jueves, 11 de agosto de 2022

Libro: ¿Cuál es la Diferencia Entre un Milenio y un Milpiés? – Capítulo 5 (parte 2 de 2)

El Premilenialismo Moderno

El punto de vista del sentido llano 

Por Dr. David R. Reagan

Haga clic sobre la imagen para ir al Índice

Contraargumentos

El primer argumento de refutación que generalmente presentan las personas que rechazan el Rapto Pre-Tribulación es su afirmación de que no hay mención del Rapto en Mateo 24, donde Jesús presenta un amplio estudio de los eventos del tiempo del fin. La Tribulación es descrita por el Señor en detalle en los versículos 9-24. Luego se nos dice en los versículos 25-31 que “inmediatamente después de la tribulación”, el Señor regresará y “enviará a sus ángeles para reunir a Sus escogidos”. ¿Dónde está el Rapto?

Una vez más, debemos tener en cuenta que el libro de Mateo fue escrito a los judíos, y el Rapto es una promesa a la Iglesia, no al pueblo judío. El registro de Mateo del discurso de Jesús en el capítulo 24 se enfoca en los judíos en la Tribulación, no en la Iglesia. En cuanto a los “escogidos” que serán reunidos al final de la Tribulación cuando Jesús regrese, serían aquellos que fueron salvos durante la Tribulación, después del Rapto de la Iglesia.

¡Siga Leyendo!

Pero Mateo 24 no termina con la descripción de la Segunda Venida del Señor. En el versículo 36, el escritor de repente cambia de marcha y comienza a registrar las palabras de Jesús con respecto a un evento que tiene que ser algo más que la Segunda Venida. Cita a Jesús diciendo: “Pero del día y la hora nadie sabe, ni aun los ángeles de los cielos, sino solo mi Padre”.

Esto no podría ser una referencia a la Segunda Venida, porque la Biblia deja muy claro que Jesús regresará a esta tierra exactamente 2,520 días (Ap. 11:3 y 12:6), o siete años (compuestos de 360 años proféticos), después de que comience la Tribulación. Parece evidente que, en este punto del discurso de Jesús, Él cambia Su enfoque de la Segunda Venida al Rapto.

Otra evidencia de que esto es cierto se puede encontrar en el siguiente versículo (versículo 37). Jesús dice: “Porque la venida del Hijo del Hombre será como los días de Noé”. Procede a explicar que cuando ocurrió el diluvio, las personas estaban llevando a cabo su vida diaria sin ningún sentido de preocupación, “casándose y dando en casamiento” (versículos 38-44). Esto es cualquier cosa menos una descripción de la naturaleza de la sociedad al final de la Tribulación. Para entonces, toda la tierra estará envuelta en el caos. La gente estará en un estado perpetuo de pánico en lugar de seguir con sus vidas en paz y tranquilidad.

Por lo tanto, el Rapto se puede encontrar en Mateo 24, en los versículos 36-44. Y dos veces en esta sección del capítulo, Jesús advierte que “Velad, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor” (versículos 42 y 44). Una vez más, dado que el día de la Segunda Venida puede determinarse con precisión, este pasaje debe estar hablando del Rapto y del hecho de que es un evento inminente que podría ocurrir en cualquier momento.

La Novedad del Concepto

Otra refutación común al Rapto Pre-Tribulación es que es “demasiado nuevo para ser verdad”. Este argumento se basa en la suposición de que el concepto Pre-Tribulación del momento del Rapto no fue desarrollado hasta principios de 1800, por un hombre llamado John Nelson Darby, quien era un líder entre los Hermanos de Plymouth, en Inglaterra.

Esta suposición no es correcta, pero incluso si fuera cierta, no invalidaría el concepto. Lo mismo se dijo de la afirmación de Martín Lutero de que la Biblia enseña la salvación por gracia a través de la fe y no por obras.

Además, la Biblia deja en claro que la profecía bíblica no se entenderá completamente hasta los tiempos del fin. Por ejemplo, cuando Daniel le preguntó a Dios el significado de las profecías del tiempo del fin que se le habían dado, el Señor le dijo que las profecías no eran para que él las entendiera. “Estas palabras están cerradas”, dijo el Señor, “y selladas hasta el tiempo del fin” (Daniel 12:9).

Los eventos históricos modernos, como el restablecimiento de Israel, y los desarrollos tecnológicos modernos, como la invención de la energía nuclear, nos están ayudando a comprender las profecías bíblicas que nunca antes se habían entendido.

Pero la clave más importante ha sido el renacimiento de la interpretación literal. Desde el año 400 d. C., hasta alrededor de 1700, la profecía bíblica fue espiritualizada e interpretada alegóricamente. Se han hecho muchos nuevos descubrimientos en la profecía bíblica desde el siglo XVIII, simplemente porque la gente comenzó a aceptar que las profecías significan lo que dicen.

Por lo tanto, no estamos hablando de nuevas verdades novedosas. Estamos hablando, en cambio, del descubrimiento de verdades que siempre estuvieron en las Escrituras, pero que fueron confundidas por la espiritualización o que esperaban acontecimientos históricos o descubrimientos tecnológicos.

El Origen del Punto de Vista Pre-Trib

Pero volvamos a la alegación original: que el Rapto Pre-Tribulación se originó a principios del siglo XIX en Inglaterra, entre un grupo llamado Los Hermanos de Plymouth. Esta alegación simplemente no es cierta.

