Mostrando entradas con la etiqueta The Berean Call. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta The Berean Call. Mostrar todas las entradas

miércoles, 30 de noviembre de 2011

Unas Breves Palabras

Prefacio del libro: ¿Qué Amor es Éste?



Discusiones con muchas personas alrededor del mundo revelan que multitudes de cristianos sinceros y creyentes en la Biblia son "calvinistas" sólo por defecto. Pensando que la única opción es entre el Calvinismo, con su doctrina de la seguridad eterna, y el Arminianismo, con su apostasía, y confiados en que la salvación no puede perderse debido a la promesa de Cristo de guardar eternamente a los que creen en Él, se consideran a sí mismos, por tanto, como calvinistas.

Sólo toma unas cuantas preguntas sencillas para descubrir el hecho de que la mayoría de los que se consideran calvinistas ignoran en gran medida lo que Juan Calvino y sus primeros seguidores de los siglos XVI y XVII realmente creían y practicaban. Ni tampoco comprenden plenamente lo que la mayoría de los líderes calvinistas de la actualidad creen.

Aunque existen variaciones en disputa de esta doctrina, entre sus principales defensores (a quienes citamos extensamente en contexto) hay un acuerdo general acerca de ciertas creencias fundamentales. Muchos de los que creen que entienden el Calvinismo se sorprenderán al descubrir sus raíces Católicas Romanas (énfasis añadido) y la conducta gravemente anti-Cristiana de Calvino como el "Papa protestante" de Ginebra, Suiza.

Lo más impactante de todo, sin embargo, es la tergiversación del Calvinismo de Dios que "es amor". Es nuestra oración que las siguientes páginas les permitirán a los lectores examinar cuidadosamente las cuestiones vitales involucradas y a seguir la Santa Palabra de Dios y no al hombre.

Artículos relacionados:
El Debate acerca del Calvinismo
Poderosa Refutación del Calvinismo por Dave Hunt (en pdf)
¿Está la revelación bíblica reservada para una élite?
Otros

Traducido por Donald Dolmus
En Defensa de la Fe (endefensadelafe.org)

Dave Hunt's book, "What Love is This?", can be obtained in here:
 

domingo, 27 de noviembre de 2011

¿Está la comprensión bíblica reservada para una élite?

Capítulo 2 del libro: ¿Qué Amor es Éste?



Los calvinistas enfatizan que su teología descansa sobre una sólida exégesis bíblica, estando “firmemente basada… en la Palabra de Dios”. Algunos han ido tan lejos como para afirmar que “esta enseñanza era considerada como la verdad por los apóstoles”, e incluso que “Cristo enseñó las doctrinas que han llegado a ser conocidas como los cinco puntos del Calvinismo”. De acuerdo con la Biblia misma, sin embargo, nadie debería aceptar tales afirmaciones sin verificarlas en las Escrituras.

Cualquier doctrina que afirme estar basada en la Biblia debe ser comprobada cuidadosamente contra la Biblia. Además, cualquiera que conozca la Biblia debería ser capaz de hacer eso. Depender de algún supuesto experto bíblico para una evaluación de las opiniones de otro sería estar dando vueltas en círculos. No importa cuál opinión uno aceptó, el resultado final sería el mismo: uno aún sería cautivo de la opinión humana. Cada individuo debe verificar personalmente todas las opiniones directamente con la Biblia. Sin embargo, estaba siendo aconsejado a permanecer callado sobre la base que sólo aquellos con calificaciones especiales eran competentes para contrastar el Calvinismo contra la Biblia, una idea que en sí misma contradecía la Escritura.

Los habitantes de la ciudad de Berea, aunque ni siquiera eran cristianos cuando Pablo les predicó por primera vez el Evangelio, “escudriñaban cada día las Escrituras para ver si estas cosas [las que Pablo les predicaba] eran así” (Hechos 17:11), y fueron elogiados como “nobles” por hacerlo. Sin embargo, los calvinistas insisten que se requiere una preparación especial (y aparentemente extensa) para llegar a ser alguien calificado para examinar esa peculiar doctrina a la luz de la Biblia. ¿Por qué?

Después de todo, la misma Biblia declara que un “joven” puede entender sus instrucciones y, por tanto, “limpiar su camino” (Salmo 119:9). Aun un niño puede conocer las Sagradas Escrituras por medio de la instrucción en el hogar impartida por su madre y por su abuela (2 Timoteo 1:5; 3:15). Si una habilidad especial fuera necesaria para probar el Calvinismo contra la Escritura, sin duda que sería una prueba en sí misma que esta peculiar doctrina no provino de una exégesis bíblica válida. Algo tan enigmático, por definición misma, no podría haberse derivado de la Biblia, quien sí misma afirmar estar escrita para los sencillos:

Pues mirad, hermanos, vuestra vocación, que no sois muchos sabios según la carne, ni muchos poderosos, ni muchos nobles; sino que lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte …a fin de que nadie se jacte en su presencia” (1 Corintios 1:26-29).

¿Es el Calvinismo tan difícil de entender?

¿Realmente debería ser el Calvinismo insondable para el cristiano común? Ese mismo hecho, si fuera cierto, sería una prueba adicional de que el Calvinismo no se derivó de las Escrituras. ¿Cómo podría algo tan complicado posiblemente provenir de aquello que toda persona es capaz de meditar día y noche (Salmo 1:1-2)? Si la alimentación esencial que la Palabra de Dios provee debe ser el sustento diario para la vida espiritual de todo hombre (Deuteronomio 8:3), ¿podría el Calvinismo haber provenido de la Biblia y sin embargo ser indigerible para el cristiano ordinario?

Muchos, cuya obvia sinceridad fue apreciada, me estaban diciendo que a pesar de que cito a Juan Calvino directamente de sus escritos, junto con citas de líderes calvinistas de hoy en día, aún era muy probable que yo tergiversara al Calvinismo porque yo no lo entendía. Aun después de una detallada discusión reciente con amigos calvinistas que duró tres horas, ellos aún me dijeron, “Tú no entiendes el Calvinismo”. Si el Evangelio fuera así de complicado, ¿quién podría ser salvo?

¿Por qué el Calvinismo debe ser un tema tan difícil y aparentemente esotérico que requeriría años comprenderlo? Tal actitud muy bien podría intimidar a muchos a aceptar esta creencia simplemente porque una gama tan amplia de teólogos y líderes evangélicos altamente respetados se adhieren a ella. Ciertamente, la gran mayoría de calvinistas son cristianos ordinarios. ¿Sobre qué base, entonces, sin la habilidad que aparentemente a mí me hacía falta, fueron capaces de aceptarlo?

Para familiarizarse a sí mismo con el Calvinismo, ciertamente hay recursos más que suficientes disponibles para cualquiera que esté genuinamente interesado en consultarlos. Numerosos libros acerca del tema están disponibles, tanto a favor como en contra. Los Cinco Puntos del Calvinismo, por Edwin H. Palmer, junto con libros de R.C. Sproul, John Piper, John McArthur, A.W. Pink, C.H. Spurgeon y otros, son muy recomendados por líderes calvinistas. En el otro lado, los libros de Samuel Fisk son informativos. El libro de Laurence M. Vance, La Otra Cara del Calvinismo, es un tratado exhaustivo de más de 700 páginas con cientos de notas al pie documentando sus citas. Los Institutos de la Religión Cristiana de Calvino así como otros de sus escritos y los de Agustín, John Knox y otros clásicos también están fácilmente disponibles.

