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sábado, 2 de marzo de 2019

Mitos Sobre Israel – Parte 2

Los Principales Mitos Políticos y Teológicos



Los Principales Mitos Políticos

Puesto que ya he escrito ampliamente en esta revista y mis libros acerca del mito de la Teología del Reemplazo, quiero dedicar el resto de este artículo a algunos de los principales mitos políticos sobre el pueblo judío e Israel que existen hoy.

Estos mitos políticos han sido perpetrados por los líderes políticos del mundo, en un esfuerzo por poner a las naciones del mundo contra el pueblo judío, con el objetivo de finalmente destruir su Estado.

Los medios de comunicación están llenos de estos mitos sobre Israel, y han demostrado ser muy eficaces para generar odio mundial hacia el pueblo judío y su Estado. 


1. El primero es que el pueblo judío no tiene derecho a la tierra de Palestina. 

En respuesta a este mito, creo que debería comenzar señalando que la palabra, Palestina, no es una palabra bíblica. No la encontrará en ninguna parte de su Biblia, excepto como una etiqueta en los mapas de la parte posterior de su Biblia.

Esa etiqueta es totalmente incorrecta. Lo que llegó a llamarse Palestina fue la tierra de Israel durante más de 1,500 años — el período de los jueces y reyes bíblicos. La tierra no llegó a ser conocida como Palestina hasta que después de que los romanos destruyeron Jerusalén en el año 70 d.C., y comenzaron a dispersar al pueblo judío en todo el mundo.

La palabra, Palestina, se deriva de la palabra romana para los filisteos. Así que, para humillar al pueblo judío, los romanos cambiaron el nombre de la tierra por el de su enemigo.

Ahora, en cuanto a si los judíos tienen o no un reclamo legítimo sobre esa tierra, ¡la respuesta es absolutamente sí!

El Derecho Bíblico a la Tierra

El Dios del pueblo judío es el que creó el universo, y Salmos 24:1 dice que Él es el dueño de todo. Por lo tanto, Él tiene el derecho de dar cualquier parte de esta tierra a quien quiera. 

Y le complació a Dios dar una gran sección del Medio Oriente al pueblo judío. Este regalo ocurrió hace 4,000 años cuando Dios se le apareció a Abraham y le dio a él y sus descendientes una concesión de tierra como se muestra abajo, que se extiende desde el Mar Mediterráneo hasta el Río Éufrates (Génesis 15:18-21).


Ésta es una concesión de tierra que nunca se ha hecho realidad en su totalidad, pero se hará durante el reinado milenial de Jesús. Una pequeña porción de esta concesión es lo que actualmente se conoce como Palestina. Cuando a Abraham se le prometió la tierra, el área era llamada “La Tierra de Canaán”.

La promesa inicial de esta tierra a Abraham y sus descendientes se especificó en términos generales en el Pacto Abrahámico contenido en Génesis 12.

Génesis 12:1-2, 7

1) Pero Jehová había dicho a Abram: Vete de tu tierra… a la tierra que te mostraré.

2) Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre…

3) A tu descendencia daré esta tierra.

Esta promesa fue reconfirmada a Abraham seis veces más y se explicó detalladamente en Génesis 15:18-21. En Génesis 17:7, Dios declaró que la promesa de la tierra sería “un pacto eterno”. La promesa fue reconfirmada a Isaac y Jacob, y fue reconfirmada a través del rey David en el Salmo 105, cuando escribió:

Salmos 105:1, 8-11

1) Alabad a Jehová…

8) Se acordó para siempre de su pacto;

9) La cual concertó con Abraham, y de su juramento a Isaac.

10) La estableció a Jacob por decreto, a Israel por pacto sempiterno,

11) Diciendo: A ti te daré la tierra de Canaán como porción de vuestra heredad.

El hecho de que los judíos fueron dispersados de la tierra durante 1,878 años — desde el 70 d.C. hasta 1948 — de ninguna manera significa que Dios invalidó su título de propiedad de la tierra. Porque, verá, Dios tenía un segundo pacto con el pueblo judío concerniente a su tierra.

El primer pacto era un Pacto del Título de la Tierra dado a través de Abraham. Era incondicional. El segundo era un Pacto del Uso de la Tierra, dado por medio de Moisés. Era condicional. 

