domingo, 9 de noviembre de 2008

Actualización de “El Final Profético de Damasco”

Por Nathan Jones


En agosto, publiqué un artículo titulado “El Final Profético de Damasco”. El artículo cubre lo que Isaías 17:1-14 y Jeremías 49:23-27 declaran acerca de lo que será el futuro de la ciudad más antigua existente en el mundo; la capita de Siria, Damasco. La Biblia declara que Israel destruirá a Damasco en un día, con tal fuerza que el uso de un arma nuclear parece ser el único método probable.

Con todo lo que está ocurriendo últimamente en las noticias, ¿por qué Israel apuntaría a Damasco en lugar de, digamos, la capital de Irán, Teherán? Después de todo, Irán es el país que está empecinado en construir un arma nuclear tan rápido como pueda para “borrar del mapa a Israel”. ¿Por qué sería Damasco apuntada primero?

Un artículo del 6 de octubre del 2008 del G2 Bulletin de Joseph Farah, reportado en
WorldNetDaily podría tener la respuesta. Parecería que mientras el mundo está enfocado en que Irán está construyendo armas nucleares, Siria es el país que está “actuando como un canal encubierto para el programa de Irán, y podría estar obteniendo ayuda de Corea del Norte y elementos de la red nuclear de Al Qaeda de Pakistán”.

Entonces, lo que esto significa para Israel es que Siria es probablemente la mayor de las amenazas nucleares a su sobrevivencia. Con Irán y Corea del Norte estableciendo sus tiendas de ovijas en Siria,Damasco tendría que ser removida por Israel para eliminar su más grande amenaza potencial.

Versión de Siria de la infiltración de su espacio aéreo por las Fuerzas Aéreas de Israel

Según el orden de los comentarios:

1. Los jets de las FAI entran al espacio aéreo sirio
2. Los aviones cruzan la barrera del sonido y sueltan las municiones
3. Los residentes reportan haber escuchado aviones


De acuerdo con la Biblia, Damasco ciertamente obtendrá un arma nuclear, pero no será una que hayan hecho o deseado.

Traducido por: Donald Dolmus
Del artículo: Update on the Prophetic End of Damascus

sábado, 8 de noviembre de 2008

¡Cómo ladrón en la noche!

Por Terry James


Ningún pasaje escritural en la Palabra de Dios apunta claramente a la primera de las dos fases de la segunda venida de Jesucristo como lo hace el siguiente: “Porque vosotros sabéis perfectamente que el día del Señor vendrá así como ladrón en la noche”. (1 Tes. 5: 2)

Los que nos adherimos al punto de vista pre-tribulacionista, somos frecuentemente acusados de ser engañadores. Somos condenados por nuestros detractores de estar extraviando a los cristianos que ahora están vivos – si viven para verlo – quienes requerirán soportar la tribulación, y tendrán, por lo tanto, que lavar sus ropas en preparación para recibir el Reino de Dios. Somos castigados por imponer sobre creyentes inocentes e ingenuos un “rapto secreto” que de alguna manera conducirá a estos cristianos a tomar la marca de la bestia (Ap. 16-18)

No estoy precisamente seguro de su “razonamiento”, pero creo que ellos afirman esto porque están convencidos de que aquellos que se dejan engañar por el punto de vista del rapto no serán capaces de reconocer al Anticristo cuando tome el poder. Los que enseñamos el Rapto pre-tribulación, sigue la acusación, hemos guiado falsamente a estas personas a creer que la Iglesia no estará aquí cuando el Anticristo esté en la escena mundial.

Casi todos los que son antagónicos a la doctrina del Rapto pre-tribulación enseñan que los “elegidos” tendrán que soportar parte o todos los siete años del periodo de la Tribulación. Aquellos que se aferran a un rapto post-tribulación o a una posición de que no hay Rapto, creen que Cristo regresará al final de la Tribulación, en Armagedón. Ellos se aferran a la noción de que ése es Su único retorno en la segunda venida. Hay otras opiniones de la segunda venida que tienen el retorno de Cristo cuando la tierra es perfeccionada y preparada, pero no analizaremos eso en este ensayo.