Asegurándome de ser preciso e imparcial

Para asegurarme que ninguna interpretación errónea de las doctrinas bajo consideración sobreviviera en este libro, un manuscrito preliminar fue presentado a un número de amigos calvinistas y conocidos para que lo criticaran. Leer y discutir con ellos sus valiosos comentarios, por los que estoy profundamente agradecido, ha sido educativo. En ese proceso, se hizo más claro que nunca que los calvinistas ni siquiera entre ellos mismos concuerdan en todo.

La mayoría de los calvinistas coinciden en cinco puntos principales. Otros insisten que hay diez o aun más puntos relevantes. Palmer sugiere, “El Calvinismo no está restringido a cinco puntos: tiene miles de puntos”. ¡No es probable que podamos cubrir todos esos presuntos puntos en estas páginas! El mismo Palmer aborda sólo cinco.

Existen desacuerdos entre calvinistas de “cinco puntos” y de “cuatro puntos”. Por ejemplo, Lewis Sperry Chafer, fundador del Seminario Teológico de Dallas, se llamaba a sí mismo un calvinista de “cuatro puntos”, ya que rechazaba la expiación limitada. Vance señala que “muchos bautistas en la Asociación General de Iglesias Bautistas Regulares son calvinistas de cuatro puntos”. Negar un punto mientras se acepta los otros cuatro, sin embargo, ha sido llamado por los calvinistas de cinco puntos “la bendita inconsistencia”.

Es ampliamente reconocido que uno “debe sostener todos los cincos puntos del Calvinismo” porque “Los Cinco Puntos del Calvinismo están unidos. El que acepta uno de los puntos, aceptará los otros puntos”. Incluso aquellos que concuerdan en todos los cinco, sin embargo, tienen diferentes formas de entenderlos y defenderlos. Obviamente, no podemos cubrir todas las variedades de opiniones en este libro, sino que debemos atenernos a lo que la mayoría acepta como una presentación justa de sus creencias.

En el mayor interés de la precisión, citamos extensivamente no sólo al mismo Calvino, sino a otros escritos que son muy apreciados por sus colegas. Un libro del cual citamos extensivamente es La Libertad del Alfarero del apologista James R. White, el cual es respaldado por un número de líderes evangélicos de hoy, incluyendo a R.C. Sproul Jr., Jay Adams, Irwin Lutzer y muchos otros. Es un recurso especialmente valioso debido a que escrito específicamente para responder a las objeciones de Norman Geisler a ciertos puntos del Calvinismo, las cuales elevó en su libro reciente, Escogido Pero Libre. Debería haber citas más que suficientes de fuentes autorizadas para que el lector esté absolutamente seguro que el Calvinismo está siendo presentado justamente.

Un Llamado a la discusión abierta

La presciencia de Dios, la predestinación/elección, la elección humana, la soberanía de Dios y la responsabilidad del hombre son ampliamente alegados ser misterios más allá de nuestra habilidad para reconciliarlos. Por tanto, algunos insisten que estos conceptos deberían ser aceptados sin ningún intento de entender o reconciliar conflictos aparentes. Se usa de forma repetida la ilustración de que a medida que nos acercamos a la puerta del Cielo vemos escrito sobre ella, “Todo aquel que quiera venir”, pero que una vez que hemos entrado vemos desde adentro las palabras, “Escogidos en Él desde antes de la fundación del mundo”. Respetamos a los muchos líderes de iglesias que continúan ofreciendo tal explicación como si ella fuera suficiente. Existen, sin embargo, muchas razones convincentes para no consentir con esa popular posición.

En primer lugar, Dios quiere que nosotros entendamos Su Palabra en lugar de alegar “misterio” sobre largas porciones de ella. Él nos la ha dado para nuestro aprendizaje. De la Palabra de Dios, el salmista dijo, “Lámpara es a mis pies y lumbrera a mi camino” (Salmo 119:105) y eso desea ser para cada uno de nosotros hoy. Pedro reconoció que hay “cosas difíciles de entender” y advirtió que la Escritura a veces es torcida, ocasionando la destrucción de aquellos que lo hacen (2 Pedro 3:16). Dios nunca sugiere que haya alguna parte de Su Palabra que no debamos intentar comprender plenamente. Si consideramos que muchos pasajes en la Escritura están dedicados a los temas difíciles que abordaremos, podemos esperar con confianza que la Biblia misma aclarará los problemas.

En segundo lugar, la historia de la Iglesia desde sus comienzos tempranos ha involucrado agudas diferencias de opiniones en muchos temas vitales, incluyendo el Evangelio mismo. Numerosas herejías destructoras se han desarrollado y han sido opuestas vigorosamente. Ni Cristo ni Sus apóstoles consideraron que puntos de vista divergentes fueran normales o aceptables, sino que ordenó a los creyentes a “contender ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos” (Judas 3). Esa orden aplica a nosotros hoy.

En tercer lugar, no parece que nuestro Señor nos quisiera hacer retroceder para no considerar y no comprender seriamente la presciencia y la elección/predestinación así como la responsabilidad del hombre y cómo todo encaja perfectamente en la gracia soberana de Dios. Mientras que es posible que nunca veamos al Cuerpo de Cristo en perfecto acuerdo, cada uno de nosotros es responsable de entender estos asuntos tan claramente como podamos por medio del estudio diligente, y de ayudarnos unos a otros en el proceso.

Finalmente, Dios nos llama a buscarle con el fin de que podamos conocerle, aunque Sus caminos y Sus pensamientos están tan por encima de los nuestros como “como son más altos los cielos que la tierra” (Isaías 55:8-9). Ciertamente que a medida que lleguemos a conocer a Dios, mejor entenderemos Su Palabra y Su voluntad más plenamente. Dios es nuestro Salvador y conocerle es la vida eterna (Juan 17:3). Conocer a Dios debe incluir un profundo entendimiento de todo lo que Él nos ha revelado en Su Palabra.

Debemos vivir, como Cristo dijo (citando Su propia declaración como el YO SOY a Israel por medio de Moisés en Deuteronomio 8:3), no “sólo de pan, sino de toda Palabra que sale de la boca de Dios” (Mateo 4:4). Salomón dijo, Toda palabra de Dios es limpia” (Proverbios 30:5) - [énfasis añadido]. Entonces debemos considerar y buscar comprender cuidadosamente toda palabra.

La Razón más Imperiosa

Es una suposición general que cualquier otro desacuerdo que podamos tener, cuando se trata del Evangelio de nuestra salvación, tanto los calvinistas como los no calvinistas están totalmente de acuerdo. Sin embargo, muchos calvinistas discrepan, afirmando que el Evangelio bíblico es el Calvinismo. Por ejemplo: “El plan de salvación de Dios revelado en las Escrituras consiste de que lo que popularmente es conocido como los Cinco Puntos del Calvinismo”. Loraine Boettner declara, “La gran ventaja de la Fe Reformada es que en el marco de los Cinco Puntos del Calvinismo ésta establece claramente lo que la Biblia enseña con respecto al camino de la salvación”. Otros insisten que “si usted no conoce los Cinco Puntos del Calvinismo, usted no conoce el Evangelio, sino alguna perversión de él…”. B.B. Warfield afirmó, “El Calvinismo es evangelicalismo en su expresión más pura y estable”.

¡Tales afirmaciones de que los Cinco Puntos del Calvinismo conforman el Evangelio suscitan las preocupaciones acerca del Calvinismo a un nuevo nivel! Si se requiere tanto estudio especial para entender el Calvinismo y si años de estudio bíblico aún lo dejan a uno ignorante acerca de este tema, y si el Calvinismo es el Evangelio de nuestra salvación, ¿entonces dónde deja eso a las multitudes que piensan que son salvos pero que son ignorantes del Calvinismo? Esta pregunta puede parecer divisiva, pero no puede ser ignorada.