En el Pacto del Uso de la Tierra, Dios le dijo al pueblo judío que el disfrute de la tierra dependería de su obediencia a Su Palabra — si eran fieles, bendiciones; si eran infieles, maldiciones.

Y dejó claro que si se volvían desobedientes y persistían en esa desobediencia, el juicio final que les impondría sería el exilio de la tierra. Pero la tierra aún les pertenecería. Permítanme ilustrar esto:

Supongamos que le da a su hijo adolescente un auto y pone el título a su nombre. Pero deja claro que mientras él viva en casa, bajo su autoridad, habrá reglas para usar el carro. Si las reglas se rompen, dependiendo de la gravedad de la ofensa, el automóvil estará encerrado en el garaje durante un período de tiempo. El coche seguirá perteneciendo al adolescente, pero el disfrute de él se perderá.

El punto crucial aquí es que, aunque el pueblo judío fue dispersado de su tierra en disciplina, no fue despojado de su tierra. El título de la tierra permaneció a su nombre. 

El Derecho Político a la Tierra

Ahora, el mundo, por supuesto, podría preocuparse menos por el título bíblico y eterno de los judíos sobre la tierra. Así que echemos un vistazo a su derecho a la tierra desde un punto de vista político y legal. El hecho de que tienen un derecho legal a la tierra se puede establecer fácilmente.

En noviembre de 1947, las Naciones Unidas oficial y legalmente autorizaron la creación del moderno Estado de Israel.

Antes de ese momento, la tierra había sido un Mandato de la Liga de Naciones, establecida después de la Primera Guerra Mundial. A Gran Bretaña se le había encomendado este Mandato, cuyo propósito era preparar a la gente que vivía en el área para la autonomía final.

En 1947, cuando los británicos anunciaron que estaban listos para entregar el Mandato, las Naciones Unidas aprobaron una división de la tierra entre los judíos y los árabes. Esa división se ilustra en el siguiente mapa. Las tres áreas naranja clara serían el Estado judío, las tres áreas púrpura, el Estado árabe. Jerusalén iba a ser internacionalizada.


Los judíos aceptaron a regañadientes la propuesta y procedieron a establecer su Estado. Los árabes se negaron a aceptar la acción de la ONU y recurrieron a la guerra.

Nadie puede afirmar sinceramente que los judíos no tienen derecho a la tierra. Les pertenece tanto bíblica como legalmente. 

Lea la parte 1 aquí
Lea la parte 3 aquí 

Traducido por Donald Dolmus
En Defensa de la Fe (endefensadelafe.org)

viernes, 1 de marzo de 2019

Mitos Sobre Israel – Parte 1

Los Principales Mitos Políticos y Teológicos



Hay dos tipos de mitos que existen hoy en día con respecto al pueblo judío y su Estado de Israel. Están los terribles mitos teológicos que han sido conjurados por teólogos cristianos, y luego están los mitos políticos, que han sido inventados por los enemigos políticos del moderno Israel. 

Los mitos teológicos se basan en lo que se llama Teología del Reemplazo. Consisten en alegatos como:

1) Dios se ha desentendido del pueblo judío debido a su rechazo y asesinato de Jesús.

2) Dios ha reemplazado a Israel con la Iglesia.

3) Dios ha transferido todas las bendiciones prometidas de Israel a la Iglesia.

4) Dios no tiene propósito alguno para el pueblo judío.

Todas las cuatros acusaciones son evidentemente falsas. Todas las cuatro son mitos totales, y he tratado estos mitos en mis escritos, especialmente en mi libro, “El Pueblo Judío: ¿Rechazado o Amado?”.


Una Verdad Fundamental

El primer punto que debe establecerse firmemente acerca de estos mitos es que no son un accidente. Están firmemente arraigados en el odio obsesivo de Satanás hacia el pueblo judío. Los odia porque:

1) Son el pueblo escogido de Dios.

2) Fue a través de ellos que Dios le dio al mundo las Escrituras.

3) Fue a través de ellos que Dios le dio al mundo el Mesías.

Satanás odia más a los judíos debido a las promesas que Dios les ha hecho. Él ha prometido que:

1) Un gran remanente de los judíos será salvo en los tiempos del fin, en la Segunda Venida de Jesús, cuando se arrepientan y lo acepten como su Mesías (Zacarías 12:10).

2) Los judíos serán entonces reunidos en su tierra natal en fe (Deuteronomio 30:1-5).