Veamos sólo las posiciones del Rapto pre-tribulación y el post-tribulación con el propósito de explorar el significado de las referencias de “como ladrón en la noche” en 1 Tes. 5:2 y 2 P. 3:10

Estos dos puntos de vista – el pre-tribulaciòn y el post-tribulación – ofrecen el mayor contraste a examinar en la consideración del segundo advenimiento de Cristo, dentro de la creencia general de que el Rapto ocurrirá, de acuerdo con la profecía bíblica, antes de que el pie de Cristo en realidad pise el Planeta Tierra.

El enfoque pre-tribulacionista del Rapto dice que la segunda venida de Cristo es en dos fases, separadas por al menos siete años. El enfoque post-tribulacionista afirma que el Rapto y el retorno de Cristo al Monte de los Olivos ocurre casi simultáneamente, ciertamente con no más de unos cuantos días separando los dos eventos. La posición post-tribulacionista afirma que no hay un “Rapto secreto”. El retorno de Cristo será visto completamente en los cielos por todos, incluyendo los cristianos, quienes estarán vigilando de que Él aparezca en medio de la oscuridad de esa hora.

Coincidimos en que el Rapto de la Iglesia (todos los creyentes en Jesucristo nacidos de nuevo para salvación desde la Era de la Iglesia nacida en Pentecostés) lo menos que será es “secreto”. El mundo irá inmediatamente hacia un caos cataclísmico en el momento en que ese evento sorprendente ocurra. La imaginación es presionada fuertemente para entender las ramificaciones de lo que pasará cuando millones desaparezcan de repente. Todos los niños debajo de la edad de responsabilidad se habrán ido en ese increíble instante de tiempo. Todos los bebés (incluyendo a aquéllos en los vientres de sus madres) estarán inmediatamente en la presencia de Cristo en las nubes de gloria. Cada cuerpo de cada cristiano muerto será levantado para unirse con su alma para encontrar a Cristo en el aire en ese átomo de tiempo.

El Rapto será desconcertante y para algunos, un fenómeno inexplicable, pero no será un secreto. Ocurrirá ante los ojos estupefactos de un planeta de terrícolas dejados atrás. Esta declaración de que Jesús llamará a Su Iglesia para estar con Él a muchos les parece audaz. Pero, al apóstol Pablo no le pareció así. El estaba muy confiado – incluso inamovible – en su profecía acerca del “misterio” que había recibido del Espíritu Santo para instruir a todos los creyentes a través de la Era de la Gracia (Era de la Iglesia)

“He aquí, os digo un misterio: no todos dormiremos; pero todos seremos transformados, en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados” (1 Co. 15: 51,52)

Él explica lo que ocurrirá enseguida, en esa estupenda fracción de tiempo: “Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor; que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron. Porque el Señor mismo, con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor” (1 Tes. 4:15-17)

Jesús mismo habló de este “misterio” al que se refiere Pablo en 1 Co. 15:51. El Señor explica lo que pasa después que los creyentes – tanto los cuerpos de los muertos como los de aquéllos que están vivos – son agarrados hacia el aire para estar con Él: No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. En la casa de mi Padre, muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis” (Jn. 14:1-3)

Así que el Rapto tomará lugar. Los creyentes y los cuerpos de aquéllos que murieron durante la Era de la Iglesia serán “capturados” en un simple momento de tiempo. “Todos”, no “algunos” irán instantáneamente a estar con Jesús, quien los llevará al cielo, donde El ha estado preparando sus moradas desde que Él ascendió del Monte de los Olivos.

De nuevo, la posición pre-tribulación acerca de este gozoso evento es que es inminente (puede ocurrir en cualquier momento) y ocurrirá antes de que el periodo de la Tribulación comience. La posición post-tribulación afirma que ocurre al final del tiempo más terrible de la historia humana, mientras Jesucristo está retornando del cielo en Armagedón.