Las expresiones de inminencia abundan en los escritos y sermones de Padres de la Iglesia como Clemente de Roma e Ignacio de Antioquía, quienes vivieron en el primer siglo. También se pueden encontrar declaraciones sobre el regreso inminente del Señor en publicaciones tempranas como La Didajé (60-100 d. C.), La Epístola de Bernabé (130-131 d. C.), y El Pastor de Hermas (110 d. C.). Esta última publicación en realidad contiene un concepto pre-tribulacional de escapar de la Gran Tribulación:2

Si, pues, os preparáis, y os arrepentís de todo corazón, y os volvéis al Señor, podréis escapar de ella, si vuestro corazón es puro y sin mancha. . .

Un investigador de las profecías, Lee Brainard, ha descubierto recientemente diez referencias a un Rapto Pre-Trib en los escritos de Efraín el Sirio (306-373).3 Efraín es especialmente venerado en el cristianismo siríaco y se cuenta como un Padre Venerable (es decir, un monje santo) en la Iglesia Ortodoxa Oriental. Tan populares fueron sus obras que, durante siglos después de su muerte, los autores cristianos escribieron cientos de pseudo-obras en su nombre. Ha sido llamado el más significativo de todos los padres de la tradición eclesiástica de habla siríaca.4 Éstas son algunas de las citas de sus sermones:

  • “Bienaventurado el que recuerda incesantemente el miedo al Gehena, y se apresura a arrepentirse sinceramente... porque será librado de la gran tribulación”.5
  • “Porque los escogidos serán reunidos antes de la tribulación para que no vean la confusión y la gran tribulación que viene sobre el mundo injusto”.6
  • “Velad en todo tiempo, orando sin cesar, para que seáis dignos de escapar de la tribulación”.7
  • “Considéranos dignos, Señor, del rapto de los justos, cuando se encuentren contigo el Maestro, en las nubes, para que no seamos probados en el juicio amargo e inexorable”.8

Brainard también ha encontrado una cita previamente desconocida en los escritos de Ireneo (130-202 d. C.). Fue instruido por Policarpo (69-155 d. C.) quien, a su vez, fue alumno del apóstol Juan. Ireneo escribió:9

Cuando al final la Iglesia sea repentinamente arrebatada de esto, se dice: “Habrá tribulación cual no la habido desde el principio, ni la habrá”. Porque ésta es la última contienda de los justos, en la cual, cuando venzan, son coronados de incorrupción.

Estas citas no dejan duda de que había un concepto definido en la Iglesia primitiva de un regreso inminente de Jesús antes de la Tribulación. Pero, con la adopción del punto de vista amilenial de Agustín por parte de la Iglesia Católica Romana a mediados del siglo V, la interpretación literal de la profecía fue desechada y el concepto de un Rapto Pre-Trib cayó en la oscuridad.

El Desarrollo del Punto de Vista Pre-Trib

Las citas anteriores también dejan en claro que el concepto del Rapto Pre-Trib no es una “idea recién llegada”. Ése es el argumento de los críticos, que dicen que la idea nunca existió antes de principios de 1800, cuando supuestamente fue ideada por un teólogo británico llamado John Nelson Darby.

El concepto comenzó a ganar impulso después de la Reforma, cuando las personas obtuvieron copias de la Biblia en sus propios idiomas y comenzaron una vez más a interpretar la Biblia literalmente. Esto resultó en el renacimiento del Premilenialismo Histórico, junto con el concepto de un Rapto Pre-Trib.

Por ejemplo, el líder puritano, Increase Mather (1639-1723), intentó demostrar en sus escritos “que los santos serían arrebatados en el aire de antemano, escapando así de la conflagración final”.10 Del mismo modo, Pedro Jurieu, en su libro, Approaching Deliverance of the Church (1687), enseñó que Cristo vendrá en el aire para arrebatar a los santos y regresar al cielo antes de la batalla de Armagedón.11

En la década de 1740, un pastor bautista de Inglaterra, llamado Morgan Edwards, comenzó a propugnar un Rapto tres años y medio antes del comienzo del Milenio. Aunque su concepto era realmente un Rapto mid-Trib, muestra claramente que había personas en ese momento que enseñaban un Rapto separado y aparte de la Segunda Venida.12

Investigaciones históricas recientes reveladas en un libro titulado Dispensationalism Before Darby (2015), demuestran más allá de toda duda que la idea de un Rapto Pre-Trib había existido mucho tiempo antes de que John Darby lo sistematizara y comenzara a popularizarlo a principios de 1800. 13

El autor del libro, el Dr. William Watson (fallecido en 2020), fue profesor de Historia en la Universidad Cristiana de Colorado. Utilizó más de 350 fuentes europeas primarias de los siglos XVII y XVIII en la compilación de su nuevo libro.