3) A la nación de Israel se le dará toda la tierra prometida a ellos en el Pacto Abrahámico (Génesis 15:18-21).

4) El Estado judío será la nación principal en el mundo durante el reinado milenial de Jesús (Isaías 2:1-4).

5) Las bendiciones de Dios durante el Milenio fluirán a las naciones del mundo a través del pueblo judío (Isaías 62:1-7).

6) El mundo respetará al pueblo judío tanto al pueblo judío, que cuando pase un judío, diez gentiles dirán, “Iremos con vosotros, porque hemos oído que Dios está con vosotros” (Zacarías 8:23).

El Monte del Templo en Jerusalén, mirando al noreste. El Muro Occidental, o Muro de los Lamentos, está en el centro, debajo del santuario musulmán llamado el Domo de la Roca.

Satanás no quiere ver que se cumpla una sola de estas promesas y, por lo tanto, está determinado a aniquilar al pueblo judío. De eso se trató el Holocausto, cuando una cuarta parte de ellos fueron asesinados. Y es la razón por la que intentará aniquilarlos una vez más durante la Tribulación, cuando logrará matar a dos tercios de ellos (Zacarías 13:8).

Pero Satanás está destinado a fracasar, porque es la voluntad de Dios traer a un remanente de los judíos al arrepentimiento y la salvación. Y está decidido a cumplir todas las promesas que le ha hecho al pueblo judío. El apóstol Pablo afirmó esto cuando escribió estas palabras:

Romanos 3:1-4

1) ¿Qué ventaja tiene, pues, el judío? ¿o de qué aprovecha la circuncisión?

2) Mucho, en todas maneras. Primero, ciertamente, que les ha sido confiada la palabra de Dios.

3) ¿Pues qué, si algunos de ellos han sido incrédulos? ¿Su incredulidad habrá hecho nula la fidelidad de Dios?

4) De ninguna manera; antes bien sea Dios veraz, y todo hombre mentiroso… 

Durante dos mil años, la Iglesia ha respondido a la pregunta planteada en el versículo 3 con un rotundo, “¡Sí!”. El apóstol Pablo la responde con un definitivo “¡No!”. Comentando más sobre este tema, Pablo escribió:

Romanos 9:3-5

3) Porque deseara yo mismo ser anatema, separado de Cristo, por amor a mis hermanos, los que son mis parientes según la carne;

4) que son israelitas, de los cuales son la adopción, la gloria, el pacto, la promulgación de la ley, el culto y las promesas;

5) de quienes son los patriarcas, y de los cuales, según la carne, vino Cristo, el cual es Dios sobre todas las cosas, bendito por los siglos. Amén.

Estas palabras fueron escritas después del establecimiento de la Iglesia y, como puede ver, Pablo está afirmando que Dios aún tiene una relación con Israel y que no ha les ha negado Sus promesas. En Romanos 9 al 11, Pablo deja en claro que Dios no se ha desentendido del pueblo judío y que la Iglesia no ha reemplazado a Israel. Jesús mismo dijo que no regresaría a esta tierra para reinar hasta el día cuando el pueblo judío esté dispuesto a decir: “¡Bendito el que viene en el nombre del Señor!” (Mateo 23:37-39).

Pero a pesar de estas promesas de Dios, Satanás persiste en su locura por el pueblo judío, porque se ha engañado a sí mismo al creer que puede burlarse de Dios — y no hay engaño peor que el autoengaño.

Y, por lo tanto, Satanás ahora está orquestando a todas las naciones del mundo para que venga contra la pequeña nación de Israel, a través de la perpetración de mitos sobre el pueblo judío y su nación.

Paradójicamente, en el proceso, Satanás está cumpliendo la profecía bíblica, ya que el profeta Zacarías declaró hace 2,500 años que, en los tiempos del fin, todo el mundo vendría contra Israel (Zacarías 12:2-3).


Lea la parte 2 aquí
Lea la parte 3 aquí

Traducido por Donald Dolmus
En Defensa de la Fe (endefensadelafe.org)

jueves, 27 de diciembre de 2018

Audio: Israel – Al Filo de la Profecía (parte 3)


En este programa, hago un análisis de varias profecías bíblicas que nos revelan cuáles serán los próximos eventos proféticos que ocurrirán en el Medio Oriente. Entre ellos:

– La destrucción de Damasco.
– La Guerra del Salmo 83.
– La destrucción del arco de Elam.
– La Guerra de Gog y Magog.