Otra grave preocupación surge con respecto a la proclamación del Evangelio como Cristo ordenó. Los calvinistas insisten que su doctrina no disminuye el celo con el que el Evangelio debe ser predicado. Para apoyar esta afirmación, nombran a algunos de los grandes predicadores y misioneros que fueron acérrimos calvinistas, tales como George Whitefield, Adoniram Judson, William Carey y otros. Y es cierto que, aunque saben que muchos a los cuales les predican no están entre los elegidos, algunos calvinistas en efecto predican ardientemente para que los elegidos puedan escuchar y creer.

Indudablemente, sin embargo, el celo de tales hombres y mujeres en llevar el Evangelio al mundo no podía ser debido a su Calvinismo sino sólo a pesar de él. Creer que aquellos que serán salvos han sido fijados por el decreto de Dios, que ningún otro puede ser salvo y que los elegidos deben ser regenerados por el acto soberano de Dios sin el Evangelio o cualquier persuasión de algún predicador o por alguna fe en Dios de su parte, difícilmente podría proveer motivación para predicar ardientemente el Evangelio. No importa cuánto el calvinista intente argumentar lo contrario, tal creencia sólo puede reducir el celo que una persona de otra manera podría tener para alcanzar a los perdidos con el Evangelio de la gracia de Dios en Cristo.

Enfrentando un Verdadero Dilema

El Evangelio que Pedro y Pablo y los otros apóstoles predicaron era para todos en las audiencias que enfrentaron, a dondequiera que fueron: no fue un mensaje que sólo los elegidos podían creer. Pedro le dijo a Cornelio y su familia y amigos, “Y nos mandó [Cristo] que predicásemos al pueblo [no a un grupo selecto],…que…todos los que en él creyeren [de entre la gente a la cual Él predicó], recibirán perdón de pecados por su nombre” (Hechos 10:42-43).

En contraste, el evangelio de Calvino dice que Cristo murió y que Su sangre hace expiación sólo por los elegidos. ¿Puede ser éste el mismo Evangelio que Pablo predicó? Pablo le proclamó a las audiencias, Nosotros les anunciamos a ustedes [todos ustedes] las buenas nuevas” (Hechos 13:32). Las “buenas nuevas” del Evangelio que Pablo predicó hicieron eco de que lo que el ángel del Señor les había dicho a los pastores al momento del nacimiento de Cristo: “he aquí os doy nuevas de gran gozo, que será para todo el pueblo…” (Lucas 2:10). Estas noticias de gran gozo se referían al hecho de que “el Salvador del mundo” (Lucas 2:11; Juan 4:42) había nacido. El evangelio de Calvino, sin embargo, dice que Cristo no es el Salvador del mundo, sino sólo de los elegidos.

Pablo pudo y honestamente dijo a todos los que conoció, “Cristo muró por ti”. En total contraste, un libro que durante mucho tiempo hemos recomendado a los lectores declara, “Como un cristiano reformado, el escritor [el autor] cree que los consejeros no deben decir a cualquier paciente no salvo que Cristo murió por él, ya que ellos no pueden decir eso. Ningún hombre sabe, excepto Cristo mismo quiénes son Sus elegidos por los que Él murió” (énfasis añadido). Obviamente, el mensaje de salvación de Calvino para unos cuantos selectos no trae “gran gozo” a “todo el pueblo”.

Palmer escribe, “Pero gracias a Dios que la muerte de Cristo fue una garantía absoluta que cada uno de los elegidos será salvo”. ¡Así que hay un gran gozo sólo para los elegidos! ¡En cuanto al resto, el evangelio de Calvino de que Dios ya ha predestinado su condenación difícilmente podría ser “noticias de gran gozo”! Ésta es la forma en la que Calvino lo expresó:

Para muchos esto parece un tema complicado, porque consideran muy incongruente que del gran cuerpo de la humanidad algunos deban ser predestinados a la salvación, y otros a la destrucción… De aquí concluimos que todos aquellos que no se reconocen parte del pueblo peculiar de Dios son desgraciados [¡no llenos de gozo!], pues siempre están en un continuo temor.

¿Qué evangelio es éste? Debido a la importancia eterna de esa pregunta para el mundo entero al cual Cristo nos ordenó llevar el Evangelio, estamos obligados a examinar estrechamente el Calvinismo a la luz de la Escritura. ¿Podría realmente ser cierto, como insiste Arthur C. Custance, que “el Calvinismo es el Evangelio y enseñar el Calvinismo de hecho es predicar el Evangelio”?

¿Está el Calvinismo fundamentado en el texto claro de la Escritura? ¿O requiere interpretar palabras y frases comunes como todos, todos los hombres, mundo, todo el que tenga sed, todo hombre, y todo aquel que para que signifiquen “los elegidos”? ¿Se requiere una interpretación peculiar de la Escritura para apoyar esta doctrina?

Nuestra preocupación es por la defensa del carácter del Dios verdadero, el Dios de misericordia y amor cuyas “misericordias son sobre todas sus obras” (Salmo 145:9). La Biblia declara que Él “no quiere que nadie perezca sino que todos se arrepientan” (2 Pedro 3:9); “el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad” (1 Timoteo 2:4).Ése es el Dios de la Biblia, desde Génesis hasta Apocalipsis.

El examen y la discusión abiertos de temas importantes, especialmente del Evangelio y la naturaleza misma del carácter de Dios, sólo pueden ser saludables para el Cuerpo de Cristo. Es mi oración que mi investigación y su comparación con la Santa Palabra de Dios, expresada en las siguientes páginas, traerá una provechosa y necesaria clarificación.

Artículos recomendados:
Una Poderosa Refutación del Calvinismo por Dave Hunt
El Debate acerca del Calvinismo
Otros

Traducido por Donald Dolmus
En Defensa de la Fe

Dave Hunt's book, "What Love is This?", can be obtained in here:

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Poderosa Refutación del Calvinismo por Dave Hunt - II Parte


Dave Hunt, de The Berean Call Ministries, ha escrito una poderosa refutación del Calvinismo titulada “¿Qué Amor es Éste? (“What love is this?”) y subtitulado (“Calvinismo: Una Falsa Representación de Dios”).

Hunt aborda este tema controversial de una forma cortés pero también firme en la verdad.

Él ha investigado diligentemente este tópico y ha hecho un gran esfuerzo en ser justo con los calvinistas y en representarlos con precisión.

Los títulos de los capítulos son los siguientes:

¿Está el entendimiento bíblico reservado a una élite?
Juan Calvino y sus Institutos
La sorpresiva conexión católica del Calvinismo
“Cristianismo” irresistiblemente impuesto
Arminio, Dort, Westminter y Cinco Puntos
Depravación Total
El tema solemne: El carácter de Dios
Una soberanía distorsionada
La presciencia y el libre albedrío del hombre
Erasmo y Lutero en debate
El cautiverio de la voluntad
Elección Incondicional
¿Está la salvación disponible para todos?
Presciencia y Predestinación/Elección
Expiación Limitada
Comprendiendo Escrituras esenciales
Gracia Irresistible
Gracia y Responsabilidad Humana
Persuasión, el Evangelio y Dios
Perseverancia de los Santos
Descansando en el Amor de Dios

Algunas citas del libro

“La mayoría de los que hoy en día, incluyendo a líderes evangélicos, tienen a Calvino en gran estima, no son conscientes de que han sido cautivados por los escritos de un devoto católico romano recién convertido al Protestantismo de Lutero tan sólo dos años antes (en la primera parte de 1533). Curiosamente, a pesar de su suma importancia y de sus voluminosos escritos, no tenemos un claro testimonio en las propias palabras de Calvino acerca de su salvación. Él se refiere sólo a ‘una conversión repentina’ que sometió su ‘muy endurecido corazón’, pero no da ninguna descripción de cómo o qué pasó. …Desde cualquier punto de vista, este joven, aunque inusualmente brillante, estaba muy lejos de madurar en la fe cristiana. …Sin lugar a dudas, sus Institutos no pudieron haber surgido de una comprensión evangélica profunda y completamente desarrollada de la Escritura. En cambio, surgieron del entusiasmo enérgico de un recién graduado en leyes y estudiante ferviente de filosofía y religión, un joven genio devoto a Agustín y a una causa recién adoptada. …Al momento de escribir sus Institutos, Calvino, lejos de ser como el apóstol Pablo, era un nuevo convertido a la fe que apenas había comenzado a caminar con el Señor. Por lo tanto, no podría haber sido la madurez espiritual bajo la guía del Espíritu Santo la que dio a luz los Institutos, sino el poder de la brillante mente legal de Calvino” (pp. 38, 39, 40).