Señaló que la mayoría de las fuentes que citó en el libro no habían sido citadas previamente en el debate sobre el origen del Rapto Pre-Trib — “muy probablemente porque no se han leído durante siglos”.14

Con respecto al concepto de un Rapto Pre-Tribulación, concluyó que “muy poco de lo que John Nelson Darby enseñó a mediados del siglo XIX era nuevo”.15

Su investigación mostró claramente que, a finales del siglo XVII, la idea de un Rapto separado y aparte de la Segunda Venida se había convertido en un concepto común. Nombró a siete autores que tenían una visión “pre-conflagración” de un rapto que sacaría a los santos del mundo antes de que éste fuera consumido por el fuego. Identificó a otros seis autores que eran “claramente Pre-Trib”. Y nombró a cuatro que no eran Pre-Trib, pero que se referían en sus escritos a la existencia de otros que sí lo eran.16

Señala que el uso de la palabra, Rapto, también estaba muy extendido, y algunos incluso se referían a aquellos que serían “dejados atrás”. Esta interpretación de un Rapto, separado y aparte de la Segunda Venida, continuó siendo defendida por los expertos en profecías bíblicas a lo largo del siglo XVIII. Su momento del Rapto varió, pero a finales del siglo XVIII, “más de una generación antes de Darby, la creencia en un Rapto de la Iglesia antes de una gran tribulación era común en Gran Bretaña”.17

De hecho, el Dr. Watson demostró que “la creencia era sostenida no sólo por los bautistas . . .pero también por los principales anglicanos. . . e incluso por los presbiterianos escoceses. . .”.18

Sin toda la evidencia detallada del Dr. Watson, el historiador secular, el Dr. Paul Boyer, ya había llegado a esta conclusión en su libro, When Time Shall Be No More; Prophecy Belief in Modern American Culture, que fue publicado por Harvard University Press, en 1994. Él escribió:19

En cierto sentido, el sistema de Darby no contenía nada nuevo. Su enfoque en el cumplimiento futuro de la profecía siguió la escatología de los primeros cristianos. El premilenialismo había sido una opción para los evangélicos protestantes desde los días de Joseph Mede (1586-1639), mientras que las formas rudimentarias de “"dispensacionalismo” se remontan al menos hasta Joaquín de Fiore (1135-1202).

Incluso la doctrina del Rapto. . . se puede encontrar en los escritos de los primeros intérpretes, incluyendo Increase Mather (1639-1723). Pero Darby tejió estas diversas hebras en un sistema sólido y cohesivo que reforzó en cada punto con abundantes textos bíblicos de prueba, y que luego promovió incansablemente a través de sus escritos y giras de predicación.

El punto es que el concepto de un Rapto Pre-Trib no simplemente cayó del cielo en el regazo de John Darby en la década de 1830. Era un concepto que había sido sostenido por algunos de los primeros Padres de la Iglesia, y después de la Reforma, se desarrolló lentamente durante varios cientos de años en los escritos de los eruditos de la profecía bíblica de una variedad de tradiciones cristianas.

La doctrina del Rapto Pre-Trib se extendió rápidamente por todo el mundo a través de publicaciones como Jesus is Coming (1878),  de William Blackstone; La Biblia de Estudio de Scofield (1909); el libro de Hal Lindsey La Agonía del Gran Planeta Tierra (1970); y  la serie de libros Dejados Atrás, de Tim LaHaye (16 volúmenes de 1995 a 2007).

La Conclusión 

En realidad, el desarrollo histórico de la doctrina del Rapto Pre-Tribulación es irrelevante. Lo único que es importante es si la doctrina es o no bíblica. ¿Se basa en las Escrituras? La respuesta es “¡Sí!”.


“El hecho de que el glorificado y santo Hijo de Dios pueda atravesar la puerta del cielo en cualquier momento es la intención de Dios de que sea la motivación más apremiante e incesante para una vida santa y un ministerio agresivo (incluidas las misiones, el evangelismo y la enseñanza de la Biblia), y la mayor cura para el letargo y la apatía. Debería hacer una gran diferencia en los valores, acciones, prioridades y metas de cada cristiano” — Renald Showers, Maranatha Our Lord, Come! A Definitive Study of the Rapture of the Church (Bellmawr, N.J.: The Friends of Israel Gospel Ministry, Inc., 1995), páginas 255-256.

“Mientras la raza humana ha vivido, ha habido un sueño de una ‘edad de oro’... Una y otra vez lo encontramos en la Palabra de Dios. Profeta tras profeta, apóstol tras apóstol, libro tras libro, registra esa bendita esperanza. Hay más dicho en las escrituras proféticas con respecto a esta era milenaria que de cualquier otra cosa en las profecías mismas. Nunca ha habido un momento en que Dios no haya propuesto esto para nosotros; es decir, que nosotros, con nuestro Señor, reinaremos en santidad, en gloria y en triunfo sobre esta tierra” — W. A. Criswell, Expository Sermons on Revelation: Five Volumes Complete and Unabridged in One (Grand Rapids, MI: Zondervan Publishing House, 1969) volumen 5, páginas 72-73.

Lea la parte 1 aquí

Traducido por Donald Dolmus
En Defensa de la Fe (endefensadelafe.org)

Order Dr. Reagan's new book:

miércoles, 10 de agosto de 2022

Libro: ¿Cuál es la Diferencia Entre un Milenio y un Milpiés? – Capítulo 5 (parte 1 de 2)

El Premilenialismo Moderno
El punto de vista del sentido llano 

Por Dr. David R. Reagan

Haga clic sobre la imagen para ir al Índice

El punto de vista premilenial moderno representa un renacimiento de la visión premilenial histórica, con la única diferencia de que separa el Rapto de la Segunda Venida y lo coloca, en cambio, justo antes del comienzo de la Tribulación.