Este programa se transmitió el 04 de diciembre de 2018 en el programa Orientaciones, que se emite en Radio Ondas de Luz.


Escuche la parte 1 aquí
Escuche la parte 2 aquí

miércoles, 26 de diciembre de 2018

Audio: Israel – Al Filo de la Profecía (parte 2)



El 12 de noviembre del año en curso, como respuesta a una operación secreta de las fuerzas especiales israelíes dentro de la Franja de Gaza, en la que un teniente coronel israelí murió y siete terroristas de Hamás fueron abatidos, el grupo terrorista respondió con una andanada de más de 460 cohetes contra civiles israelíes en un período de cerca de 24 horas. 

El sistema de defensa antiaéreo Cúpula de Hierro interceptó más de 100 de ellos. La mayoría del resto cayó en campos abiertos, pero muchos  cayeron dentro de ciudades israelíes, matando a una persona, hiriendo a decenas y causando importantes daños a la propiedad. 

En respuesta, el ejército israelí atacó aproximadamente 160 sitios en la Franja, conectados los grupos terroristas Hamás y Yihad Islámica.

La lucha terminó el martes 13 de noviembre, cuando ambos bandos aceptan un cese al fuego que fue negociado tras bambalinas por los egipcios y la ONU.

La decisión de detener los ataques contra Gaza fue criticada por muchos en Israel y fue citada por Avigdor Lieberman en su decisión el miércoles de renunciar como Ministro de Defensa. 

Este programa se transmitió el 03 de diciembre de 2018 en el programa Orientaciones, que se emite en Radio Ondas de Luz.

Escuche mi análisis  de este ataque en contra de la única democracia del Medio Oriente.

Escuche la parte 1 aquí
Escuche la parte 3 aquí 

Audio: Israel – Al Filo de la Profecía (parte 1)



La Asamblea General de las Naciones Unidas reconocía hace 71 años el derecho de Israel a existir con un Plan de Partición que aprobó la ONU el 29 de noviembre de 1947 y que dividía el territorio del Mandato Británico en la Tierra de Israel en dos Estados nacionales, uno judío y otro árabe, mediante la Resolución No. 181.

¿Cuál es la importancia profética de este evento? ¿Qué relación tuvo con la creación del moderno Estado de Israel?

Esta edición se transmitió el 30 de noviembre de 2018 en el programa Orientaciones, que se emite en Radio Ondas de Luz.


Escuche la parte 2 aquí
Escuche la parte 3 aquí 

martes, 16 de octubre de 2018

Revista Llamada de Medianoche – Octubre 2018

La "superseñal" del tiempo final

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Temas incluidos en esta edición:

»» ¿Por qué en 1948 no se fundó un Estado árabe?
»» El interés común de Moscú y Jerusalén en Siria
»» Israel a la vanguardia en desarrollo de robots
»» La Epístola a los Filipenses
»» ¿Quién retiene al Anticristo? 

Entre otros.

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sábado, 1 de septiembre de 2018

Libro: Los Fundamentos de la Profecía Bíblica – Lección 9 (pdf)

Los Judíos en la Profecía

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Hecho: El enfoque profético de la Biblia sobre Israel es el segundo después de sus profecías concernientes al Mesías.

Escritura Clave:Porque eres [el pueblo judío] pueblo santo a Jehová tu Dios, y Jehová te ha escogido para que le seas un pueblo único de entre todos los pueblos que están sobre la tierra” (Deuteronomio 14:2).


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Estimado lector: Su valiosa contribución, manifestada a través de sus oraciones y sus ofrendas voluntarias, hace posible que sigamos produciendo materiales que contribuirán grandemente a su crecimiento y edificación espiritual.

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viernes, 31 de agosto de 2018

Libro: Los Fundamentos de la Profecía Bíblica – Lección 10

La Teología del Reemplazo

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Hecho: Muchos cristianos creen que la Iglesia ha reemplazado a Israel, y que Dios se ha desentendido de los judíos. 

Escritura Clave:¿Qué ventaja tiene, pues, el judío? ¿o de qué aprovecha la circuncisión? Mucho, en todas maneras. Primero, ciertamente, que les ha sido confiada la palabra de Dios. ¿Pues qué, si algunos de ellos han sido incrédulos? ¿Su incredulidad habrá hecho nula la fidelidad de Dios? De ninguna manera; antes bien sea Dios veraz, y todo hombre mentiroso…” (Romanos 3:1-4).