El enfoque pre-tribulacional sostiene que ocurrirá en un tiempo desconocido. Será una intrusión sorprendente, repentina y sin anuncio para el mundo entero en los negocios usuales del Planeta Tierra. El post-tribulacional proclama que ocurrirá después de todos los horrores de los juicios descritos en Apocalipsis.

El enfoque pre-tribulacional dice que el mundo entero (los moradores de la tierra dejados atrás) no lo verán venir. El Rapto causará que todos aquéllos dejados en la tierra se pregunten acerca de lo que ocurrió. El post-tribulacional afirma que todos los ojos verán la segunda venida de Cristo a un planeta infernal y entonces los santos vivos y muertos serán reunidos con Cristo.

La cuestión definitiva a considerar en el análisis de los dos enfoques diametralmente diferentes del Rapto y la Segunda Venida está envuelta en el término “ladrón en la noche”. El apóstol Pedro usa otra vez esta expresión misteriosa, usada primero por Pablo en 1 Tes. 5:2: “Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, y los elementos ardiendo serán desechos, y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas” (2 P. 3:10)

Pedro está diciendo aquí que el día del Señor – esa ocasión cuando Dios y Su Cristo, Su Hijo, toman el control de este planeta caído – empezará como un ladrón en la noche. Será una entrada forzada repentina y catastrófica sobre un mundo que estará haciendo negocios como de costumbre (lea Lc. 17:26-29 para entender cómo las cosas estarán ocurriendo como de costumbre cuando Cristo regrese)

Esta descripción difícilmente se adecua al enfoque post-tribulacional o cualquier otro enfoque que afirme que Cristo raptará a Su Iglesia durante un tiempo de dificultad sin precedente (Jer. 30:7; Mt. 24:21) Esto indica que será una sorpresa total, porque un ladrón en la noche no anuncia su venida con una gran y cataclísmica fanfarria. La intrusión es rápida y sigilosa, un evento totalmente inesperado.

Pedro predice en estos pasajes que el “día del Señor” comenzará entonces su curso, hasta la renovación de los cielos y la tierra. El Rapto comenzará este “día del Señor”, el cual durará al menos 1,007 años.

Esta es la primera fase de la Segunda Venida de Cristo. El Rapto ocurre como un “ladrón en la noche”. El segundo advenimiento, cuando el pie de Jesús se plante sobre el Monte de los Olivos es la segunda fase de su Segunda Venida.

Hay algunos que dicen con vehemencia que es blasfemo comparar la segunda venida de Cristo con la intrusión de un ladrón en la noche. ¿Cómo nos atrevemos a equiparar a su Señor con un “ladrón”?

¿En serio? Aquí está lo que Jesús, el Creador de todas las cosas, dijo acerca de este asunto:

“Pero sabed esto, que si el padre de familia supiese a qué hora el ladrón habría de venir, velaría y no dejaría minar su casa. Por tanto, también vosotros estad preparados; porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora que no pensáis”. (Mt. 24:43, 44)


Parece ser un buen caso para la intervención repentina del Señor en los asuntos infames de este mundo que es cada vez más perverso, ¿no es así? Ese momento de ladrón en la noche podría ocurrir en cualquier momento. Ciertamente, los signos de la tribulación están empezando a ocurrir.

“Cuando estas cosas comiencen a suceder, erguíos y levantad vuestra cabeza, porque vuestra redención está cerca”. (Lc. 21:28)


Traducido por Donald Dolmus

martes, 4 de noviembre de 2008

¿Pueden pelear los huesos secos de Israel?

Ezequiel, ¿pueden los huesos secos
de Israel pelear?
Por: Bill Salus


Hoy en día, hay numerosos libros llenando los estantes de las librerías, que prevén la próxima invasión contra Israel, por una coalición equipada con armas nucleares dirigida por Rusia e Irán. Las relaciones entre Rusia e Irán nunca han sido más fuertes, causando que el espectador serio se pregunte si este asalto está a punto de ocurrir. Prescritos en Ezequiel 38 y 39 se encuentran la sobrevivencia de Israel y el fallecimiento de la confederación.