Así, Jesús aparece en los cielos primero por Su Iglesia para sacar a los santos, tanto a los vivos como a los muertos, fuera de este mundo, antes de que la ira de Dios sea derramada durante la Tribulación. Luego, al final del período de siete años de la Tribulación, Él regresa a la tierra con Su Iglesia para reinar durante mil años.

Figura 7: Premilenialismo Moderno

La visión premilenial moderna se basa en una interpretación literal o de sentido llano de lo que la Biblia dice acerca de los tiempos del fin. Pero, ¿dónde se originó el concepto de un Rapto separado y aparte de la Segunda Venida? Y, ¿puede ser justificado en las Escrituras?

Echemos un vistazo a la evidencia bíblica de lo que se conoce como un Rapto Pre-Tribulación.1

1 Evidencia Bíblica

El Discurso del Monte de los Olivos, como se registra en Mateo 24, es para los judíos que experimentarán los horrores de la Tribulación. El mismo discurso está registrado en Lucas 21 para la Iglesia, y contiene pistas sobre el momento del Rapto. Por ejemplo, después de mencionar un montón de señales del tiempo del fin que debemos observar, Jesús dice: “Cuando estas cosas comiencen a suceder, erguíos y levantad vuestra cabeza, porque vuestra redención está cerca” (Lucas 21:28 — cursiva agregada).

En el mismo pasaje, Jesús procede a instarnos a orar para que podamos “escapar de todas estas cosas que vendrán, y de estar en pie delante del Hijo del Hombre” (Lucas 21:36 – cursiva agregada).

La Palabra promete una y otra vez que la Iglesia será librada de la ira de Dios. Romanos 5:9 dice que “por él [Jesús] seremos salvos de la ira [de Dios]”. 1 Tesalonicenses 1:10 declara que estamos esperando “de los cielos a su Hijo... quien nos libra de la ira venidera”. La promesa se repite en 1 Tesalonicenses 5:9: “Porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo”. Tenga en cuenta que la Tribulación es el período de tiempo para el derramamiento de la ira de Dios.

En Apocalipsis 3:10, a la iglesia de Filadelfia, que representa a los cristianos fieles, se le dice que aquellos que perseveren en el Señor serán guardados “de la hora de la prueba”, esa hora que “habrá de venir sobre el mundo entero”.

2 La Seguridad de Pablo

Un argumento interesante a favor del momento Pre-Tribulación del Rapto se puede encontrar en 2 Tesalonicenses. La iglesia de Tesalónica estaba en una confusión porque alguien les había escrito una carta bajo el nombre de Pablo, que decía que se habían perdido la “reunión al Señor” y que, de hecho, estaban viviendo en “el día del Señor” (2 Tesalonicenses 2:1-2).

Pablo trató de calmarlos recordándoles su enseñanza de que el día del Señor no llegaría hasta después de que el Anticristo fuera revelado. Luego declaró que el Anticristo no sería revelado hasta que una fuerza restrictiva “sea quitada de en medio” (2 Tesalonicenses 2: 3-7).

Ha habido mucha especulación en cuanto a la identidad de esta fuerza restrictiva a la que Pablo se refiere. Algunos lo han identificado como el Espíritu Santo, y dado que el Espíritu Santo mora en los creyentes, se argumenta que Él será removido del mundo cuando los creyentes sean tomados en el Rapto.

Es cierto que los creyentes son habitados por el Espíritu Santo de una manera especial, pero eso no significa que, cuando la Iglesia sea sacada del mundo, el Espíritu Santo también lo será. El Espíritu Santo es omnipresente. Además, sabemos que habrá personas salvas durante la Tribulación, y nadie puede ser salvo sin el testimonio del Espíritu (Juan 16:8-11 y 1 Juan 5:7).

Otros han identificado al restrictor como el gobierno humano. Es cierto que el gobierno fue ordenado por Dios para contener el mal (Romanos 13:1-4). Pero los gobiernos del mundo están en rebelión contra Dios y Su Hijo (Salmo 2), y, por lo tanto, contribuyen al mal que caracteriza al mundo. Además, la Tribulación no se caracterizará por la falta de gobierno. Más bien, contará con el primer gobierno mundial verdadero (Apocalipsis 13:7).

En mi opinión, eso deja sólo otro candidato para ser el restrictor de Pablo — y ésa es la Iglesia. Es la Iglesia la que sirve como el principal restrictor del mal en el mundo de hoy, mientras proclama el Evangelio y defiende la justicia. Cuando la Iglesia fracasa en esta misión, el mal se multiplica, como Pablo señala gráficamente en 2 Timoteo 3:1-5. Pablo dice que la sociedad en los tiempos del fin se caracterizará por el caos y la desesperación porque “los hombres tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella”. Cuando la Iglesia sea quitada del mundo, literalmente se desatará todo el infierno.

3 Evidencia Simbólica

Hay varios tipos proféticos que parecen afirmar el concepto de liberación de la Tribulación. Tomemos a Enoc por ejemplo (Génesis 5:21-24). Él fue un profeta para los gentiles que fue arrebatado del mundo antes de que Dios derramara Su ira en el gran diluvio del tiempo de Noé. Enoc parece ser un tipo de la Iglesia gentil, que será sacada del mundo antes de que Dios derrame Su ira nuevamente. Si es así, entonces Noé y su familia son un tipo del remanente judío que será protegido durante la Tribulación.