Historia Temprana

Muy temprano en la historia de la Iglesia, comenzó a desarrollarse una doctrina perniciosa que demonizaba al pueblo judío y que argumentaba que deberían ser perseguidos por rechazar a Jesús como su Mesías. Esto es irónico cuando considera el hecho de que la Iglesia comenzó como una institución judía. Fue fundada en Judea por judíos que eran seguidores de un Mesías judío y todos sus documentos fundacionales fueron escritos por judíos.

Pero el característico sabor judío del cristianismo primitivo no iba a durar mucho. A medida que la Iglesia comenzó a extenderse más allá de Judea, su mensaje fue abrazado por más y más gentiles que no tenían ningún interés en mantener contacto con las raíces judías de la Iglesia. Peor aún, los nuevos líderes gentiles comenzaron a volverse contra los judíos al caracterizarlos como “asesinos de Cristo”.

Considere los siguientes ejemplos:

Ignacio de Antioquía (50-117 EC) – Enseñó que aquellos que participan de la Pascua son partícipes con aquellos que mataron a Jesús.

Justino Mártir (100-106 EC) – Afirmó que el pacto de Dios con Israel ya no era válido y que los gentiles habían reemplazado a los judíos.

Ireneo (130-202 EC) – Declaró que los judíos fueron desheredados de la gracia de Dios.

Tertuliano (155-230 EC) – Culpó a los judíos por la muerte de Jesús y argumentó que habían sido rechazados por Dios.

Eusebio (275-339 EC) – Enseñó que las promesas de la Escritura estaban destinadas para los gentiles y que las maldiciones estaban destinadas para los judíos. Afirmó que la Iglesia era el “verdadero Israel”.

Juan Crisóstomo (349-407 EC) – Predicó una serie de sermones contra los judíos en los que declaró, “La sinagoga no sólo es un burdel y un teatro, también es una cueva de ladrones y un lugar de alojamiento para bestias salvajes… Los judíos son asesinos empedernidos poseídos por el diablo. Su libertinaje y embriaguez los ha entregado a las costumbres de los cerdos”. Negó que los judíos pudieran recibir alguna vez el perdón. Afirmó que era un deber cristiano odiar a los judíos. Afirmó que los judíos adoraban a Satanás. ¡Y este hombre fue canonizado como un santo!

Jerónimo (347-420 EC) – Describió a los judíos como “…serpientes usando la imagen de Judas. Sus salmos y oraciones son los rebuznos de los burros… Son incapaces de entender la Escritura…”.

San Agustín (347-420 EC) – Afirmó que los judíos merecían la muerte pero que estaban destinados a vagar por la tierra para “ser testigos de la victoria de la Iglesia sobre la sinagoga”.

La Edad Media
(Siglos V al XV)

Para la Edad Media, dos conceptos erróneos se habían convertido en doctrina establecida de la Iglesia:

1. Los judíos deberían ser considerados “asesinos de Cristo” y deberían ser maltratados como corresponde.

2. La Iglesia ha reemplazado a Israel, y Dios no tiene ningún propósito futuro para los judíos.

Estos conceptos fueron reforzados a lo largo de la Edad Media por medio de las Cruzadas, la Inquisición, las obras que representaban la pasión, y los libelos de sangre. Los judíos incluso fueron culpados por la epidemia de la Plaga Negra.

La Reforma
(1517-1648)

Lamentablemente, la Reforma no produjo ningún cambio en las actitudes. De hecho, el odio hacia los judíos fue reforzado e intensificado por los escritos de Martín Lutero, el mismo hombre que puso en marcha la Reforma.

Inicialmente, Lutero se mostró comprensivo hacia los judíos porque creía que su rechazo del Evangelio era debido a su reconocimiento de la corrupción de la Iglesia Católica Romana.

Pero cuando continuaron rechazando el Evangelio, Lutero se volvió contra ellos en venganza. En 1543 escribió un panfleto titulado, “Sobre los judíos y sus mentiras”. El documento era una diatriba antisemita. En él, se refirió a los judíos como: “Un pueblo miserable y maldito”, “tontos estúpidos”, “miserables, ciegos e insensibles”, “ladrones y atracadores”, y “las grandes alimañas de la humanidad”.

