Testamento fue escrito para corregir los errores de ellos.

Este artículo, sin embargo, no es una apología del Calvinismo. Dave y otros han escrito volúmenes criticando ese sistema de creencias, así que cualquiera que esté interesado puede acceder fácilmente a tal información. Si no está familiarizado con las creencias del Calvinismo, nuestros materiales de recursos son extensos, desde el libro de Dave Hunt titulado: "¿Qué amor es Éste?", hasta los más pequeños libros y folletos, que están llenos de información.

Lo que presento aquí son solamente algunas de las conclusiones que he formulado a través de los años y que son inquietantes y sorprendentes y que hasta ahora no he tenido una explicación razonable excepto el escuchar que "los caminos, los medios y los pensamientos de Dios están más allá de mis pensamientos y comprensión". Indudablemente que ése es el caso aunque Dios nos dice, "Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta" y Él nos ha dado su Espíritu Santo para ayudarnos con nuestra falta de entendimiento (Isaías 1:18; Juan 16:13; 1 Cor. 2:14). Sin embargo, las conclusiones que siguen a continuación son algunas de las cosas que me parecen ser terriblemente desconcertantes.

Habiendo sido educado en la religión Católica, en una escuela primaria católica, en una escuela militar católica y en una escuela secundaria católica, mi conocimiento de mi fe era a mi parecer bastante sólido.  Yo era considerado como un "católico devoto", lo que significaba que tomaba mi religión muy en serio.  Uno de los "santos" católicos más alabados era San Agustín. Me enseñaron que él era el padre y Doctor (maestro) de la Iglesia Católica. Él había inspirado algunos y confirmado todos los dogmas del Catolicismo Romano. Él creyó y enseñó la presencia real de Cristo en el pan y el vino en la Misa; que la Misa, como la Eucaristía, era una continua inmolación (muerte sacrificial) de Jesús; que el bautismo es absolutamente necesario para la salvación; que María era una virgen perpetua y sin pecado; que los libros Apócrifos eran parte del canon del Antiguo Testamento; que los papas eran el cumplimiento de la sucesión apostólica; que Cristo no reinaría literalmente mil años sobre la tierra, y que toda la autoridad espiritual residía en la Iglesia Católica Romana. Con respecto a este último punto, Agustín escribió: "Si encuentra alguien que todavía no cree en el Evangelio, ¿qué le contestaría usted cuando él dice 'No creo'?  De hecho, no creería en el Evangelio yo mismo si la autoridad de la Iglesia Católica no me moviera a hacerlo". No cabe duda alguna que "San" Agustín era completamente Católico.  

¿Calificaría uno al Catolicismo de San Agustín como un enigma? Protestantes calvinistas, quienes protestan contra la iglesia de Roma, incluyendo a Juan Calvino, mantuvieron y continúan manteniendo a Agustín en una reverencia que está al borde de ser idolatría. Calvino lo llamó "Santo Padre" en sus "Institutos de la Religión Cristiana"   y lo cita más de 400 veces. El Calvinista François Wendel reconoce que "sobre puntos de doctrina [Calvino] pide prestado a San Agustín con las dos manos"  (TBC 7/12). Dave Hunt señala en "¿Qué amor es Éste?" el gran elogio a San Agustín por líderes calvinistas refiriéndose a él como: "Una de las grandes mentes teológicas y filosóficas que Dios ha dado a Su iglesia" (Talbot y Crampton, citado en Dave Hunt, "¿Qué amor es Éste?").   "El cristiano más grande desde la época del Nuevo Testamento... el hombre más grande que haya escrito en el idioma latín" (Souter, citado en Hunt, "¿Qué amor es Éste?"). "[Sus] obras y escritos, más que las de cualquier otro hombre en la época en que vivía, contribuyeron a la promoción de la sana doctrina y el renacimiento de la religión verdadera" (Rice, Ibíd.). Estos comentarios provienen de aquellos que representan un sistema religioso que históricamente se ha opuesto a la Iglesia Católica Romana, al menos, eso es la percepción general.