“El casi completo acuerdo de Calvino con Agustín no es nada menos que asombroso. Calvino se llamó a sí mismo ‘un teólogo agustiniano’. De Agustín dijo, ‘a quien citamos con frecuencia, como siendo el mejor y más fiel testigo de toda la antigüedad’. Son los calvinistas mismos que insisten en la conexión entre Calvino y Agustín. Escribe McGrath, ‘Por encima de todo, Calvino consideraba su pensamiento como una fiel exposición de las ideas principales de Agustín de Hipona’. … ¿Cómo pudo uno de los principales líderes de la Reforma abrazar por completo las doctrinas de aquél que ha sido llamado ‘el primer católico romano verdadero’ y el ‘principal creador teológico del sistema latino-católico tan diferente al… Protestantismo evangélico…’?” (p. 51).

“El Calvinismo ofrece una definición especial de la depravación humana: que la depravación es igual a la incapacidad – y esta definición especial requiere tanto la Elección Incondicional como la Gracia Irresistible. …Sin embargo, no existe ningún versículo en la Biblia que presente la idea radical del Calvinismo que el pecador es incapaz de creer en el Evangelio que le ofrece el perdón y la salvación y sin embargo es condenado por Dios por no creer. …Decir que Dios manda a los hombres que hagan lo que no pueden hacer sin Su gracia, y que entonces les niega la gracia que necesitan y los castiga eternamente por no obedecer, es burlarse de la Palabra de Dios, de Su misericordia y amor, y es difamar Su carácter” (pp. 93, 94, 96).

“El calvinista insiste, sin embargo, que la salvación no puede estar condicionada a ningún acto o creencia por parte del hombre. …Esta declaración se hace en repetidas ocasiones: ‘Rechazar la elección [calvinista] es rechazar la salvación por gracia y promover la salvación por obras’. Sin embargo, si algo es evidente en la Escritura es el hecho indiscutible que la fe no es una obra, sino su antítesis misma. ‘Por gracia sois salvos, por medio de la fe… no por obras’ (Efesios 2:8-9). Nada podría estar más claro que el hecho que, al creer, uno no está haciendo ninguna obra. De hecho, la fe y las obras se ponen en contraste” (pp. 190, 191).

“A veces, Calvino mismo parecía ser ambivalente acerca de este tema. Hizo declaraciones tanto apoyando la expiación ilimitada y en otras ocasiones a favor de la expiación limitada. Refiriéndose a Isaías 52:12, dijo, ‘sobre Él fue puesta la culpabilidad del mundo entero’. En cuanto a Marcos 14:24, ‘Ésta es mi sangre del nuevo pacto, la cual es derramada por muchos’. Calvino dijo, ‘La palabra muchos no significa una parte del mundo, sino toda la raza humana’. Acerca de 1 Juan 2:2, Calvino declaró, ‘Cristo sufrió por los pecados del mundo entero y en la bondad de Dios es ofrecido a todos los hombres sin distinción, siendo derramada su sangre… por toda la raza humana’. …Calvino es citado como la autoridad cuando le conviene a los calvinistas de hoy y otras veces es ignorado. Sin embargo, esta doctrina confusa (expiación limitada) de la que sus partidarios no concuerdan entre ellos o incluso con Calvino aún es llamada ‘Calvinismo’ por todo el mundo” (pp. 262, 263).

“Cómo veremos cuando lleguemos a la Perseverancia de los Santos, un gran problema para los calvinistas es la manera de estar seguro de que uno está en ese solo grupo selecto por el que Cristo supuestamente murió. Vemos esta incertidumbre en el propio Calvino. En su testamento, redactado poco antes de su muerte, Calvino escribió, ‘Con humildad busco de Dios… ser lavado y purificado por la sangre del gran Redentor, derramada por los pecados de la raza humana…’ ¿Cómo es que el más grande de los exégetas parecía inseguro a pesar de la promesa de la Escritura de seguridad absoluta: ‘estas cosas las he escrito a ustedes que han creído en el nombre del Hijo de Dios; para que sepan que tienen la vida eterna…’ (1 Juan 5:13)? Esta seguridad no se produce por una revelación especial de que uno está entre los elegidos, sino por la simple fe en Cristo” (p.253).

“En lugar de un brillo natural, los argumentos de Calvino reflejan un prejuicio hacia el sacramentalismo que aprendió de Agustín siendo un católico romano, sobre quien elaboró y que a partir de entonces se vio obligado a defender. Su lógica a menudo traiciona a una inmadurez espiritual. De forma increíble, Calvino argumentó: ‘…Pero si el bautismo era de Dios [refiriéndose al bautismo infantil católico que recibió cuando era un niño], ciertamente incluía en él la promesa del perdón de pecados, la mortificación de la carne, la vivificación del Espíritu y la comunión con Cristo’. Estas declaraciones asombrosas reflejan un sacramentalismo que sostiene que el acto físico del bautismo tiene poder espiritual y que imparte regeneración. ¡Ser bautizado por sacerdotes católicos romanos, que ni siquiera eran cristianos, pero que se aferraban y promovían un falso Evangelio, era perfectamente aceptable para Calvino porque utilizaban el nombre de Dios cuando lo administraban! (p. 341).

“Antes de comenzar lo que se convirtió en un estudio urgente y profundo del Calvinismo, había pensado que yo era al menos un calvinista de un punto. Sin duda, mi creencia en la seguridad eterna, la seguridad de la salvación eterna en la presencia de Dios, debe ser la misma que la Perseverancia de los Santos del Calvinismo. Sin embargo, eso no resultó ser el caso. ¿Por qué? La seguridad bíblica de la salvación no depende de la propia actuación de uno, sino de la declaración del Evangelio de que Cristo murió por los pecados del mundo y de Su promesa de que todo aquel que crea en Él recibe el regalo de la vida eterna. Por el contrario, la seguridad calvinista está en que Dios lo haya predestinado a la vida eterna como uno de los elegidos – y su actuación juega un papel importante en ayudarle a saber si está o no en ese grupo selecto” (p. 377).