Habiéndolos deshumanizado y demonizado, Lutero procedió entonces a hacer algunas propuestas asombrosas para lidiar con ellos. Abogó por que sus sinagogas y escuelas fueran quemadas, sus casas debían ser destruidas y sus escritos sagrados debían ser confiscados. Además, pidió que les quitaran su dinero y que los obligaran a realizar trabajos forzados. 

Huelga decir que los nazis citaban alegremente a Lutero mientras subían al poder y ponían en marcha el Holocausto. En su libro, Mein Kampf, publicado en 1925, Adolfo Hitler se refirió a Martín Lutero como “un gran guerrero, un verdadero estadista y un gran reformador”. 

La Actitud Hoy

El horror del Holocausto tendía a enmudecer las formas más radicales de antisemitismo entre los líderes cristianos. Pero en realidad, el antisemitismo continúa hoy en día en una nueva forma sofisticada llamada antisionismo. Mientras que el antisemitismo procuraba expulsar a los judíos de las tierras donde vivían, el antisionismo se niega a aceptar su derecho a vivir en su propia tierra

El Punto de Vista Bíblico

La idea de que la Iglesia alguna vez reemplazó a Israel no está arraigada en la Biblia. Por el contrario, es una expresión de un antisemitismo irracional. Eso no significa que todos los que creen en la Teología del Reemplazo sean antisemitas. 

La mayoría lo cree porque es lo que se les ha enseñado, y no tienen idea de dónde vino el concepto y el daño que le ha hecho al pueblo judío.

Regrese y lea los versículos de Romanos 3 que se citan al comienzo de este capítulo. Pablo pregunta si Dios ha rechazado al pueblo judío debido a su incredulidad. Durante casi 2,000 años la Iglesia ha gritado: “¡Sí”! Pero, ¿qué dice Pablo en respuesta a esta pregunta? “¡De ninguna manera!”. Hace el mismo comentario otra vez en Romanos 11. Comienza ese capítulo preguntando de nuevo si Dios ha rechazado a Su pueblo o no. Y una vez más responde, “¡De ninguna manera!”.

En Romanos 9:1-4, Pablo específicamente declara que las promesas que Dios hizo al pueblo judío aún son válidas. También en Romanos 9:27 le recuerda a sus lectores que Dios ha determinado salvar a un remanente de los judíos. Y él repite esto en Romanos 11:26, donde declara que “todo Israel será salvo”, refiriéndose al remanente que la Biblia dice que aceptará a Jesús como Mesías al final de la Tribulación (Zacarías 12:10).

La Fuente del Antisemitismo

Satanás es la fuente de todo antisemitismo. Él odia a los judíos con pasión por varias razones: 
  • Los odia porque Dios proveyó tanto la Biblia como el Mesías por medio de ellos.
  • Los odia porque Dios los llamó a ser Su Pueblo Escogido. 
  • Los odia porque Dios ha prometido salvar a un gran remanente de ellos. 
  • Los odia porque Dios los ama.

El resultado es que él trabaja tiempo extra para plantar semillas de odio hacia los judíos en los corazones de las personas. Él está determinado a destruir a todos los judíos sobre el planeta tierra para que Dios no pueda cumplir Su promesa de salvar a un gran remanente. Trató de aniquilarlos en el Holocausto. Fracasó. Tratará de destruirlos una vez más durante la última mitad de la Tribulación. Fracasará otra vez.

Salmos 129:5-8

5) Serán avergonzados y vueltos atrás
Todos los que aborrecen a Sion.

6) Serán como la hierba de los tejados,
Que se seca antes que crezca;

7) De la cual no llenó el segador su mano,
Ni sus brazos el que hace gavillas.

8) Ni dijeron los que pasaban:
Bendición de Jehová sea sobre vosotros;
Os bendecimos en el nombre de Jehová.

Preguntas:

1) El desarrollo de la Teología del Reemplazo se basaba en la acusación de que, debido a que los judíos fueron los que mataron a Jesús, Dios se desentendió de ellos y reemplazó a Israel con la Iglesia. Lea Hechos 4:27 y enumere a continuación a los que el versículo dice que fueron responsables de la muerte de Jesús. ¿Hay alguna persona en particular que falte en el versículo?