Otro tipo simbólico del Antiguo Testamento que apunta hacia un Rapto Pre-Tribulación es la experiencia de Lot y su familia. Fueron librados de Sodoma y Gomorra antes de que esas ciudades fueran destruidas (Génesis 19:1-16).

El apóstol Pedro alude a ambos ejemplos en su segunda epístola. Él afirma que, si Dios perdonó a Noé y a Lot, entonces él seguramente “sabe librar de tentación a los piadosos, y reservar a los injustos para ser castigados en el día del juicio” (2 Pedro 2:4-9).

Otro hermoso tipo profético se encuentra en las tradiciones de bodas judías de la época de Jesús. Después de los esponsales, el novio regresaba a la casa de su padre para preparar una cámara de bodas para su novia. Regresaba por su novia en un momento inesperado, por lo que la novia tenía que estar lista constantemente. Cuando regresaba, llevaba a su novia de vuelta a la casa de su padre a la cámara que había preparado. Él y su novia estarían sellados en la cámara durante siete días. Cuando emergieran, se celebraría una gran fiesta de bodas.

Del mismo modo, Jesús ha regresado al Cielo para preparar un lugar para Su novia, la Iglesia (Juan 14:1-4). Cuando Él regrese por Su novia, la llevará al hogar celestial de Su Padre. Allí permanecerá con Su novia durante siete años (la duración de la Tribulación). El período terminará con “la cena de las bodas del Cordero”, descrita en Apocalipsis 19:7-9). Por lo tanto, los siete días en la cámara de bodas apuntan proféticamente a los siete años que Jesús y Su novia permanecerán en el Cielo durante la Tribulación.

4 La Estructura de Apocalipsis

La estructura del libro de Apocalipsis también implica un Rapto Pre-Tribulación en un sentido simbólico. Los tres primeros capítulos se centran en la Iglesia. El capítulo 4 comienza con la puerta del Cielo abriéndose y Juan siendo arrebatado desde la isla de Patmos al trono de Dios en el Cielo. La Iglesia no se menciona a partir de entonces hasta Apocalipsis 19:7-9, cuando es retratada como la “novia de Cristo” en el Cielo con Jesús celebrando la “cena de las bodas del Cordero”. En Apocalipsis 19:11, la puerta del Cielo se abre de nuevo, y Jesús emerge montado en un caballo blanco en Su camino a la tierra, seguido por Su Iglesia (Ap. 19:14).

El rapto del apóstol Juan en Apocalipsis 4 parece ser un tipo simbólico del Rapto de la Iglesia. Note que es iniciado por el grito de una voz que suena como el sonido de una trompeta (Ap. 4:1). Dado que la Tribulación no comienza hasta Apocalipsis 6, el rapto de Juan en Apocalipsis 4 parece ser un tipo simbólico que apunta a un Rapto Pre-Tribulación de la Iglesia.

Algunos contrarrestan este argumento señalando que, aunque la Iglesia no se menciona en Apocalipsis, durante la descripción de la Tribulación en ese libro, hay una mención constante de “santos” (por ejemplo, Ap. 13:7).

Pero ese término no se usa en la Biblia exclusivamente para referirse a los miembros de la Iglesia. Daniel lo usa para referirse a los creyentes del Antiguo Testamento que vivieron mucho antes de que se estableciera la Iglesia (Daniel 7:18). Los santos a los que se hace referencia en el libro de Apocalipsis son aquellas personas que serán salvas durante la Tribulación, después de que la Iglesia haya sido sacada del mundo.

5 La Población del Milenio

La Biblia enseña que, cuando Jesús regrese, va a juzgar a todas las personas en la tierra y consignar a los incrédulos a la muerte. El juicio de los gentiles se presenta en Mateo 25:31-46; el juicio de los judíos, en Ezequiel 20:33-38. En Lucas 17:37 se nos dice que los cuerpos de los incrédulos serán alimentos de los buitres. Apocalipsis 19:17 llama a esto “la cena de Dios”. Se presenta en contraste con la fiesta de las bodas del Cordero a la que los creyentes serán invitados (Ap. 19:6-10).

Una vez que se completen estos juicios, a todos los creyentes convertidos durante la Tribulación y que queden vivos al final de la misma — tanto judíos como gentiles — se les permitirá entrar en el Milenio en la carne. Este grupo comenzará a propagarse, y a través de ellos, la tierra será repoblada. Estas son las personas sobre las que reinarán los santos glorificados durante mil años. Dado que la muerte se reducirá y la esperanza de vida se extenderá durante el Milenio, la población de la tierra crecerá exponencialmente.

Ahora, si el Rapto se combina con la Segunda Venida como un solo evento al final de la Tribulación, ¡entonces todos los creyentes serán glorificados y no quedará nadie en sus cuerpos físicos para entrar en el Milenio! La única manera de llegar a una población milenaria es ubicar el Rapto antes de la Tribulación. Los salvados durante la Tribulación, y que vivan hasta el final de ella, entrarán al Milenio en sus cuerpos físicos y servirán como el grupo núcleo para repoblar el mundo.

6 El Propósito de la Tribulación

Otro argumento basado en la lógica es el hecho de que no hay ningún propósito para que la Iglesia esté en la tierra durante la Tribulación. El propósito de la Tribulación es proporcionar un período de tiempo para el derramamiento de la ira de Dios. La Iglesia es inmune a la ira de Dios (1 Tes. 1:10).