“Las dudas asaltan incluso a líderes calvinistas. Zane C. Hodges señala que ‘el resultado de esta teología es desastroso. Dado que, según la creencia puritana, la autenticidad de la fe de un hombre sólo puede determinarse por la vida que le sigue, la seguridad de la salvación se hace imposible en el momento de la conversión’. Y, se podría añadir, en cualquier momento posterior también, por razones que mostraremos. …No es de extrañar, entonces, como R.T. Kendall ha comentado, que ‘casi todos los ´divinos´ puritanos atravesaron grandes dudas y desesperación en sus lechos de muerte, mientras se daban cuenta que sus vidas no daban evidencia perfecta de que habían sido elegidos’. Arminio, por otro lado, contrario a la falsa etiqueta puesta sobre él por sus enemigos, tuvo perfecta seguridad y dijo que el creyente puede ‘partir de esta vida… para aparecer ante el trono de gracia, sin ningún temor ansioso…’…Congdon escribe, ‘La seguridad absoluta de la salvación es imposible en el Calvinismo clásico. …Dado que las obras son un resultado inevitable de la salvación “verdadera”, uno sólo puede saber si es salvo por la presencia de buenas obras. Pero dado que nadie es perfecto… cualquier seguridad es imperfecta también. Por tanto, usted podría pensar que creyó en Jesucristo, podría pensar que tenía fe salvadora, pero estar lamentablemente equivocado… y, debido a que no es salvo, estar totalmente ciego al hecho de que usted no es salvo…’” (p. 378).

Artículos recomendados:
Poderosa refutación del Calvinismo por Dave Hunt – Parte 1
El Debate acerca del Calvinismo

Traducido por Donald Dolmus
En Defensa de la Fe (endefensadelafe.org)

Source:
Way of Life Literature

Dave Hunt’s book “What love is this?” can be obtained here:

martes, 8 de noviembre de 2011

Ironside acerca del Calvinismo


“Vaya a su Biblia y lea por sí mismo en los únicos dos capítulos en los que esta palabra predestinar o predestinado se encuentra. El primero es Romanos 8:29-30, el otro capítulo es Efesios 1:5 y 11. Notará que no existe ninguna referencia en estos cuatro versículos al cielo o al infierno sino a la semejanza a Cristo eventualmente. En ninguna parte se nos dice en la Escritura que Dios predestinó a un hombre para ser salvo y a otro para perderse. Los hombres se salvan o se pierden eternamente debido a su actitud hacia el Señor Jesucristo. La predestinación significa que algún día todos los redimidos serán como el Señor Jesús”.

“D.L. Moody solía ponerlo muy simple: Los elegidos son los “todo aquel que crea”, los no elegidos son los “todo aquel que no crea”. Esto es exactamente lo que la Escritura enseña, la invitación es para todos, aquellos que la aceptan son los elegidos. Recuerde, nunca se nos dice que Cristo murió por los elegidos”.

“'Todo aquel' significa todo aquel. Sólo un teólogo prejuiciado, con un interés personal, podría pensar que esto significa sólo los elegidos”.

>> Lea más acerca del Calvinismo

Traducido por Donald Dolmus
En Defensa de la Fe (endefensadelafe.org)

Original article:
H.A. Ironside on Calvinism

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Poderosa Refutación del Calvinismo por Dave Hunt - I Parte


Dave Hunt, de The Berean Call Ministries, ha escrito una poderosa refutación del Calvinismo titulada “¿Qué Amor es Éste? (“What love is this?”) y subtitulado (“Calvinismo: Una Falsa Representación de Dios”).
Hunt aborda este tema controversial de una forma cortés pero también firme en la verdad.
Él ha investigado diligentemente este tópico y ha hecho un gran esfuerzo en ser justo con los calvinistas y en representarlos con precisión.
Los títulos de los capítulos son los siguientes:
¿Está el entendimiento bíblico reservado a una élite?
Juan Calvino y sus Institutos
La sorpresiva conexión católica del Calvinismo
“Cristianismo” irresistiblemente impuesto
Arminio, Dort, Westminter y Cinco Puntos
Depravación Total
El tema solemne: El carácter de Dios
Una soberanía distorsionada
La presciencia y el libre albedrío del hombre
Erasmo y Lutero en debate
El cautiverio de la voluntad
Elección Incondicional
¿Está la salvación disponible para todos?
Presciencia y Predestinación/Elección
Expiación Limitada
Comprendiendo Escrituras esenciales
Gracia Irresistible
Gracia y Responsabilidad Humana
Persuasión, el Evangelio y Dios
Perseverancia de los Santos
Descansando en el Amor de Dios

Algunas citas del libro
 “¿Por qué Dios desperdicia Su tiempo y esfuerzo y el tiempo y el esfuerzo de Sus muchos profetas suplicando a aquellos que, supuestamente, no pueden oírlo y que, aun si pudieran, siendo totalmente depravados, nunca responderían a Su petición al creerle y obedecerle? ¿Por qué crear esta elaborada ficción de luto y llanto por multitudes que Dios sabe que no sólo rechazarán arrepentirse sino que, a menos que Él los regenere, no pueden arrepentirse debido a su incapacidad total para hacerlo?” (p. 107)
 “Tome una comprensión humana de ‘muerto’, mézclela con la comprensión inmadura de la Palabra de Dios por parte del joven Juan Calvino, contaminada con filosofía agustiniana, agítelo todo y obtendrá la teoría de la Depravación Total” (p. 119).

“Sí, el hombre es totalmente incapaz de contribuir ni un ápice a su salvación. Sin embargo, no se puede deducir entonces que no puede recibir por tanto la salvación ofrecida gratuitamente en Cristo” (p. 121).
“Está claro que el Calvinismo descansa sobre una opinión errada de lo que significa para Dios ser soberano. …El problema básico del calvinista es el fracaso en ver que Dios pudo soberanamente dar al hombre la potestad de la elección genuina… Darle al hombre la potestad de hacer una elección genuina e independiente no disminuye el control de Dios sobre Su universo. Siendo omnipotente y omnisciente, Dios puede arreglar las circunstancias de modo que impida que la rebelión del hombre frustre Sus propósitos. De hecho, Dios puede e incluso usa el libre albedrío del hombre para ayudarle a cumplir Sus propios planes y así ser glorificado aun más” (pp. 128,129).

“Sugerir que a Dios le faltaría ‘potestad’ (y así Su soberanía sería negada) si El hiciera una oferta genuina de salvación y algunos la rechazaran, es enmarcar erróneamente la proposición. La potestad no tiene ninguna relación con la gracia y el amor, que proveen la salvación. De hecho, como veremos, hay muchas cosas que Dios no puede hacer, y una falta de ‘potestad’ no es la razón para alguna de ellas, ni tampoco Su soberanía es mitigada en lo más mínimo” (p. 136).

“¡No se puede escapar del hecho de que en todos los Institutos de la Religión Cristiana de Calvino no hay ninguna mención del amor de Dios por los perdidos!” (p. 151).
“Así que una vez más, en lugar de ver a los hombres, sin importar cuán grande sea su reputación, somos conducidos a llegar a nuestras propias conclusiones sobre la base de la Escritura sola” (p. 162).
“Por supuesto que la salvación no es obra nuestra; pero que no podamos ganar la salvación no demuestra que no podemos escoger libremente recibir la salvación como un regalo del amor de Dios” (p. 182).
 “…en contraste con los literalmente cientos de lugares donde el amor de Dios está expresado claramente para todo Israel (la mayoría de los cuales lo rechazaron) y para el mundo entero (la mayoría de los cuales también lo rechazan), en ninguna parte la Biblia declara que Dios no ama y no desea la salvación de todos” (p. 206).

“La soberanía de Dios no sería socavada más si algunos aceptaran la oferta de salvación y otros la rechazaran que si billones de humanos desobedezcan continuamente los Diez Mandamientos” (p. 206).
“Además, ¿no sería una deformación de la peor clase ofrecer la salvación a todo aquel que quiera, cuando en realidad estaba destinada solamente para unos pocos elegidos? …afirmar que “todos” significa sólo un grupo selecto llamado los elegidos violenta el significado llano del lenguaje e impugna el carácter de Dios; y esto lo hace con el fin de forzar sobre la Palabra de Dios un sistema de religión que no puede derivarse de ella” (p. 208).