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2) Aquellos que defienden la Teología del Reemplazo argumentan que los judíos perdieron su título de la tierra de Canaán ya fuera por su desobediencia o porque la promesa se cumplió en algún momento en el pasado. Lea Deuteronomio 12:1; Salmos 89:30-35 y Salmos 105:8-11. Con base en estos versículos, ¿cree que el pueblo judío ha perdido el título de su tierra?

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3) El segmento del Nuevo Testamento que ha sido más ignorado en la historia de la enseñanza y predicación cristiana es Romanos 9-11. Lea estos tres capítulos. ¿Por qué cree que han sido ignorados?

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4) Los defensores de la Teología del Reemplazo argumentan que el regreso del pueblo a su patria en el siglo XX y el restablecimiento de su Estado son accidentes de la historia y no tienen relevancia espiritual o bíblica. Lea Isaías 11:10-12; Ezequiel 37:1-12 y Zacarías 10:6-12. ¿Qué opina?

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5) Deuteronomio 7:6-9 dice que el pueblo judío es el “Pueblo Escogido” de Dios. Éstas son las palabras de Moisés. Fueron confirmadas muchos años después por el profeta Isaías (Isaías 41:8-9). ¿Qué cree que significa  ser el “Pueblo Escogido” de Dios? ¿Significa que son salvos? Finalmente, ¿cree que siguen siendo el “Pueblo Escogido” de Dios?

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martes, 7 de agosto de 2018

Revista Llamada de Medianoche – Agosto 2018

¿Es Dios sionista?

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Temas incluidos en esta edición:

»» En preparación para la guerra venidera
»» ¿Pierde Israel el apoyo de los judíos estadounidenses?
»» Salida de Israel de la UNESCO
»» La Epístola a los Filipenses
»» ¿Demuestra el sufrimiento en el mundo que Dios no existe? 

Entre otros.

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lunes, 9 de julio de 2018

¿Sobrevivirá el Moderno Israel?

El Destino de Israel




Una reciente edición de la revista Israel Hoy presentó un artículo de su editor, Ariel Schneider, titulado, “¿Cuánto tiempo sobrevivirá el tercer reino de Israel?”. 


Mientras pensaba en el 70mo aniversario de Israel, se le ocurrió a Schneider que, “en sus 3,500 años de historia, la nación de Israel sólo tres veces ha podido vivir libre, unida, soberana e independiente, y sólo por períodos muy cortos de tiempo".

El Primer Reino Unido

Él argumenta que la primera vez que Israel realmente existió como una nación soberana y unida fue durante los reinados de David y Salomón — un período de 82 años, desde el 1010 hasta el 928 a.C. —. David reinó sobre un Israel unido durante 40 años (1010 a 970 a.C.). Fue seguido por su hijo, Salomón, quien también reinó durante 40 años (970 a 930 a.C.). 

Pero, a dos años del reinado del hijo de Salomón, Roboam, una guerra civil estalló debido a los impuestos excesivos, y el reino se dividió entre 10 tribus en el norte y dos en el sur. El área del norte llegó a conocerse como el estado de Israel, con su capital en Samaria. Las dos tribus en el sur llamaron su estado Judá, y su capital estaba en Jerusalén.

Los Reinos Divididos

El reino del norte de Israel fue apóstata desde el comienzo. Ni una sola vez en sus 208 años de historia (930 a 922 a.C.) tuvo un rey que, en los ojos de Dios, fuera considerado justo. Su dura rebelión contra Dios y Su Palabra ocasionó la destrucción del reino por los asirios en el año 722 a.C.

El reino del sur de Judá fue bendecido con grandes reyes como Josafat, Uzías, Ezequías, y Josías. El reino también fue bendecido con prosperidad, pero su mayor bendición era una espiritual, ya que la gloria shejiná de Dios residía en el templo de la nación, en Jerusalén.

Pero los de Judea gradualmente cayeron en apostasía, al hacer matrimonios mixtos con los canaanitas, y terminaron adorando a sus dioses. El Señor envió juicios correctivos para llamarlos al arrepentimiento, pero persistieron en su rebelión. Dios también envió muchas voces proféticas para llamarlos al arrepentimiento, y para advertirles del juicio inminente, pero tenían oídos sordos. 