Si eso no es desconcertante, consideren esto: uno de los íconos venerados del Calvinismo, B. B. Warfield, quien dirigió el seminario de Princeton, afirmó que Agustín no era solamente el fundador del Catolicismo Romano, sino también era el Padre de la Reforma (Warfield, Ibíd., 59). Se necesita más que una imaginación creativa para dar sentido a esa perspectiva.

El grito de los reformadores fue la llamada "sola escritura", que significa que solamente la Biblia debe ser la autoridad para el cristiano en todos los asuntos de fe y práctica, con lo cual estoy totalmente de acuerdo.  Sin embargo, aunque Calvino y Lutero, entre otros, saludaban esa bandera, no vivieron cumpliendo su importante verdad. Mantuvieron ciertos hábitos de su antigua fe que no se encuentran en la Palabra de Dios o que son contrarios a las enseñanzas de las Escrituras. El bautismo de infantes, por ejemplo, se mantuvo, y se afirmó que tal ritual convierte a niños en cristianos y les abre la puerta al cielo. El ritual del bautismo, en vez de ser una declaración pública de una identificación con Cristo, implicó la eliminación de los pecados y concede regeneración espiritual. También continuaron con el clericalismo, dando autoridad especial a sus sacerdotes. Empujaron la Ordenanza de Cristo de comunión más allá de su instrucción escritural. La comunión se convirtió en un sacramento eficaz con sus elementos sagrados que podría ser administrado sólo por el clero, en lugar de ser un simple acto llevado a cabo por todos los creyentes en recuerdo de la muerte, sepultura y resurrección de Cristo. Calvino, en particular, continuó la práctica católica de las iglesias respaldado por el Estado, y a consecuencia de esto, el gobierno secular de Ginebra apoyó sus decretos, los cuales fueron algunas veces letales. Obviamente, la idea de la "sola escritura" funcionalmente se perdió por aquellos que dijeron que deseaban reformar el Catolicismo Romano.  Estoy desconcertado y apenado que tal abandono crítico por las Escrituras, es pasado por alto por los calvinistas.   

Pero hay mucho más que me desconcierta, y la idea calvinista sobre la predestinación está en la parte superior de la lista e infecta al resto. Yo no puedo comprender cómo un cristiano que cree en la Biblia, pueda aceptar el punto de vista de Calvino acerca de la predestinación y al mismo tiempo aceptar la soberanía de Dios, que él (Calvino) tomó principalmente de los escritos de "San" Agustín. Calvino declara, "Yo digo al igual que Agustín, que el Señor ha creado los que, como ciertamente conoció con anterioridad, debían ir a la destrucción, y lo hizo porque Él lo quiso. ¿Por qué razón Él quiso?, no es para nosotros el preguntar..."    

Calvino enseñó que todo depende de la mera voluntad de Dios. Escribe el Calvinista R. C. Sproul Jr., "Dios dispone todas las cosas que vienen a pasar... Dios causa que cada hombre caiga en pecado... Dios creó el pecado"(Sproul Jr., Ibíd., 275). Otro calvinista agrega: "Dios está detrás de todo. Él decide y hace que todas las cosas sucedan... Él ha pre ordenado todo  'a través del Consejo de Su voluntad': el movimiento de un dedo, el latido de un corazón, la risa de una niña, el error de un mecanógrafo, incluso el pecado" (Palmer, Ibíd.). Piense por un momento acerca de las implicaciones de lo que han dicho estos hombres y que además enseñan a multitudes de otros calvinistas que están de acuerdo con ellos.  ¿Realmente creen que Dios es el autor de cada acto malvado de la humanidad? Si es así yo no puedo ver cómo pueden racionalizar su manera de pensar que los pueda alejar de tal conclusión, es la blasfemia máxima dirigida al carácter de Dios. Mi reacción inmediata es de espanto: ¿cómo es posible que estos hombres que profesan conocer y amar a Dios y que son muy apreciados en el mundo cristiano, puedan pensar de tal manera y hasta predicar ese punto de vista?  ¿Es posible que su "razonamiento intelectual" los haya cegado para no ver el gran número de Escrituras que claramente y abrumadoramente contradicen tal teología?  No entiendo por qué ellos no entienden.