“Una de las tristes características de los Institutos de Calvino es el lenguaje degradante que emplea continuamente (muy parecido a Lutero) para difamar a todos aquellos que no están de acuerdo con él” (p. 233).
 “No hay manera en la que la muerte de Cristo pudiera limitarse a pagar sólo por los pecados de los escogidos. Para salvar incluso a una persona del castigo eterno, sin importar si hubiera cometido pocos o muchos pecados, Cristo tuvo que pagar la pena por el pecado exigida por Su justicia infinita. Por definición misma, entonces, la muerte de Cristo en la Cruz pagó la pena por el pecado mismo que cuelga sobre las cabezas de toda la raza humana” (p. 251).
“Trágicamente, la tergiversación de Dios por parte del Calvinismo ha causado que muchos se alejen del Dios de la Biblia como si lo hicieran de un monstruo” (p. 287).
“Ciertamente, así como Dios mismo no puede forzar a nadie a amarlo (una respuesta coaccionada es lo contrario al amor), así también sería todo lo contrario a la gracia forzar cualquier regalo o beneficio de ‘gracia’ sobre alguien que no quisiera recibirlo” (p. 291)
 “Dios cierta y poderosamente obra dentro del creyente y no podemos hacer nada sin la dirección y el poder del Espíritu Santo. Al mismo tiempo, sin embargo, debemos entregarnos gustosamente a la obra de Dios a través de nosotros. La mayoría de los calvinistas admiten este esfuerzo cooperativo cuando se trata de vivir la vida cristiana, pero insisten que no puede haber tal disposición en creer el Evangelio y aceptar a Cristo” (p. 298).

“Sin duda, la desobediencia continua de los incrédulos y de los creyentes demuestra que la gracia de Dios no es “irresistible”. Ni tampoco la desobediencia del hombre disminuye la soberanía de Dios en lo más mínimo. Obviamente, ¡la libertad de elección en sí misma es parte del plan de Dios!”
(p. 299).
 “Si Pablo no quería que ni un solo judío fuera al infierno y estaba en agonía constante del alma por su salvación, dispuesto incluso a ser maldecido por Dios si eso podría salvar a sus “parientes según la carne” (Rom. 9:1-3), ¿sería Dios, quien seguramente puso este amor desinteresado en el corazón de Pablo, menos amoroso y estaría menos preocupado por la humanidad perdida en camino al infierno? ¡Ciertamente no el Dios de la Biblia! …¿Pudo haber estado equivocado Pablo en su continua agonía por las ovejas perdidas de la casa de Israel (y de hecho todos los hombres) y Calvino en lo correcto en su falta de preocupación por los perdidos?” (pp. 301, 302).
“…mi firme desacuerdo con el Calvinismo no es acerca de la soberanía de Dios, la cual abrazo completamente y a la cual me someto. La cuestión es si Dios ama a todos sin acepción y si desea que todos sean salvos. Indiscutiblemente, el Calvinismo niega tal amor; pero la Biblia, en el lenguaje más claro declara repetidamente el amor de Dios hacia todos y Su deseo de que todos sean salvos y que ninguno perezca” (pp. 301, 302).
 “Consideramos que el acrónimo TULIP es un libelo contra nuestro amante y misericordioso Dios tal como se revela a Sí mismo tanto en Su Palabra como en la conciencia humana” (p. 304).
“El hecho mismo que Pablo, Apolos y los otros evangelistas primitivos hayan empleado tanto tiempo y energía en persuadir a los hombres para que creyeran el Evangelio es completamente contrario a los conceptos de Depravación Total y Gracia Irresistible” (p. 324)
“…El calvinista audazmente ha cambiado la palabra ‘mundo’ para que signifique ‘elegidos’ en no menos de veinte escrituras. Ha cambiado ‘todo aquel’ y ‘todos’ a ‘elegidos’ al menos dieciséis veces cada uno. Además, la frase ‘todo hombre’ ha sido cambiada a ‘elegidos’ seis veces y ‘cada uno’ a ‘elegidos’ tres veces. En todos los casos en donde estos cambios han sido hechos, no hay nada en el texto que justifique a ‘elegidos’ como el significado de la palabra por la cual debe ser sustituido. El cambio ha sido hecho por una sola razón: ¡para dar cabida al Calvinismo! (p. 332).
 “Naturalmente nadie busca al Señor; todos nosotros buscamos nuestros propios deseos egoístas y nadie puede venir a Cristo a menos que el Padre lo atraiga. Pero el Espíritu Santo está en el mundo para convencer a todos de su pecado y necesidad (Juan 16:8-11), el Evangelio está siendo predicado, el Padre está atrayendo a todo el mundo (incluso a través del testimonio de la creación y la conciencia)” (p. 339).
 “¿Por qué la gracia irresistible de Dios, que es tan poderosa hacia los pecadores, no crea vidas perfectamente obedientes después que los pecadores han sido salvados?” (p. 354)
“¿Quién diría que el hombre puede llegar a Dios ‘sin la ayuda’ del Espíritu Santo? ¡Ni siquiera el arminiano más flagrante! Pero el Calvinismo hace esa falsa acusación contra aquellos que no están de acuerdo con su extremismo” (p. 369).
 “Además, es absurdo sugerir que recibir un regalo significa que lo merecemos. …Un hombre que se está ahogando que se rinde en las manos de su rescatador no tiene nada de qué jactarse, ni tampoco ha hecho ninguna obra para ayudar en su rescate. De igual forma es con el pecador perdido” (p. 370).

Traducido por Donald Dolmus
En Defensa de la Fe (endefensadelafe.org)

Source:

Dave Hunt’s book WHAT LOVE IS THIS? can be obtained from the following source:

Conference: What love is this? - Dave Hunt




















Does the Bible present a gospel which can only be understood by a select group of theologians? This power-packed presentation captures the essence of Dave Hunt's book of the same title and provides a succinct historical overview for a careful analysis of the issues involved. The system resulting from Augustine's role in the theology of Luther and Calvin may be seen as nothing other than a doctrinal superimposition upon the Scriptures and a misrepresentation of God, Who is love.

sábado, 1 de octubre de 2011

Israel y la Prueba Profética - I Parte



"Y traeré del cautiverio a mi pueblo Israel, y edificarán ellos las ciudades asoladas, y las habitarán; plantarán viñas, y beberán el vino de ellas, y harán huertos, y comerán el fruto de ellos. Pues los plantaré sobre su tierra, y nunca más serán arrancados de su tierra que yo les di, ha dicho Jehová Dios tuyo" (Amós 9:14-15).

Hace aproximadamente 250 años, el Rey de Suecia tenía ciertas dudas acerca de que si la Biblia era verídica en cada palabra. Él le pidió al Conde Von Zinzendorf, el obispo de la Iglesia Morava, que le diera una prueba de que la Biblia era realmente inspirada por Dios. El Rey dedicó 10 horas para escuchar la respuesta. Para la sorpresa del Rey, Zinzendorf informó que el tiempo dedicado para la respuesta era demasiado. Él necesitó decir una sola palabra. Muy sorprendido el Rey preguntó cuál era tal palabra. El Conde respondió, "judíos".

Hoy en día uno podría añadir una palabra más, "Israel". En el tiempo en que Zinzendorf vivía, esa pequeña y asediada nación, nacida el 14 de mayo de 1948, no existía, excepto en los corazones de los que eran sionistas y que nunca habían descartado el cumplimiento de las solemnes promesas del "Dios de Israel". La existencia de Israel hoy en día, que está rodeada de más de un billón de musulmanes que han jurado exterminar a esa nación y quienes continuamente están planeando artimañas para atacarla y destruirla, es uno de los milagros más sorprendentes de los tiempos modernos.