Habrá personas salvas durante la Tribulación, pero no serán salvadas por la Iglesia, sino por el testimonio del Espíritu Santo a través de la lectura de la Biblia, experimentando los juicios de la Tribulación, y escuchando el Evangelio predicado por los dos testigos de Dios en Jerusalén y los 144,000 judíos. Además, se nos dice que justo al final de la Tribulación, antes del derramamiento final de la ira de Dios en los Juicios de las Copas, Dios enviará un ángel que circunnavegará la tierra, proclamando el Evangelio a cada persona (Ap. 14:6).

Algunos han argumentado que la Iglesia debe pasar por la Tribulación con el fin de purificarla para su presentación al Señor. Los verdaderos cristianos no necesitan tal purificación, porque sus pecados han sido limpiados por la sangre de Jesús (1 Juan 1:7). ¡Afirmar que éste es un propósito de la Tribulación tiene el efecto de convertir ese período de tiempo en un Purgatorio Protestante!

Además, ¡no tiene sentido decir que Jesús va a golpear a su novia durante siete años durante la Tribulación antes de venir a buscarla para la boda! ¿Qué tipo de novio haría tal cosa? ¿Qué novia esperaría amorosamente estar unida a un novio así?

7 La Lógica de la Inminencia

Tal vez el argumento más fuerte en nombre de un Rapto Pre-Tribulación es uno basado en la lógica. Es el argumento de la inminencia.

Se nos dice repetidamente en las Escrituras que la venida del Señor es inminente — que puede tener lugar en cualquier momento. Se nos advierte “estad preparados” (Mateo 24:44), “estad alertas” (Mateo 24:42), “estén ceñidos” (Lucas 12:35), y “mantener vuestras lámparas encendidas” (Lucas 12:35). La fuerza clara de estas advertencias persistentes es que Jesús puede aparecer en cualquier momento.

Sólo el concepto Pre-Tribulación del Rapto permite la inminencia de la aparición del Señor por Su Iglesia. Cuando el Rapto se coloca en cualquier otro punto en el tiempo, la inminencia de la aparición del Señor se destruye, porque otros eventos proféticos deben suceder primero.

Por ejemplo, si el Rapto va a ocurrir a la mitad de la Tribulación, entonces ¿por qué debería vivir esperando la aparición del Señor en cualquier momento? En cambio, debería estar esperando un tratado de paz israelí, la reconstrucción del templo judío y la revelación del Anticristo. Entonces y sólo entonces podría aparecer el Señor.

Se nos exhorta a vivir esperando a Jesucristo, no al Anticristo (Tito 2:13).

Lea la parte 2 aquí

Traducido por Donald Dolmus
En Defensa de la Fe (endefensadelafe.org)

Order Dr. Reagan's new book:

martes, 9 de agosto de 2022

Revista Llamada de Medianoche – Agosto 2022

Las 70 Semanas de Daniel


Haga clic sobre la imagen para descargar la revista

Temas incluidos en esta edición:

»» La profecía de la Primera Venida del Mesías
»» Israel y el Día del Recuerdo de la Shoá
»» El amor a Israel y el evangelio de Pablo
»» El objetivo de la carta a Sardis
»» Las aflicciones a causa de Jesús y la Gran Tribulación

Entre otros.

Para poder descargar y leer esta revista, necesitará tener instalado el programa gratuito Adobe Reader.


Si desea obtener materiales adicionales, visite la página web del Ministerio Llamada de Medianoche:

martes, 2 de agosto de 2022

Revista Llamada de Medianoche – Julio 2022

El mundo está en un remolino descendente, pero Dios tiene el control


Haga clic sobre la imagen para descargar la revista

Temas incluidos en esta edición:

»» Los pactos y la profecía bíblica
»» El manejo de la ola de terror
»» ¿Israel en la mira del Estado Islámico?
»» ¿Qué es ser guiado por el Espíritu?
»» ¿Es Putin el defensor de la fe ortodoxa?

Entre otros.

Para poder descargar y leer esta revista, necesitará tener instalado el programa gratuito Adobe Reader.


Si desea obtener materiales adicionales, visite la página web del Ministerio Llamada de Medianoche:

domingo, 31 de julio de 2022

El Reino Venidero – Parte 22

 Por Dr. Andy Woods

Haga clic en la imagen para ir al Índice 

El mundo evangélico de hoy cree que la iglesia está experimentando el reino mesiánico. Nótese las palabras de Russell Moore, Presidente de la Comisión de Ética y Libertades Religiosas de la Convención Bautista del Sur: “El lugar del reino de Dios en esta era está dentro de la iglesia, donde Jesús gobierna como rey. Al vivir nuestras vidas juntos, vemos el poder transformador del evangelio y la ruptura del reino futuro”.[1] Para abordar este tipo de confusión, comenzamos un estudio que narra lo que la Biblia enseña sobre el reino. En esta serie, la enseñanza bíblica sobre el reino ha sido examinada desde Génesis hasta Apocalipsis. Hemos notado hasta ahora que lo que el Antiguo Testamento predice con respecto a un reino terrenal fue ofrecido a Israel durante el Primer Adviento de Cristo. Sin embargo, la nación rechazó esta oferta del reino, lo que llevó al aplazamiento del reino. Mientras tanto, el reino es futuro, ya que Dios ahora persigue un programa interino que incluye a la iglesia.