Dándole vuelta a una página de la Biblia hacia Ezequiel 37:10, nos fue dicho que Israel produciría algún día un “ejército grande en extremo”. Este ejército, las Fuerzas de Defensa de Israel, existe en la actualidad. Aunque parecería que este ejército ha surgido para combatir en el próximo conflicto dirigido por Rusia e Irán, la participación de las FDI (IDF, por sus siglas en inglés) en la batalla es mínima. En cambio, según Ezequiel 39:3-6, acontecimientos divinos son los que hacen colapsar esta coalición. Esto nos señala justificadamente a la pregunta: ¿Qué acontecimiento militar futuro le otorga a las FDI la estima de “grande en extremo”?

Las claves depositadas en Ezequiel 37:1-9 nos ayudan a descubrir qué hizo necesaria la existencia de las FDI. Estos pasajes nos informan que hace casi 2,600 años el profeta hebreo fue adelantado en el tiempo hacia 1,940, en el cual el visionó el Holocausto. Él vio un valle lleno de huesos secos, los cuales representaban al pueblo judío en una condición horrorosamente crítica. A él se le preguntó, “¿pueden estos huesos vivir?”, o simplemente dicho, ¿puede la raza judía sobrevivir? No sólo sobrevivirían, le fue dicho, sino que también serían restaurados a su antigua patria Israel y emergerían en un “ejército grande en extremo”.

Al hacer alusión a este ejército, él causa que la humanidad considere su propósito. ¿Por qué necesitarían que los judíos sobrevivientes se graduaran de refugiados a soldados? Asombrosamente, vemos que las guerras árabes que han fracasado una tras otra, han causado la creación de las FDI. ¡Los enemigos de Israel han aprendido rápidamente que los “huesos secos” de Ezequiel pueden pelear!


Al insertar estratégicamente la profecía del Salmo 83 en algún lugar entre los eventos de Ezequiel 37:1-13 y Ezequiel 38, llegamos a reconocer el propósito primario del ejército emergente de Ezequiel. El Salmo 83 nos dice que los árabes le pisarán los talones a los alemanes con su propio intento genocida. Este salmo anticipa el desarrollo futuro de una confederación predominantemente árabe que pronto procurará destruir el estado judío y borrar para siempre el nombre de Israel del mapa.

Aunque las Fuerzas de Defensa de Israel no juegan un papel importante en Ezequiel 38 y 39, ellos se enfrentarán con una confederación árabe, consistente de sirios, saudíes, palestinos, jordanos, egipcios, libaneses y sus entidades terroristas asociadas, como Hizbolá y Hamás. Coincidentemente, estas poblaciones no están enumeradas en la coalición dirigida por Rusia e Irán de Ezequiel 38. Tal como muestra un mapa moderno del Medio Oriente, tienen rodeado a Israel. De acuerdo con numerosas profecías, Israel irá balístico y derrotará rotundamente a esta confederación. Con la victoria, el ejército judío obtiene el título de ser “grande en extremo”.

Mayores detalles acerca de la próxima guerra árabe – israelí pueden ser obtenidos en mi nuevo libro ISRALESTINE – The Ancient Blueprints of the Future Middle East, disponible en
http://www.isralestine.net/.


Los pasajes que retratan la expansión de Israel, la destrucción de Damasco, la rendición de la soberanía jordana, el destino final de los palestinos y muchos otros eventos relacionados están detallados en el libro.


El destino diseñó el surgimiento de las FDI para prevenir la destrucción del actual Israel. Ezequiel anticipó la llegada de estas Fuerzas de Defensa de Israel. Ahora, la única cosa que se encuentra entre el ejército de huesos secos de Ezequiel y su título de “grande en extremo” es la Conquista Israelí sobre la Confederación Árabe del Salmo 83.

Traducido por: Donald Dolmus

domingo, 2 de noviembre de 2008

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