Y esto no es una manera calvinista de pensar llevada al extremo.  La predestinación es central en la enseñanza del Calvinismo sobre la soberanía, presciencia, elección incondicional, la negación del libre albedrío, expiación limitada, gracia irresistible, regeneración antes de creer y, sin duda, el destino eterno de millones, quizás miles de millones de almas, que han sido predestinadas al Lago de Fuego antes del principio de los tiempos.  

Yo podría llenar cada página de esta publicación y aún más con las contradicciones, las absurdas conclusiones y las caracterizaciones erróneas y trágicas que han sido generadas por las creencias calvinistas de nuestro Dios y Salvador acerca de la predestinación y la soberanía. Son una terrible ofensa a la verdad bíblica y al sentido común. El espacio designado para este artículo me limita sin embargo a enumerar sólo algunas. Sin embargo, espero que aquellos que se llaman calvinistas o se inclinan hacia ese sistema de creencias, piensen seriamente y oren antes de adoptar tales creencias.    

Mis preguntas son las siguientes: ¿por qué Jesús predicaría arrepentimiento a las multitudes (Mateo 4:17) si su destino ya estaba predestinado? ¿Cuál fue el propósito de Jesús en maldecir a las ciudades donde Sus milagros fueron hechos si no se arrepintieran? ¿Tuvieron ellos una opción? ¿Por qué Jesús invitó a todos los que están cansados y agobiados a venir a Él (Mateo 11:28), si los que no son elegidos no pueden hacerlo? ¿Por qué Jesús llamó a un  niño pequeño a sí mismo (Mateo 18:1-4) y dijo: "si no os volvéis u os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos"?  Él también dijo lo siguiente: "no es la voluntad de vuestro Padre que está en los cielos, que se pierda uno de estos pequeños"(Mateo 18:14). ¿Por qué Jesús llamaría "a toda la multitud" (Marcos 7:14) y les dijo, "Oídme todos, y entended", si ellos no podrían acudir a Él o entender hasta que fueran regenerados? ¿Entendió mal el ángel que apareció a los pastores (Lucas: 2:10) cuando dijo, "No temáis; porque he aquí os doy nuevas de gran gozo, que será para todo el pueblo"?  Si Jesús predestinó a un número incalculable de almas a un destino horrible, ¿por qué diría Él, "porque el hijo del hombre no ha venido para perder las almas de los hombres, sino para salvarlas" (Lucas 9:56)? ¿Por qué hay "gozo delante de los ángeles de Dios por un pecador que se arrepiente" (Lucas 15:10), si fue coaccionado por la "gracia irresistible" y previamente estaba programado? Juan escribe, "y nosotros hemos visto y testificamos que el Padre ha enviado al Hijo, el Salvador del mundo" (1 Juan 4:14). " Y creyeron muchos más por la palabra de Él, y decían a la mujer: Ya no creemos solamente por tu dicho, porque nosotros mismos hemos oído, y sabemos que verdaderamente éste es el Salvador del mundo, el Cristo" (Juan 4:41-42). ¿Fueron todos estos samaritanos regenerados antes de venir a Él? 

Esos son algunos de los versículos que presentan dudas razonables acerca de las creencias calvinistas. El Antiguo Testamento y el resto del Nuevo Testamento están llenos de cientos de versículos más. En relación con el Antiguo Testamento, ¿por qué diría Josué, "escogeos hoy a quien sirváis" y "pero yo y mi casa serviremos a Jehová" si, de hecho, él y ellos no tenían ninguna opción en la materia? (Josué 24:15).  En el libro de Apocalipsis se nos dice del juicio del gran trono blanco de los perdidos (Apocalipsis 20:11-15).