El Dios de Abraham, Isaac y Jacob, ha bendecido al pueblo judío de tal manera que excede la bendición dada a sus primos, los árabes y al resto de los gentiles.

Los árabes poseen el petróleo, pero los judíos tienen la inteligencia. Antes que se me acuse de ser un racista, uno tiene solamente que comparar el número de ganadores de los Premios Nobel entre ambos grupos. En el grupo de los árabes-musulmanes que constan de 1.4 billones de habitantes han sido seis (6) los que han recibido el Premio Nobel: tres (3) ganaron el premio Nobel de la Paz, uno (1) por Química, uno (1) por Física y uno (1) por Literatura. En el grupo de los judíos cuya población es de 14 millones (una mínima porción comparada con el mundo árabe) los que han recibido el premio Nobel son 165: 51 por Medicina, 45 por Física, 27 por Química, 22 por Economía, 11 por Literatura y 9 por la Paz. ¡Esto es sorprendente!

Respaldando a estos datos y cifras concernientes a Israel, existen literalmente docenas de profecías bíblicas que predicen su súbito acenso como una de las naciones militares más poderosas del mundo, también predicen los continuos ataques de los vecinos musulmanes a esta nación y el terror que tienen los árabes a la nación de Israel. Sí, es cierto, los árabes le tienen terror a Israel. Israel los podría destruir muy rápidamente si quisiera. Pero en vez de hacer eso, pacientemente ha soportado la abierta hostilidad del mundo musulmán, su odio, sus insultos, sus repetidas amenazas de exterminación, sus persistentes ataques terroristas y sus continuos atentados de desarrollar una capacidad nuclear para poder destruirla.


La paciencia de Israel termina cuando la amenaza resulta ser muy peligrosa. Como fue el caso de Siria, también puede suceder con la nación de Irán, que espera algún día lanzar un ataque nuclear a Israel. Si esto sucediera entonces Irán se convertiría en el héroe del mundo Islámico. Si tal ataque fuera posible, entonces Israel se vería forzado a destruir las instalaciones nucleares de Irán antes que el ataque pudiera ocurrir, como lo hizo con Siria cuando esta nación estaba armándose con una capacidad nuclear.

Por varios meses, y observándolos por el satélite espacial, Israel había seguido los barcos que provenían de Corea del Norte y desembarcaban en Siria y también observaba cómo los camiones con sus cargas iban a una destinación "secreta" en el desierto. Israel pacientemente observó la construcción de un complejo nuclear camuflado como "una fábrica de cemento" y que en forma ridícula la habían rodeado con la más avanzada tecnología de cohetes rusos. La evidencia fue mostrada al Presidente George W. Bush, incluyendo fotos tomadas dentro del complejo y los cohetes y el radar que protegían la "fábrica de cemento."

Con la implícita aprobación del Presidente Bush, los aviones de guerra de Israel bombardearon y destruyeron el complejo nuclear al igual que todos los cohetes, radar y protección alrededor de tal centro nuclear. ¿Cómo fue posible que los aviones israelitas pudieran penetrar las defensas rusas que protegían tal centro nuclear? Ellos no están compartiendo ese secreto con nadie, especialmente con ciertas personas en el gobierno americano.

Estos eventos que están ocurriendo en nuestros días, así como muchos otros, han sido profetizados en la Biblia, y a pesar de su exactitud los críticos descartan su importancia. Algunos de estos críticos dicen haber sido cristianos. Uno se pone a pensar ¿qué clase de "cristianos" son estos que eligen ignorar lo que la Biblia ha profetizado, mientras al mismo tiempo supuestamente dicen saber el contenido de la Escrituras?

Mencionemos por ejemplo este individuo llamado Gary Lenaire quien dice que "estuvo 15 años en la iglesia... produjo nueve álbumes de música contemporánea cristiana... fue nominado para recibir seis premios de música evangélica... ha predicado el evangelio por todo el mundo y ha servido como capellán voluntario en la Fuerzas Armadas". Él escribe lo siguiente en lo que él llama: 'Un Manifiesto Infiel':

"La profecía bíblica es tal vez la herramienta más poderosa usada para la ilusión religiosa... Observen las llamadas profecías en las Escrituras; la forma en que están escritas es tan general que uno prácticamente puede citar cualquier evento y decir 'ésta es una profecía que se ha cumplido'. Por eso es que existen miles de personas hoy en día diciendo que están siendo testigos del cumplimiento de las profecías en nuestra generación... Muchas de las llamadas profecías nunca fueron hechas con la intención de ser proféticas... las palabras son escritas en términos tan generales que uno puede darles cualquier significado que uno desee. Lea usted nuevamente estas supuestas profecías sin la influencia dogmática de su pastor".

Esto que estamos mencionando es tan ridículo que es vergonzoso. Lo único que manifiesta este supuesto "experto en profecía bíblica" es su prejuicio y una ignorancia inexcusable. Cuando él menciona "las supuestas profecías" nosotros sabemos que mientras existen profecías que son difíciles de entender, indudablemente existen cientos de profecías que claramente han sido cumplidas al pie de la letra y algunas que todavía están en el proceso de ser cumplidas.

"¿Escritas en términos tan generales que uno puede darles cualquier significado...?" En realidad los comentarios de Gary Lenaire serían tan risibles si no fuera porque han influenciado a tanta gente para que se alejen de Dios.

Podemos mencionar una de las tantas profecías (aproximadamente 600 A.C.) cuya especificidad no podría ser negada: "No obstante, he aquí vienen días, dice Jehová, en que no se dirá más: vive Jehová, que hizo subir a los hijos de Israel de tierra de Egipto; sino: Vive Jehová, que hizo subir a los hijos de Israel de la tierra del norte, y de todas las tierras adonde los había arrojado" (Jeremías 16:14-15).

Tomen en cuenta los detallados elementos proféticos. La liberación de "la tierra de Egipto" que se habla en el libro de Éxodo, era lo que los judíos siempre recordaban cada año durante la fiesta de la Pascua como un recordatorio del amor y del poder de Dios, y ese evento desaparecería de sus mentes para ser reemplazado por otro evento más reciente. La profecía tiene dos partes distintas: 1) La confirmación de muchas otras profecías que decían que los judíos iban a ser llevados al cautiverio a "cada nación" (Lucas 21:24), y 2) Su futura liberación y retorno a Israel eclipsaría la liberación de Egipto. Y eso es exactamente lo que ha ocurrido.

La gran prueba que la Biblia repetidamente ofrece de su veracidad es el hecho que Dios, a través de Sus profetas, nos dice lo que va a ocurrir siglos y a veces miles de años en el futuro. No existe ninguna duda del preciso detalle y exactitud de cualquiera de cientos de profecías bíblicas. Pero aún así, Lenaire, en una forma ateísta típica, declara que la mayoría de las profecías están escritas en forma tan general que uno podría darles cualquier significado. ¡No es así!

Lenaire deliberadamente quiere engañar a sus lectores o está manifestando una ignorancia inaudita. La mayoría de las profecías son, en realidad, tan específicas que nadie podría discutir su significado.

En el libro de Joel 3:2 (aprox. 800 A.C.), Dios declaró que el día se avecina cuando todas las naciones se unirán para dividir la tierra de Israel: "Reuniré a todas las naciones, y las haré descender al valle de Josafat, y allí entraré en juicio con ellas a causa de mi pueblo, y de Israel mi heredad, a quien ellas esparcieron entre las naciones, y repartieron mi tierra".