Además, comenzamos a examinar una serie de textos que los teólogos del “reino ahora” emplean rutinariamente para argumentar que el reino es una realidad espiritual presente. El objetivo al hacerlo es mostrar que ninguno de estos pasajes, cuando se los entiende correctamente, enseña una forma espiritual presente del reino. Comenzamos con el uso de tales supuestos textos del “reino ahora” en la vida de Cristo. Tales textos incluyen, “Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado” (Mateo 3:2; 4:17; 10:5-7), “buscad primeramente el reino y su justicia” (Mateo 6:33), “Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora el reino de los cielos sufre violencia” (Mateo 11:12), y ‘el reino de Dios ha venido sobre vosotros’ (Mateo 12:28). Ahora comenzamos un análisis extendido de Lucas 17:20-21, que representa un texto de prueba clave utilizado por los teólogos del “reino ahora”. Estos versículos dicen: “Preguntado por los fariseos, cuándo había de venir el reino de Dios, les respondió y dijo: El reino de Dios no vendrá con advertencia, ni dirán: Helo aquí, o helo allí; porque he aquí el reino de Dios está entre vosotros”. 

Notamos que es apropiado disputar la interpretación común, “el reino de Dios está dentro de ustedes”. Cristo estaba conversando con fariseos incrédulos. Craven observa: “La suposición de que Él indicó un Basileia existente...implica que fue establecido en (o entre) los fariseos”.[2] Además, explicamos que la oferta del marco del reino, como se discutió en artículos anteriores, es suficiente para manejar estos versículos. La presencia de Cristo manifestó realidades del reino que también podrían haberse vuelto tangibles para la nación si hubieran cumplido con su obligación de entronizar a su rey (Dt. 17:15). En otras palabras, la presencia del reino en Cristo no podía convertirse en una realidad para todos debido al rechazo de la nación de la oferta del reino.

El Reino es una Certeza Futurista 

Cuando miramos el contexto más amplio de Lucas 17:20–21, que se encuentra en Lucas 17:20–37, se hace evidente que Cristo estaba hablando principalmente de una manifestación futura, más que presente, del reino. Para cuando Cristo pronunció las palabras que se encuentran en Lucas 17:20–21, es evidente que el Israel del primer siglo no iba a aceptar la oferta del reino ya que la nación estaba en el proceso de rechazar a su rey. En Lucas 17:22, 25, Cristo señaló: “Tiempo vendrá cuando desearéis ver uno de los días del Hijo del Hombre, y no lo veréis. . .Pero primero es necesario que padezca mucho, y sea desechado por esta generación”. En consecuencia, en esta sección, Cristo comenzó a delinear cómo el reino futuro vendrá un día a la tierra. El establecimiento futuro del reino será un evento instantáneo en lugar de un proceso gradual y prolongado (Dn. 2:35, 44). Este establecimiento instantáneo del reino futuro explica por qué Cristo dijo: “El reino de Dios no vendrá con señales para ser observadas”. La observación de señales sólo es pertinente si un evento es gradual y no instantáneo. Por lo tanto, una vez que venga el reino, la gente no dirá: “Helo aquí, o helo allí; porque he aquí el reino de Dios está entre vosotros” (Lucas 17:20–21). Esta llegada instantánea y futurista del reino se ve corroborada por el contexto circundante, que compara la segunda venida de Cristo con el repentino destello de un relámpago (Lucas 17:23–24), y con las aguas del diluvio que rápidamente cayeron sobre el mundo en los días de Noé (Lucas 17:20–28), así como al fuego y el azufre que cayeron repentinamente sobre Sodoma y Gomorra en los días de Lot (Lucas 17:29–33). Por lo tanto, estos eventos tomarán desprevenidos a los incrédulos, ya que luego serán llevados a un juicio inmediato (Lucas 17:34–36). Este contexto futurista general es probablemente la razón por la que el tiempo futuro del verbo se emplea en la declaración de Cristo, “ni dirán: Mira” (Lucas 17:21; cursiva agregada). Aquí, la palabra traducida “dirán” es el verbo en tiempo futuro de la palabra griega legō. Por lo tanto, después de examinar el contexto futurista en Lucas 17:20–37, Craven hace apropiadamente la siguiente pregunta con respecto al anuncio del reino dado en Lucas 17:20–21: “¿No se hace manifiesto que este pasaje, tan lejos de enseñar la doctrina de un establecimiento actual de Basileia, ¿debe contarse entre los que conectan el establecimiento con el Segundo Adviento?”.[3] 

Si la llegada del reino es de hecho una realidad futura, entonces ¿por qué Cristo en Lucas 17:21 parece hablar del reino como una realidad presente cuando usó el tiempo presente del verbo eimi para proclamar “porque he aquí el reino de Dios está entre vosotros”? (cursiva agregada). Se pueden ofrecer al menos dos razones para explicar el uso que hace Cristo del tiempo presente aquí. Primero, debido a que los fariseos hicieron la pregunta inicial en tiempo presente, es lógico pensar que Cristo también respondería su pregunta en tiempo presente. La pregunta inicial en Lucas 17:20 dice: “Preguntado por los fariseos, cuándo había de venir el reino de Dios” (cursiva agregada). Aquí, la palabra traducida “había de venir” es la forma presente del verbo erchomai. Por lo tanto, la pregunta del tiempo presente de los fariseos sienta las bases adecuadas para la respuesta del tiempo presente de Cristo. Craven explica bien esta congruencia:

En la E. V. hay una diferencia de tiempo entre la pregunta de los fariseos y la respuesta de Jesús—ellos preguntan cuándo debe venir el Basileia, y Él responde, no viene con observación, está dentro de ustedes—lo que necesariamente implica una declaración. del establecimiento existente en ese momento. Esta diferencia no está autorizada en absoluto—tanto la pregunta como la respuesta están en el presente; la pregunta de los fariseos debería traducirse “¿cuándo vendrá (erchetai) el reino de Dios?”. La pregunta se formuló en el presente vívido y dramático; manifiestamente se refería al futuro; sería un desafío a toda ley concebible del lenguaje suponer que nuestro Señor, al seguir el ejemplo de Sus interrogadores, tenía la intención de indicar un tiempo diferente. La pregunta y la respuesta no son más que ilustraciones de esa ley propia de todos los idiomas, pero preeminentemente del griego.[4] 

En segundo lugar, el lenguaje bíblico a menudo describe eventos futuros con el tiempo presente para indicar su certeza última. Debido a que Dios es infinito y, por lo tanto, no está limitado por el tiempo como lo está el hombre finito (Sal. 90:4; 2 Pedro 3:8), para Él, el futuro es el presente. En otras palabras, Su infinitud le permite expresar eventos futuros como si fueran realidades presentes porque Él los ve como tales. Por ejemplo, Romanos 8:29–30 dice: “Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos. Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó” (cursiva mía). Aquí Pablo presenta las diversas fases de la salvación del creyente. Note que nuestra futura glorificación está representada en el mismo tiempo pasado que nuestra predestinación, llamado y justificación pasados. En otras palabras, la gloria futura del creyente es tan cierta como cualquier cosa que Dios haya hecho en el pasado del creyente. Después de todo, Él no está limitado por el tiempo y, por lo tanto, ve este futuro como si fuera una realidad presente. Por esta misma razón, Dios le prometió a Josué la victoria sobre Jericó antes de que se hubiera librado cualquier batalla (Jos. 6:2). En consecuencia, Dios, que puede ver el futuro con claridad ya que no está limitado por el tiempo, ya vio la victoria final de Josué.

De la misma manera, en Lucas 17:21, Cristo usa el tiempo presente para describir el reino, no para representar su llegada espiritual presente, sino más bien para articular su certeza futurista. Craven explica: 

…preeminentemente al griego, por el cual un futuro cierto puede ser representado por un verbo en el presente; se pueden encontrar ilustraciones en Mt. 26:2 (después de dos días es la fiesta de la Pascua, y el Hijo del Hombre es entregado, etc.); 1 Co. 15:42–44 (se siembra en corrupción, se resucita [en la resurrección futura] en incorrupción). . .A la conclusión de que el lenguaje de nuestro Señor debe entenderse en referencia al futuro, también se puede remarcar, estamos encerrados por las siguientes consideraciones: La suposición. . . desconecta Sus palabras del discurso inmediatamente siguiente a los discípulos, mientras que la suposición contraria los pone en una conexión manifiesta y hermosa con él y con Sus otras declaraciones. . . . A este respecto, se puede considerar la clase de pasajes que se considera que enseñan la doctrina de un presente Basileia a partir de su uso del verbo presente al mencionarlo. (No se hace ahora referencia a aquellos en los que se enseña en el contexto que aparentemente requiere la hipótesis de un reino presente; cada uno de éstos recibe una consideración independiente). Estos pasajes son: todas aquellas parábolas que así se refieren al Basileia, Mt. 13:31, 38, 44, 45, 47, etc.; también Mt. 11:11; Ro. 14:17. Todos éstos, se admite, son consistentes con la hipótesis de un reino presente; pero, según la regla establecida bajo el encabezado anterior, todos son gramaticalmente consistentes con la de un establecimiento futuro cierto.[5]

Continuará

Traducido por Donald Dolmus
En Defensa de la Fe (endefensadelafe.org)

Original article:

El Dr. Andy Woods es oriundo de California, donde asistió a la universidad y obtuvo una licenciatura en Derecho. En 1998, cambió de rumbo y comenzó a hacer la transición del Derecho a la Teología, cuando decidió ingresar al seminario.

Finalmente obtuvo un Doctorado en Exposición Bíblica del Seminario Teológico de Dallas. Actualmente se desempeña como pastor en la Iglesia Bíblica de Sugar Land, en el área de Houston, mientras se desempeña como Presidente del Seminario Teológico Chafer, en Albuquerque, Nuevo México. Es un escritor prolífico y un conferenciante muy solicitado.

Visite el sitio web del Dr. Andy Woods:


Click on this image if you want to buy the book

Notas Finales

[1] Justin Taylor, “An Interview with Russell Moore,” www.thegospelcoalition.org.

[2] E.R. Craven, "Excursus on the Basileia," in Revelation of John, ed. John Lange (New York: Scribner, 1874), 96.

[3] Ibid.,  97.

[4] Ibid., 96.

[5] Ibid., 96-97.

Share/Bookmark