Si la enseñanza calvinista de la predestinación fuera verdad, es decir, que las almas en pie ante Cristo para juicio final fueran predeterminadas para el Lago de Fuego antes de que la humanidad fuera creada, no dándoles ninguna oportunidad para la salvación, ¿cuál sería el propósito del juicio?  Si el Calvinismo es cierto, y no sólo el destino de los perdidos fue preestablecido, pero los pecados que cometieron fueron creados por un Dios absolutamente soberano, entonces, no hay nada qué juzgar. Cualquier intento de reconciliar estos versículos de juicio con el Calvinismo convierte lo que las Escrituras enseñan en una farsa en el mejor de los casos, y en una burla a Jesús y una mofa contra la palabra de Dios en el peor de los casos.

Leyendo a los escritores calvinistas, encontramos que la única cosa que es consistente es su inconsistencia. Comentarios de John MacArthur en su "Biblia de Estudio", están repletos con enseñanzas que contradicen su Calvinismo de cinco puntos.  Por ejemplo, refiriéndose a Deuteronomio 30:15 escribe: "aquí indica Moisés su opción — amar y obedecer a Dios es la vida y lo bueno, rechazar a Dios es muerte y el mal. Si uno elije amar a Dios y a obedecer Su palabra, 'disfrutarán" de las bendiciones de Dios" — (énfasis agregado).

Para mí, el Calvinismo ha sido un enigma permanente. El haber sido católico por 30 años de mi vida,  mi gratitud va a los Reformadores que enfrentaron a la institución religiosa más poderosa de su época y dirigieron a los cristianos a las enseñanzas de las Escrituras. Sin embargo yo estoy afligido y consternado con la falsa teología anti bíblica que los Reformadores crearon bajo la bandera de "sola escritura"  y la distorsión que esta teología presenta cuando se refiere al carácter de Dios y su potencial para presentar un Evangelio falso.  Su creciente influencia también es muy preocupante e inquietante, personalmente debido a que algunos de mis buenos amigos y familiares son calvinistas o sostienen a algunas de las enseñanzas calvinistas. Aunque agradezco que a través de la oración, Dios provee oportunidades para desafiar estas opiniones a través de las Escrituras, aún sigue siendo una carga que pesa sobre mi corazón.

Aún así, Dios nos proporciona estímulo. Fue en una ocasión en que sentí que no había progreso alguno con mis amigos calvinistas y que la situación me estaba deprimiendo, cuando viajando en un automóvil y platicando con un pastor de buenas a primeras le hice una pregunta imprevista.  Mi pregunta no tenía nada qué ver con lo que estábamos hablando previamente, así que le tomó por sorpresa cuando le pregunté qué pensaba sobre el Calvinismo. Él reflexionó por un momento y luego explicó que cuando estaba en el seminario casi todos sus profesores favoritos era calvinistas. Muchos de sus escritores favoritos cristianos eran calvinistas, y él había leído algunos de sus libros. Por lo tanto, mientras estaba en la escuela, él creyó que él también era calvinista. Entonces mi sobria respuesta a esto fue,  "¿Así que, tú eres calvinista?", que era más una conclusión infeliz que una pregunta. Él me miró con una sonrisa y dijo: "¡No, no lo soy!" En ese momento, creo que me reí con cierto alivio.  A mi siguiente pregunta de, ¿Y qué pasó?, él me respondió con la mayor naturalidad de que mientras más leía la Palabra de Dios, más difícil le resultaba reconciliar sus creencias calvinistas con las Escrituras.

Lo único que puedo añadir a lo anterior es mi oración para que todos los que se sientan atraídos por el Calvinismo hagan lo mismo, es decir, el escrudiñar las Escrituras para ver si tales enseñanzas son fieles a la Palabra de Dios.  

Fuente: 


Conozca más acerca del Calvinismo: 

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