¡Esto es asombroso! A través de su entera historia de 3,000 años, la tierra de Israel nunca ha sido dividida. Ha sido conquistada por varias naciones, pero aun los turcos que la tuvieron por 400 años como parte del Imperio Otomano, no llegaron a dividir la tierra. Un conquistador mantiene la tierra que ha conquistado intacta para él mismo. ¿Por qué habría de dividirla?

Esta división de Israel ha ocurrido solamente en nuestros días. Inglaterra que había sido puesta a cargo de "Palestina" por las fuerzas aliadas que habían sido victoriosas en la Primera Guerra Mundial y que le dieron el mandato por intermedio de La Liga de las Naciones para que esta tierra se quedase como refugio para los judíos, quienes habían sido dispersados por todo el mundo.

En vez de cumplir con este mandato, Inglaterra dio el 75% de la tierra a los árabes a cambio de petróleo. En 1947, las Naciones Unidas, a través de la Resolución 181 y en cumplimiento de Joel 3:2, formalizó este infringir, esta violación del mandato. Israel finalmente recibió un mero 13% de lo que se le había prometido. Eso ahora es historia. Inglaterra y las Naciones Unidas en una forma infame cumplieron con la profecía de Joel 3:2 y dividieron la tierra de Dios.


El Dios de Israel, sabiendo que esto iba a ocurrir, había advertido por anticipado que Él se iba a vengar por este descarado robo de Su gente y de Su tierra. Después de haber sido atacado por las naciones musulmanas, quienes estaban siguiendo el edicto de Mahoma que todos los judíos deben ser destruidos, Israel, en defensa propia recobró parte de esta tierra.

Cristo mismo hizo un número de profecías antes de Su crucifixión, resurrección y ascensión. Como tantos otros profetas hebreos, Cristo profetizó la dispersión de los judíos por toda la tierra y el advenimiento de la Gran Tribulación (Lucas 21:24-26). También en Lucas 21:24, existe una extraordinaria y específica profecía concerniente al mismo Jerusalén: Jesús declaró: "Los gentiles pisotearán a Jerusalén, hasta que se cumplan los tiempos señalados para ellos".

¿Cuándo comenzó este pisoteo de Jerusalén por los gentiles? En realidad, ha estado ocurriendo por siglos, empezando por la destrucción de Jerusalén por Nabucodonosor (2 Reyes 24:10-11), aproximadamente en 587-586 a.C. Esta profecía nos dice lo que Cristo llamó "el tiempo de los gentiles". Como ha ocurrido tan a menudo, la existencia de las Naciones Unidas ha ejercido un papel significativo. Como cumplimiento parcial de la profecía de Cristo, una parte vital de la Resolución 181 fue la declaración que Jerusalén sería una entidad separada (corpus separatum), nunca sería parte de Israel y nunca estaría bajo el control de los judíos.

Consideremos qué tan específico es lo que dice el profeta Zacarías:

"He aquí yo pongo a Jerusalén por copa que hará temblar a todos los pueblos de alrededor contra Judá, en el sitio contra Jerusalén. Y en aquel día yo pondré a Jerusalén por piedra pesada a todos los pueblos; todos los que se la cargaren serán despedazados, bien que todas las naciones de la tierra se juntarán contra ella" (Zacarías 12:2-3).

El profeta hace distinción de dos grupos: "todos los pueblos de alrededor contra Judá" y "todas las naciones de la tierra". Estos grupos son identificados por dos profecías diferentes. Para el primer grupo, Jerusalén será "una copa que hará temblar" y para el segundo grupo, Jerusalén será "una piedra pesada". El primer grupo es identificado también en estar unidos en un "sitio" contra Judá y contra Jerusalén, el segundo grupo es identificado como las naciones que "se juntarán contra ella".

¿Por qué Israel será "una copa que hará temblar" a sus vecinos? Como ya lo hemos mencionado, Israel es una de las naciones militares más poderosas del mundo y podría destruir a sus vecinos árabes en cualquier momento pero se abstiene de hacerlo. Y en lo que se refiere cuando se dice una "piedra pesada", qué mejor prueba puede existir de esta profecía cuando vemos que desde 1967 hasta 1989, de las 865 resoluciones de las Naciones Unidas, 526 han sido en contra de Israel.

Como también lo hemos mencionado, es la primera vez que Israel ha sido dividido. Ahora también vemos que por primera vez todas las naciones que rodean a Israel están unidas en una meta común. ¿Qué es lo que los une? Todas son musulmanes y es el Islam (que ni siquiera existía durante el tiempo de estas profecías) que las une en el deseo común de destruir a Israel.

Para que todas las naciones estén unidas en contra de Israel, tendría que existir una organización de "todas las naciones". La ONU fue organizada en 1945, justo a tiempo para ser el conducto del cumplimiento de esta profecía.


Esta profecía de 2,500 años es al mismo tiempo específica en sus detalles y sin falta alguna en su exactitud.

Otra sorprendente profecía es concerniente al anti-Semitismo. No existe un razonamiento racional para este odio implacable que ha continuado por muchos miles de años. Lo que mantiene esta absurda, insensata y demente obsesión es la determinación de exterminar a los judíos. Ninguna otra nación u otra nacionalidad ha sido el blanco por tanto tiempo de tal odio. En el libro "La Guerra Secreta en contra de los judíos", Mark Aarons y John Loftus escriben:

"Por más de veinte siglos (los judíos) han sido perseguidos, desplazados y aniquilados. (Sí) es cierto que (otros) grupos han sufrido enormemente en las manos de tiranos, pero existe una diferencia crucial... En cada uno de estos casos , el genocidio fue con la intención de servir un propósito más profundo, como la conquista de un territorio, la adquisición de fortunas, el engrandecimiento de poder político... en contraste, el genocidio del pueblo judío fue hecho... no necesariamente para alcanzar otro propósito fundamental. ¡Ese era el propósito fundamental! Esto es lo que hace el Holocausto Nazi tan singular, tan distinto, tan único".

Si, muchos grupos han sufrido tremendamente. Los musulmanes destruyeron a más de un millón de armenios al igual que otros pueblos a través de la historia de la humanidad. Miles de gente negra fueron transportados del África para ser esclavos en un comercio que empezaron los árabes, ayudados por africanos. Pero, debemos notar, que la intención no era la exterminación de esta gente, como ha sido (y continúa siéndolo) el objetivo de los musulmanes para con los judíos.

Increíblemente, la mentira obvia persiste por los líderes religiosos como los últimos papas, y líderes políticos como el ex-Presidente Bush y el ex-Primer Ministro Tony Blair y ahora el Presidente Obama, que el Islam es una religión de paz y que ha sido calumniado y difamado por los críticos del Islam. En realidad, los musulmanes han asesinado millones de personas en su constante meta de dominar al mundo y existe una matanza actual en lugares como Indonesia, Sudán, Nigeria y en muchos otros lugares.

En contraste con la persistente alabanza del Islam como una fuerza positiva para la paz en el mundo, Israel, que nunca ha verbalizado ataques sin provocación hacia otras naciones y ha actuado solamente en defensa propia, ha sido acusado constantemente en las Naciones Unidas de agresión en contra de sus vecinos inocentes.

El cumplimiento de las profecías bíblicas es una prueba indiscutible que el Dios de la Biblia existe. Además, estas tantas profecías son una constante advertencia al mundo entero del juicio venidero. En nuestro próximo boletín revisaremos las muchas promesas de bendiciones para aquellos quienes consideran seriamente y prestan atención a la Palabra de Dios con relación a Israel.

Reproducido con permiso de:
The Berean Call

Fuente:
The Berean Call en Español

Original article:
Israel and Prophetic Proof - I Part

En Defensa de la Fe
Share/Bookmark