Finalmente, Dios permitió que los babilonios los conquistaran y los llevaran en cautiverio. Después de que Babilonia cayó ante los persas, a los judíos se les permitió regresar a su patria, pero permanecieron bajo la dominación persa hasta que la nación fue conquistada por Alejandro Magno, en el año 332 a.C. Después de su muerte, los judíos llegaron a estar bajo el gobierno del reino seléucida griego. 

El Segundo Reino Unido

Pasarían 800 años después del reino unido de David y Salomón antes de que los judíos volvieran a experimentar un reino unido e independiente. Fue el producto de la revuelta hasmonea contra los ocupantes seléucidas griegos, que comenzó en el año 164 a.C. Once años después, en el año 153 a.C., Jerusalén fue conquistada y el templo fue purificado. En el año 135, Juan Hircano fue coronado rey de Israel, y seis años después, en el año 129 a.C., él proclamó la independencia total de Israel. Este estado soberano duró 66 años, hasta el año 63 a.C., cuando los romanos conquistaron Jerusalén. 


Breve Soberanía

Esto significa que todas las tres soberanías unidas de Israel sumadas equivalen a sólo 218 años (David-Salomón, 82 años; Hasmonea, 66 años; y el moderno Israel, 70 años). Si cuenta la existencia de Israel como un estado en una forma u otra desde el tiempo del rey Saúl, (año 1030 a.C.), hasta su destrucción bajo los romanos en el año 70 d.C., tiene un total de 960 años. Durante ese tiempo, el pueblo judío vivió bajo un gobierno unificado y soberano durante sólo 148 años (David-Salomón, 82 años; y Hasmoneo, 66 años), totalizando sólo el 15 por ciento del tiempo.

Algunos historiadores añaden el período cuando Judá existió sola, desde el año 722 al 586 a.C., un período de 136 años. Pero durante esos años, la nación estaba a menudo bajo la dominación de potencias extranjeras, como los asirios y los egipcios, que les exigían pagar tributo como un estado vasallo.

El punto es que Israel nunca ha sido capaz de existir por mucho tiempo como una nación independiente, unificada y soberana. 

Prospectos para Hoy

Y, por esa razón y otras, la mayoría de expertos en el Medio Oriente sugieren que el actual estado de Israel (el tercer reino unido) también tendrá una corta vida. En la superficie, esa estimación parece válida. Después de todo, los siete millones de judíos de Israel están rodeados por 22 naciones árabes hostiles con más de 400 millones de personas. La sobrevivencia de Israel parece no tener esperanza.

Pero, “no se adormecerá ni dormirá El que guarda a Israel” (Salmos 121:4). Israel ha estado involucrado en guerras constantes y sin fin desde que el estado moderno fue estableció, e Israel ha sobrevivido milagrosamente. Esto es en cumplimiento de la profecía bíblica, que dice que en los tiempos del fin, Israel será como David contra Goliat (Zacarías 12:8), y que Israel consumirá a sus adversarios como un fuego ardiente en medio de una pila de madera (Zacarías 12:6).

La Biblia también promete una protección sobrenatural de Israel cuando la nación sea invadida en los tiempos del fin, por una poderosa coalición de enemigos dirigidos por Rusia (Ezequiel 38 y 39). Este abrumador ejército será destruido por Dios con confusión en el campo de batalla, terremotos, pestilencia, lluvia torrencial, fuego y azufre (Ezequiel 38:20-22; 39:6).

Pero la Biblia también profetiza que el actual estado de Israel será derrocado por el Anticristo a la mitad de la Tribulación. Cuando los judíos lo rechacen como su mesías (Apocalipsis 12:13-17). Durante la última mitad de la Tribulación (3 ½ años), el Anticristo estará obsesionado con aniquilar al pueblo judío, y se dispersarán a otras naciones, incluyendo a la moderna Jordania, donde serán protegidos sobrenaturalmente (Daniel 11:41).

Al final de la Tribulación, se nos dice que el remanente de los judíos sobrevivientes en todo el mundo pondrá su fe en Yeshúa (Jesús) como su Mesías (Zacarías 12:10; 13:1).

Cuando Jesús regrese a esta tierra al final de la Tribulación, reunirá a todos los judíos creyentes en su patria y los establecerá como la nación primaria del mundo, y ellos “nunca más serán arrancados” (Amós 9:15).

¡Maranatha!

Traducido por Donald Dolmus
En Defensa de la Fe (endefensadelafe.org)

Original article:
Will modern day Israel survive?

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